El uribismo adelanta la carrera por la Presidencia de Colombia con Miguel Uribe Turbay y Mar¨ªa Fernanda Cabal a la cabeza
Con n¨²meros adversos en las encuestas, el Centro Democr¨¢tico apuesta por una larga campa?a para las elecciones de mayo de 2026. Busca dar a conocer a sus cinco precandidatos
El Centro Democr¨¢tico, el partido que fund¨® y lidera el expresidente ?lvaro Uribe, se ha metido de lleno en los preparativos para las elecciones de 2026. ¡°Es muy poquito lo que falta. Hay que prepararnos para ganar¡±, clam¨® el domingo el exmandatario de derecha. Casi simult¨¢neamente, el senador Miguel Uribe Turbay relanz¨® su precandidatura con un amplio despliegue: un video en el sitio en el que su madre fue asesinada en 1991, el anuncio de la contrataci¨®n de estrategas internacionales, una rueda de prensa y un reluciente logotipo celeste que proclama que con ¨¦l ¡°vuelve la seguridad¡±. Mientras tanto, ¨¦l y otros cuatro aspirantes negocian un mecanismo para seleccionar al candidato oficial y preparan una serie de foros conjuntos para darse a conocer a lo largo y ancho del pa¨ªs. El 2026 parece estar especialmente cerca para la derecha, en la que Uribe Turbay y Mar¨ªa Fernanda Cabal arrancan como favoritos.
El adelanto del calendario electoral tiene varias explicaciones. Carlos Su¨¢rez, socio de la firma Estrategia y Poder y quien ha asesorado a candidatos de la derecha por a?os, comenta por tel¨¦fono que el presidente Gustavo Petro fue quien anticip¨® el tema, hace ya un a?o. ¡°Dijo que el progresismo necesita cuatro a?os m¨¢s, que la verdadera pelea est¨¢ en 2026. Tir¨® el anzuelo y los primeros que lo picaron fueron los de la llamada derecha¡±, remarca. Los senadores Uribe Turbay, Paloma Valencia, Paola Holgu¨ªn y Andr¨¦s Guerra comenzaron a deslizar sus intenciones de aspirar a la Presidencia y se sumaron a Cabal, que lo hab¨ªa anticipado a principios de 2023. Todos est¨¢n a la sombra del archiconocido expresidente y, por consiguiente, pueden aprovechar una campa?a larga para hacerse m¨¢s visibles y sumar apoyos. Es dif¨ªcil que el uribismo pueda llegar solo a las urnas en un contexto de problemas judiciales y bajos niveles de aprobaci¨®n del exmandatario: tras definir un aspirante propio, probablemente negociar¨¢n con el resto de la oposici¨®n y buscar¨¢n un candidato ¨²nico que enfrente al petrismo.
La carrera uribista no pasa por un gran debate ideol¨®gico. Los cinco precandidatos defienden el legado del expresidente, enfatizan los mensajes de mano dura contra los grupos armados y hablan del respeto a la propiedad privada. Para el estratega Camilo Rojas, viejo conocedor de la derecha, est¨¢n ¡°encerrados en su propio discurso de seguridad¡±, algo que les exige la militancia y que a la vez limita sus posibilidades de atraer a votantes m¨¢s moderados. Las diferencias est¨¢n m¨¢s en sus estilos y personalidades. Cabal representa a la ultraderecha, con formas provocadoras similares a las de Javier Milei en Argentina o Nayib Bukele en El Salvador. Los dem¨¢s son un poco m¨¢s moderados. Uribe Turbay y Valencia son de familias de abolengo, nietos de exmandatarios ¡ª¨¦l de un liberal de derecha, ella de un conservador¡ª. Holgu¨ªn y Guerra son fuertes en Antioquia, el departamento en el que el expresidente Uribe forj¨® su carrera pol¨ªtica.
Los sondeos son dif¨ªciles de leer en etapas tan iniciales, pues reflejan m¨¢s la recordaci¨®n de cada nombre que su viabilidad electoral. En una reciente encuesta de Guarumo con candidatos de todos los sectores, Cabal registra un 6,4% de intenci¨®n de voto frente a un 1,4% de Valencia y un 1,3% de Uribe Turbay ¡ªHolgu¨ªn y Guerra no aparecen¡ª. Coincide con que la senadora vallecaucana es m¨¢s conocida que sus rivales: seg¨²n la Invamer Poll de este mes, solo el 38% del pa¨ªs no sabe qui¨¦n es, mientras que esta categor¨ªa llega al 50% en el caso de Uribe Turbay y al 54% en el de Valencia. Esa misma encuesta muestra que la m¨¢s radical tiene una elevada imagen negativa, pues el 38% de los consultados expres¨® una opini¨®n desfavorable sobre ella, frente al 27% que lo hizo con Valencia y el 29% que lo hizo con Uribe Turbay.
Tres estrategas consultados ubican, m¨¢s bien, a Uribe Turbay como el candidato m¨¢s fuerte. Para Su¨¢rez, adem¨¢s de la alta imagen negativa, Cabal ¡°no tiene carisma¡±. En cambio, comenta que Uribe Turbay es el favorito del expresidente, tiene fuertes v¨ªnculos con las ¨¦lites pol¨ªticas de Bogot¨¢ ¡ªpor herencia y por su trayectoria como concejal liberal y luego secretario de Gobierno de la Alcald¨ªa de Enrique Pe?alosa¡ª y que la contrataci¨®n del estratega Lester Toledo muestra que ha conseguido importantes apoyos financieros. Algo similar comenta por tel¨¦fono el consultor antioque?o Miguel Jaramillo: ¡°Uno siente mucho el apoyo hacia ¨¦l en los mentideros de empresarios antioque?os, a quienes el expresidente escucha mucho. Ellos han financiado su campa?a, es un secreto a voces¡±. Para el experto, adem¨¢s, al ser Cabal ¡°la menos proclive a negociar¡± con otros sectores, es menos viable para buscar una unidad opositora.
Otros dos estrategas tienen opiniones m¨¢s favorables sobre la fuerza de la dirigente ultra, aunque reconocen que Uribe Turbay es el contrincante que tiene m¨¢s posibilidades de hacerle frente. Rojas enumera una larga lista de ventajas de Cabal: tiene el apoyo del gremio ganadero, lleva m¨¢s a?os en el uribismo ¡ªel senador apenas lleg¨® en 2022¡ª y sus mensajes radicales son atractivos para las bases. ¡°Tiene un discurso que ha ido consolidando a trav¨¦s del tiempo y que le da credibilidad¡±, dice el experto, que enfatiza que para ganar una interna partidaria es m¨¢s importante contar con el apoyo del n¨²cleo duro que mostrar capacidad para negociar con otros opositores. El estratega Luis David Duque, en tanto, recuerda que Cabal le lleva varios puntos de reconocimiento a ese rival.
Valencia, unos pasos atr¨¢s
La senadora Valencia, para los analistas, aparece m¨¢s atr¨¢s. Carlos Andr¨¦s Arias, gerente de la consultora Estrategia y Poder, la elogia como ¡°la m¨¢s moderada, la mejor informada, la que menos show hace¡±, pero se?ala que sus niveles de conocimiento se concentran en el Cauca, donde creci¨®, y en algunos c¨ªrculos de poder en Bogot¨¢, Medell¨ªn y Cali. Algo similar opina Jaramillo, que la define como la ¡°m¨¢s proclive a la negociaci¨®n¡± y, al mismo tiempo, como alguien que ¡°no termina de ser visible para los colombianos¡±. Su¨¢rez es m¨¢s cr¨ªtico: ¡°Se le fue la mano con la moderaci¨®n, se parece al expresidente Iv¨¢n Duque. Se ha ido atemperando y separando mucho de las tesis y refriega ideol¨®gica que puede tener el uribismo¡±.
Un punto central que la diferencia frente a Uribe Turbay es el financiamiento. Algunos analistas comentan que el primero ha recibido amplios apoyos de la ¨¦lite uribista antioque?a y que no han visto respaldos similares para ella. La senadora, por su parte, se?ala lo siguiente a este peri¨®dico, a trav¨¦s de un audio de WhatsApp: ¡°Los excesivos recursos que hoy estamos viendo son muy at¨ªpicos en el partido donde nos hemos caracterizados por campa?as muy austeras, muy de opini¨®n, muy de trabajo en la comunidad, muy de propuestas. Creo que se equivocan los que piensan que la pol¨ªtica es de plata. La pol¨ªtica es de convicciones y de trabajo¡±.
Holgu¨ªn y Guerra, en tanto, parecen arrancar sin posibilidades. Para los analistas, tienen una proyecci¨®n limitada a Antioquia y buscan posicionar sus nombres para las futuras elecciones locales en el basti¨®n electoral de su partido. Duque describe las postulaciones como ¡°precandidaturas a la Gobernaci¨®n¡±. ¡°Los abuelos dec¨ªan que uno tiene que aspirar a ser Papa para poder ser monaguillo¡±, subraya. Su¨¢rez, por su parte, coincide parcialmente, pues cree que en realidad est¨¢n buscando un lugar en las listas para el Senado. Arias, en tanto, considera que pueden incidir en el resultado: ¡°Su alcance y reconocimiento son m¨ªnimos, pero son fundamentales para decir hacia donde se inclina la balanza de los otros tres. Ese porcentaje peque?o que tienen puede ser clave¡±.
La decisi¨®n del expresidente
Hay rumores de que el favorito del exmandatario es Uribe Turbay ¡ªa quien eligi¨® como cabeza de lista al Senado en 2022 pese a no venir de sus huestes¡ª, pero el l¨ªder indiscutido del partido no ha dado mayores se?ales. Rojas y Duque comentan que el expresidente est¨¢ d¨¢ndole la oportunidad a los cinco de darse a conocer, como ha hecho en el pasado en casos similares, para luego evaluar qui¨¦n es m¨¢s viable electoralmente y fiel a sus ideales. Tambi¨¦n coinciden en que el exmandarario puede desistir de todos si ninguno repunta en las encuestas. ¡°Ha mostrado un pragmatismo muy grande. Si ve a alguien que tiene mayor viabilidad para ganar por fuera, no tendr¨¢ problema en descolgar a su partido¡±, afirma Rojas. Efectivamente, para las elecciones de 2022 el partido retir¨® a su candidato, ?scar Iv¨¢n Zuluaga, para apoyar al m¨¢s vistoso Federico Guti¨¦rrez. El expresidente ya dej¨® entrever esa posibilidad el domingo, en un acto en Medell¨ªn. ¡°Hay que prepararnos para ganar. Pero no que gane uno de nuestros compa?eros... que gane Colombia¡±, dijo.
La primera puja ser¨¢ definir el mecanismo para elegir al candidato. Cabal, que en 2021 perdi¨® en una interna que denunci¨® como poco transparente, quiere evitar que se usen encuestas. Se?ala que son f¨¢ciles de manipular y prefiere una consulta abierta a principios de 2026. Uribe Turbay se opone a lo que ve como una demora, lo que abre una puerta a que la ultra se marche. Ella ha insistido en que es fundadora del Centro Democr¨¢tico y que no se ir¨¢ a ning¨²n lado. Pero la incertidumbre permanece, seg¨²n Rojas. ¡°Cabal no va a dejar que se le impongan. Ya sabe c¨®mo es el tema, eso de usar encuestas con resultados que solo conocen dos personas. As¨ª que a Uribe le va a tocar, por primera vez, generar un proceso transparente¡±. Y es que el Centro Democr¨¢tico es un partido en el que, incluso en sus estatutos, Uribe tiene la ¨²ltima palabra.
El video fallido de Miguel Uribe Turbay
Los estrategas consultados cuestionan la decisión de Miguel Uribe Turbay de relanzar su candidatura con un video en Copacabana (Antioquia), el lugar donde su madre, la periodista Diana Turbay, fue asesinada en 1991, tras meses de estar secuestrada en manos de Los Extraditables. Camilo Rojas cree que enfocarse en su historia personal puede ser contraproducente. “La gente vota por optimismo, por esperanza, por un sueño. No veo eso en lo que sacó él”, dice. Carlos Suárez, por su parte, cree que se ha vuelto repetitivo: “Es la segunda vez que lo veo lanzarse, así que algo le debe estar saliendo mal”.
El cuestionamiento principal, sin embargo, es al manejo de los tiempos. Los precandidatos habían anunciado sus intenciones de formas más discretas, en redes sociales o medios de comunicación. Un video con una narrativa definida y un logotipo son otra cosa, comenta Carlos Andrés Arias. “Salir primero te pone en el radar, pero te deja muy expuesto a quemarte”, afirma el experto. Luis David Duque, en tanto, agrega: “Busca tener más reconocimiento y mostrar una campaña más organizada. Pero creo que no tuvo el éxito que estaban esperando, los números no fueron tan potentes”.