El cuatrienio de la fiscal Camargo arranca con la acusaci¨®n a los polic¨ªas que interrogaron a la ni?era de Laura Sarabia

Ser fiscal general de Colombia es mucho m¨¢s que un sue?o para Luz Adriana Camargo. Inici¨® su carrera hace 37 a?os como sustanciadora en Paloquemao, el complejo de juzgados penales en Bogot¨¢, su disciplina la condujo a distintos cargos de relevancia ¡ªdestacan sus etapas como magistrada auxiliar de la Corte Suprema de Justicia y jefa de investigaci¨®n de la ...

Ser fiscal general de Colombia es mucho m¨¢s que un sue?o para Luz Adriana Camargo. Inici¨® su carrera hace 37 a?os como sustanciadora en Paloquemao, el complejo de juzgados penales en Bogot¨¢, su disciplina la condujo a distintos cargos de relevancia ¡ªdestacan sus etapas como magistrada auxiliar de la Corte Suprema de Justicia y jefa de investigaci¨®n de la Comisi¨®n Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CIGIG)¡ª y se comprometi¨® a ser una fiscal aut¨®noma. As¨ª lo dijo en su posesi¨®n, el 22 de marzo, en la Casa de Nari?o, cuando dijo que planea ejecutar sus funciones ¡°con orgullo e independencia¡±. Esa promesa ya fue puesta a prueba en uno de los casos m¨¢s medi¨¢ticos que lleva la instituci¨®n y Camargo ha salido airosa.

Dos d¨ªas antes de que Camargo se juramentara en el cargo, la Fiscal¨ªa anunci¨® que un fiscal present¨® un escrito de acusaci¨®n en contra de los tres polic¨ªas involucrados en el interrogatorio a Marelbys Meza, la exni?era del hijo de Laura Sarabia, entonces jefa de gabinete y hoy directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (DAPRE). Se trata del coronel Carlos Feria, jefe de la oficina de Protecci¨®n Presidencial; el capit¨¢n Elkin G¨®mez; jefe de la Oficina de Pol¨ªgrafos del Grupo de Estudios de Seguridad; y el intendente Jhon Sacrist¨¢n. Los tres polic¨ªas vienen siendo investigados desde 2023 por los delitos de abuso de la funci¨®n p¨²blica, constre?imiento ilegal y peculado. A Sacrist¨¢n, adem¨¢s, se le se?ala de acceso abusivo a sistema inform¨¢tico. Cuando estall¨® el esc¨¢ndalo, el Gobierno pag¨® un alto precio, que puede ser todav¨ªa mayor si la instituci¨®n que lidera Camargo tiene ¨¦xito en sus intenciones.

Unos maletines con dinero se extraviaron en la residencia de Sarabia, quien lo report¨® a las autoridades. Eso llev¨® a que su entonces empleada fuera trasladada a un edificio adscrito a la Presidencia para ser sometida a una prueba de pol¨ªgrafo. La revelaci¨®n de esos hechos fue el inicio de una avalancha de pol¨¦micas que incluye la interceptaci¨®n ilegal de las comunicaciones de Meza y audios de Armando Benedetti, exembajador en Caracas, sugiriendo el ingreso de dineros no reportados a las cuentas de la campa?a presidencial. El cataclismo pol¨ªtico oblig¨® al presidente a aceptar la renuncia de Sarabia, su mano derecha, y Benedetti. Tard¨® varios meses en reincorporarlos. A Sarabia primero la design¨® como cabeza del poderoso DAPRE y desde febrero como su nueva secretaria de Presidencia; a Benedetti ese mismo mes lo nombr¨® como embajador ante la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentaci¨®n (FAO).

En noviembre, un fiscal imput¨® cargos a Feria, G¨®mez y Sacrist¨¢n ante un juez de control de garant¨ªas. Los tres se declararon inocentes. Que la Fiscal¨ªa proceda con la acusaci¨®n indica que conf¨ªa en que tiene pruebas suficientes para demostrar las irregularidades que endilga a los tres uniformados. El escrito de acusaci¨®n se?ala que el coronel Feria, el de mayor rango y m¨¢s cercano a Petro por su funci¨®n en Presidencia, ¡°habr¨ªa dispuesto de un veh¨ªculo oficial para trasladar a Marelbys Meza desde su residencia en Soacha [un municipio adyacente a Bogot¨¢], hasta el edificio Gal¨¢n, donde funciona la Sala de Pol¨ªgrafo de la Casa de Nari?o¡± y que posteriormente, junto con G¨®mez y Sacrist¨¢n, incurri¨® en atropellos ¡°al vulnerar la autonom¨ªa de Meza y someterla a un trato injusto¡±.

Los abusos, seg¨²n el documento, fueron evidentes. Tan pronto Meza lleg¨® a la Oficina de Pol¨ªgrafos, se le exigi¨® que entregara su tel¨¦fono celular. Una vez respondi¨® los interrogantes formulados, afirma la acusaci¨®n, se le entreg¨® de vuelta el dispositivo con el objetivo de que introdujera la clave de seguridad y despu¨¦s quit¨¢rselo a la fuerza. ¡°Al parecer, la mujer desbloquea el equipo e inmediatamente el intendente se lo arrebat¨® nuevamente y retuvo mientras extra¨ªa informaci¨®n¡±. El escrito advierte que los uniformados ¡°hicieron preguntas que suger¨ªan la responsabilidad de la exni?era en la p¨¦rdida del dinero¡±.

La sola acusaci¨®n afecta la legitimidad del Gobierno, as¨ª la Fiscal¨ªa no investigue a Sarabia. Una eventual sentencia desfavorable a los uniformados ser¨ªa todav¨ªa peor. El presidente, conocido por denunciar los excesos de la autoridad de sus antecesores cuando era opositor, ver¨ªa c¨®mo la justicia condena un caso cometido bajo su Administraci¨®n y en el coraz¨®n del Ejecutivo.

Este ser¨¢ uno de los primeros casos medi¨¢ticos que enfrente Camargo, quien deber¨¢ definir si la Fiscal¨ªa mantiene su conflicto frente a la Justicia Penal Militar, que solicita desde el 18 de marzo que el expediente del coronel Feria pase a ser de su competencia. La Fiscal¨ªa radic¨® el escrito de acusaci¨®n, pese a que conoc¨ªa de esta petici¨®n, por lo que la ¨²ltima palabra sobre qui¨¦n adelantar¨¢ el proceso quedar¨¢ en manos de la Corte Constitucional.

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