Se acab¨® la era de la abundancia: Uruguay busca diversificar sus fuentes de agua potable
El embalse que abastece al 60% de la poblaci¨®n se encuentra bajo m¨ªnimos hist¨®ricos. Los cient¨ªficos piden al Gobierno conformar un grupo interdisciplinario para afrontar futuras crisis
EL PA?S ofrece en abierto la secci¨®n Am¨¦rica Futura por su aporte informativo diario y global sobre desarrollo sostenible. Si quieres apoyar nuestro periodismo, suscr¨ªbete aqu¨ª.
Buena parte de la sociedad uruguaya mantiene una relaci¨®n casi simbi¨®tica con el agua que corre por los r¨ªos y los grifos, vigilando con celo su tratamiento, cuidado y alcance. En 2004, el pa¨ªs se convirti¨® en un referente mundial al reconocer constitucionalmente y por decisi¨®n popular el acceso al agua y al saneamiento como un derecho humano fundamental. Aquella reforma marc¨® un hito en la historia del pa¨ªs: consagr¨® la gesti¨®n p¨²blica y prioriz¨® el consumo humano y la participaci¨®n social en el manejo de este recurso.
Este precedente ayuda a entender el malestar que ha causado la crisis de agua potable que actualmente afecta a los 1,7 millones de habitantes de Montevideo y su ¨¢rea metropolitana, en el sur de Uruguay. Desde finales de abril, el agua corriente que reciben contiene temporalmente el doble de sodio estipulado en la normativa local y la pueden beber siempre que no est¨¦n dentro del grupo de riesgo (hipertensos y embarazadas, entre otros) y toleren su pronunciado sabor salado.
Las autoridades explican que esta situaci¨®n es excepcional y regir¨¢ mientras no llueva lo suficiente para recomponer los niveles del embalse Paso Severino, que est¨¢ ubicado sobre el r¨ªo Santa Luc¨ªa y abastece al 60% de la poblaci¨®n del pa¨ªs. Ese embalse tiene actualmente 4,5 millones de metros c¨²bicos de agua, cuando su capacidad es de 65 millones. De modo que, sin las lluvias necesarias ni alternativas previstas, el l¨ªquido seguir¨¢ con esta composici¨®n y sabor at¨ªpicos que resulta de la mezcla de agua dulce del Santa Luc¨ªa con la salada proveniente del R¨ªo de la Plata. Por lo pronto, m¨¢s del 50% de la poblaci¨®n de esta regi¨®n ha dejado de tomar agua corriente y la consume embotellada, seg¨²n la consultora Opci¨®n.
El fin de la ¡°cultura de la abundancia¡±
En los ¨²ltimos tres a?os, Uruguay ha sufrido los embates del fen¨®meno clim¨¢tico La Ni?a, con un prolongado d¨¦ficit de precipitaciones y una sequ¨ªa que ha causado estragos en el campo y ahora repercute en el agua potable. ¡°Ese d¨¦ficit se mantuvo y lleg¨® a valores de sequ¨ªa extrema, sobre todo en el suroeste del pa¨ªs¡±, le dice a Am¨¦rica Futura Madeleine Renom, doctora en Ciencias de la Atm¨®sfera y los Oc¨¦anos. Seg¨²n Renom, entre abril de 2022 y mayo de 2023, en esta zona cayeron 300 mil¨ªmetros de lluvia cuando en ese periodo suele llover 1200 mm. Es el menor registro en 45 a?os.
Daniel Greif, ingeniero y exdirector del primer Plan Nacional de Aguas, considera que frente a estos pron¨®sticos, Uruguay deber¨ªa pasar de una cultura de la ¡°abundancia¡± del agua a una cultura de la ¡°variabilidad¡± de este recurso. ¡°Eso requiere infraestructura y capacidad de gesti¨®n¡±, le dice Greif a Am¨¦rica Futura. Se refiere a los cambios del clima, pero tambi¨¦n a los que experimenta la producci¨®n local y que tienen consecuencias sobre la calidad y la cantidad de las aguas. ¡°La cuenca del r¨ªo Santa Luc¨ªa es especialmente cr¨ªtica y estrat¨¦gica porque abastece de agua potable a la mitad de la poblaci¨®n del pa¨ªs y es la zona de la cuenca lechera de mayor intensidad productiva¡±, remarca.
El impacto de la actividad productiva sobre el r¨ªo Santa Luc¨ªa fue abordada en un manifiesto suscrito por cient¨ªficos uruguayos en octubre de 2022. Anticip¨¢ndose a esta crisis, recomendaban acelerar el cumplimiento de medidas de gesti¨®n ambiental, priorizando el uso de agua potable para el consumo humano. Ped¨ªan intensificar el control de efluentes de tambos y otras industrias; tomar medidas cuando se plantea la intensificaci¨®n agr¨ªcola y de cultivos forestales; regular y controlar las represas de riego para evitar la proliferaci¨®n de cianobacterias y su inoculaci¨®n al sistema fluvial.
¡°El r¨ªo Santa Luc¨ªa est¨¢ en un proceso de deterioro¡±, le dice a Am¨¦rica Futura Daniel Panario, director del Instituto de Ecolog¨ªa y Ciencias Ambientales de la Universidad de la Rep¨²blica, coautor de este manifiesto. Panario es un f¨¦rreo cr¨ªtico del modelo de producci¨®n intensiva y extractiva implantado en Uruguay. Cita como ejemplo el mill¨®n de hect¨¢reas de soja, que trajo consigo el incremento de agroqu¨ªmicos y de los desechos que contaminan las aguas, seg¨²n afirma. Sobre el Santa Luc¨ªa en particular, considera necesario quitarle presi¨®n, diversificando las fuentes de abastecimiento de agua potable. ¡°Hasta ahora el proceso fue inverso: se ha centralizado, porque eso abarata y facilita el manejo¡±.
Una autocr¨ªtica de Mujica
En cuanto a las alternativas, el ingeniero Greif es partidario de la ejecuci¨®n del proyecto Casup¨¢, que fue entregado por el ¨²ltimo Gobierno de la coalici¨®n de centroizquierda Frente Amplio (2015-2020) al actual encabezado por Luis Lacalle Pou (centroderecha). Este proyecto consiste en la construcci¨®n de una represa en la cuenca alta del r¨ªo Santa Luc¨ªa, que tendr¨¢ una capacidad de 118 millones de metros c¨²bicos para abastecer al ¨¢rea metropolitana. De acuerdo con Greif, los estudios sobre la viabilidad de esta opci¨®n se iniciaron en 2013 y el proceso preparatorio finaliz¨® en 2019 con el pr¨¦stamo otorgado por CAF- banco de desarrollo de Am¨¦rica Latina por un monto de 80 millones de d¨®lares. Pero la represa Casup¨¢ sigue sin concretarse hasta ahora.
?Por qu¨¦ no se construy¨® esta u otra iniciativa entre 2005 y 2020, bajo los Gobiernos del Frente Amplio? Es una pregunta que se repite en estos d¨ªas que rozan los l¨ªmites del suministro de agua. En una improvisada rueda de prensa, a finales de mayo el expresidente Jos¨¦ Mujica (2010-2015) dibuj¨® una autocr¨ªtica al respecto: ¡°Siempre, cuando hablamos de presupuesto, estamos tirando de una frazada para un lado y para el otro y todo el mundo la disputa y a veces le erramos en las prioridades y nos confiamos. Pienso que esto del agua lo debimos haber enfrentado mucho antes¡±.
El proyecto Casup¨¢ permanece en carpeta y este mes de junio vencer¨ªa el plazo para firmar el contrato del pr¨¦stamo con la CAF. Sin embargo, el actual Gobierno ha dado prioridad al proyecto Neptuno tambi¨¦n denominado Arazat¨ª, una nueva planta potabilizadora. El presidente Lacalle Pou defini¨® en noviembre de 2022 ese proyecto como ¡°la inversi¨®n m¨¢s grande en este ¨¢mbito en los ¨²ltimos 150 a?os¡± que permitir¨ªa tener agua potable ¡°sin perjuicio de sequ¨ªas o de fallas t¨¦cnicas¡±. En el marco de este proyecto, el Gobierno ha licitado entre capitales privados la construcci¨®n de la planta en el departamento de San Jos¨¦ (sur del pa¨ªs), que tomar¨ªa aguas del R¨ªo de la Plata y abastecer¨ªa un 33% de lo requerido por el ¨¢rea metropolitana. Est¨¢ previsto que las obras arranquen a finales de 2023.
Las cr¨ªticas a Neptuno y la exhortaci¨®n de los cient¨ªficos
La Comisi¨®n Nacional en Defensa del Agua y de la Vida, impulsora de la reforma de 2004, entiende que Neptuno es inconstitucional porque ¡°habilita la gesti¨®n privada del agua¡±, cuando la ley establece que esta debe ser p¨²blica y con participaci¨®n social. ¡°La Constituci¨®n de la Rep¨²blica es clara y no admite interpretaciones¡±, manifiestan. Por su lado, el grupo de investigadores que integra Panario asegura que el proyecto ¡°presenta una serie de problemas ambientales¡± y que la salinidad del agua del R¨ªo de la Plata ¡°supera ampliamente los valores aceptables para ser potabilizados¡±.
Criticas mediante, el Gobierno sigue adelante con la licitaci¨®n de Neptuno, mientras la empresa estatal OSE (Obras Sanitarias del Estado) apura las reparaciones en el viejo sistema de ca?er¨ªas, por donde se estiman p¨¦rdidas de hasta el 40% de agua potable. Los medios de comunicaci¨®n, por su parte, difunden campa?as sobre el uso responsable de este recurso y siguen minuto a minuto los pron¨®sticos de las veleidades clim¨¢ticas. Todo apunta a que la Ni?a ha llegado a su fin y se anuncian precipitaciones, m¨¢s bien escasas para esta primera semana de junio. ¡°Las proyecciones (a largo plazo) indican que las sequ¨ªas van a ser m¨¢s frecuentes, aunque menos intensas y m¨¢s cortas¡±, advierte la meteor¨®loga Renom.
Frente a la emergencia y alentando pol¨ªticas de Estado, los cient¨ªficos e investigadores exhortan al Gobierno a trabajar de manera mancomunada: ¡°La gesti¨®n de las cuencas hidrogr¨¢ficas, de los recursos h¨ªdricos y el abastecimiento de agua potable en el sur del pa¨ªs es una emergencia de tal magnitud y complejidad que requiere de un an¨¢lisis interdisciplinario a cargo de un equipo amplio de investigadores y t¨¦cnicos de instituciones vinculadas a la tem¨¢tica¡±. A¨²n est¨¢ por verse si la invitaci¨®n finalmente prospera.