Un recorrido por el Parque Nacional Patagonia, en im��genes

En el noroeste de la provincia de Santa Cruz, en la Patagonia argentina, los paisajes moldeados por glaciares y volcanes hace millones de a?os son tan impactantes como inexplorados. En la imagen, un joven camina por uno de los senderos del Parque Patagonia. Sebasti��n L��pez Brach

Parte de este paisaje est�� protegido por el Parque Nacional Patagonia, a 2.000 kil��metros de la ciudad de Buenos Aires, entre las localidades de Los Antiguos y Perito Moreno, en una zona codiciada por las mineras y lejos del turismo de masas. En la imagen, un ejemplar de zorro, una de las especies aut��ctonas que se pueden observar durante los recorridos por los senderos del Parque Patagonia.Sebasti��n L��pez Brach

La Cueva de las Manos, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1999, conserva pinturas rupestres de m��s de 9.300 a?os. All�� se pueden observar desde manos, escenas de cacer��a de guanacos, pumas y otros dibujos perfectamente conservados. Las pinturas las realizaban con distintos tipos de minerales. Sebasti��n L��pez Brach

Este parque es uno de los ��ltimos refugios ambientales de Argentina que conserva y restaura su esencia salvaje. En la imagen, Jasm��n Sanchez, gu��a del parque provincial, recorre las cuevas del Patagonia junto con un grupo de turistas. Sebasti��n L��pez Brach

En la zona hay 89 sitios arqueol��gicos que recuerdan el paso de los pretehuelches, pueblos n��madas cazadores y recolectores. Uno de los m��s sorprendentes e inexplorados es el alero de Charcamata. En la imagen, Jasm��n Sanchez cuenta la historia de la Cueva de las Manos.Sebasti��n L��pez Brach

En el Parque Patagonia se pueden observar con facilidad grupos de guanacos que se desplazan por las estepas y mesetas en busca de alimento.Sebasti��n L��pez Brach

Bajada de los Toldos es uno de los senderos m��s transitados de Parque Patagonia. Por all�� se cruza todo el ca?ad��n prehist��rico hacia la conocida Cueva de las Manos. El trazado y construcci��n de senderos son realizados por expertos norteamericanos y un activo equipo local. Sebasti��n L��pez Brach

La estaci��n Biol��gica El Unco, en una antigua estancia de cr��a de ganado ovino, donde se restaura el humedal. El juncal estaba completamente desgastado por el sobrepastoreo, pero con intervenciones activas se multiplic�� la cobertura y calidad del junco: en cuatro a?os pas�� de ocho hect��reas a 30. Se reinsertaron parejas de coipos que comen el junco y construyen plataformas que abren caminos para que fluya el agua y regresen las aves. Como consecuencia, en tres a?os aument�� ocho veces la detecci��n mediante c��mara trampa de gallinetas, cuya poblaci��n est�� reducida.Sebasti��n L��pez Brach

En noviembre se abrir�� al p��blico un Centro de Interpretaci��n y Planetario, que en 800 metros cuadrados recorre temas de astronom��a, geolog��a y de biolog��a de la regi��n e invita a conocer el modelo de producci��n de naturaleza. Fue financiado por Elsa Rosenvasser Feher, f��sica y fil��ntropa argentina, que dedic�� su vida a la divulgaci��n cient��fica y desarroll�� su carrera en Estados Unidos. Apasionada por la astronom��a, a Elsa le fascinaban los cielos de la Patagonia. Don�� cuatro millones de d��lares.Sebasti��n L��pez Brach

En la estancia La Posta de los Toldos tambi��n han construido un observatorio para poder ver el imponente cielo colmado de estrellas.Sebasti��n L��pez Brach

Una laguna completamente seca en el Parque Patagonia.Sebasti��n L��pez Brach