El sue?o del 5G mete a Costa Rica en el ¡°pleito de elefantes¡± entre EE UU y China

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El sector tecnol¨®gico, los empresarios y la academia de Costa Rica llevan tiempo so?ando con avanzar en el desarrollo de la tecnolog¨ªa de telecomunicaciones 5G para no quitar velocidad al empuje actual de industrias sofisticadas, innovar en ¨¢reas como la salud o ciudades inteligentes y ayudar a reducir la brecha digital que afecta a zonas rurales. El Gobierno anterior, de Carlos Alvarado, tuvo el tema en remojo, pero en 2022, al comenzar la administraci¨®n de Rodrigo Chaves, se aceleraron los tr¨¢mites y la promesa empez¨® a tomar forma en medio de discusiones de tipo t¨¦cnico o administrativo. Pero el tema no tard¨® en convertirse en un caso geopol¨ªtico y ahora este anhelo est¨¢ condicionado por la pugna econ¨®mica entre Estados Unidos y China.

¡°El pleito de elefantes¡±, como lo ha llamado el presidente Chaves, tiene como escenario al peque?o pa¨ªs que en 2007 se convirti¨® en la primera naci¨®n centroamericana con relaciones diplom¨¢ticas con China y que, al mismo tiempo, depende del mercado estadounidense para las crecientes exportaciones, sobre todo las del din¨¢mico sector de implementos m¨¦dicos y otros productos ligados a la tecnolog¨ªa.

La situaci¨®n se tens¨® despu¨¦s agosto cuando el Gobierno emiti¨® un decreto sobre el desarrollo de la red 5G que afecta a empresas de capital chino, al excluirlas de un proyecto con un posible impacto de 1.550 millones de d¨®lares sobre la peque?a econom¨ªa local en un periodo de 5 a?os, casi 1,3% del PIB, seg¨²n investigadores del Centro Internacional de Pol¨ªtica Econ¨®mica para el Desarrollo Sostenible (CINPE) de la estatal Universidad Nacional (UNA).

El proceso para desarrollar la red de telecomunicaciones de quinta generaci¨®n contin¨²a, pero ahora es un asunto de pol¨ªtica internacional y quiz¨¢s de disputas legales internas porque China ha acusado a las autoridades costarricenses de discriminar a las empresas de su pa¨ªs, en especial la gigante Huawei, que incluso ha acudido al Tribunal Constitucional. La potencia asi¨¢tica repudia las justificaciones que han dado en San Jos¨¦ las autoridades del Ministerio de Ciencia, Tecnolog¨ªa y Telecomunicaciones (Micitt) al se?alar a China como un factor de riesgo para la ciberseguridad y advertir que, por tener un sistema pol¨ªtico totalitario, no tiene capacidad de sancionar a las empresas que participen en espionaje.

¡°La presunta acusaci¨®n de que China es un pa¨ªs con mayor riesgo en materia de ciberseguridad es totalmente absurda e infundada¡±, expres¨® a mediados de octubre la embajada de China en un comunicado emitido s¨®lo horas despu¨¦s de las declaraciones de la ministra del Micitt, Paula Bogantes. La reacci¨®n diplom¨¢tica llegaba a un nivel que no se conoc¨ªa antes entre Costa Rica y China: ¡°Estos comentarios afectan gravemente la confianza y las expectativas de las empresas chinas para realizar actividades econ¨®mico-comerciales en Costa Rica y socavan el buen ¨ªmpetu de desarrollo de las relaciones bilaterales. Lamentamos mucho por sus comentarios y expresamos nuestra en¨¦rgica y vehemente oposici¨®n a sus acusaciones irresponsables e infundadas¡±, se?al¨® la legaci¨®n diplom¨¢tica.

No es el primer comunicado oficial de la diplomacia china en este caso. En otro pronunciamiento, repudi¨® la ¡°discriminaci¨®n¡± de la firma Huawei, proveedor de servicios actuales en Costa Rica y en 169 pa¨ªses m¨¢s. ¡°La parte china est¨¢ a la expectativa de que la parte costarricense pueda adoptar una actitud objetiva y justa, evitar la generalizaci¨®n del concepto de seguridad nacional y la politizaci¨®n de las cuestiones t¨¦cnicas¡±, dijo el 5 de septiembre, con un mensaje que no ha calado en las autoridades costarricenses.

Una semana antes, Rodrigo Chaves estaba sentado en el despacho del presidente Joe Biden, en una visita oficial que se anunci¨® s¨®lo unos d¨ªas antes para hablar de migraci¨®n, seguridad e inversiones, mientras en el diario oficial se publicaba el decreto que Chaves dej¨® firmado para prohibir la participaci¨®n en los proyectos de 5G a las empresas de pa¨ªses que no hayan suscrito el Convenio de Budapest (2001) sobre ciberseguridad. As¨ª quedaban fuera del juego las empresas chinas, pero tambi¨¦n de Corea, Brasil o Singapur, sin que el mandatario tenga intenciones de modificar el decreto, seg¨²n dijo el pasado mi¨¦rcoles.

¡°Es probable que esto se vaya a tribunales, pero eso no quita que hay una presi¨®n geopol¨ªtica¡±, analiza Constantino Urcuyo, profesor em¨¦rito de pol¨ªtica internacional en la Universidad de Costa Rica (UCR) y autor del libro China y Estados Unidos: geopol¨ªtica y estrategia en el siglo XXI. Aunque no es el primer caso en el mundo de obst¨¢culos a empresas chinas por asuntos de ciberseguridad, Costa Rica se sit¨²a en condiciones particulares por estar en el ¨¢rea de influencia de Estados Unidos y por la alta dependencia ante la econom¨ªa del norte, advierte Urcuyo a EL PA?S.

Ese es uno de los puntos de conflicto, como lo advirti¨® la embajada de China en un comunicado de agosto: ¡°Los pa¨ªses latinoamericanos y caribe?os son Estados independientes y soberanos, no son el patio trasero de los Estados Unidos¡±, pa¨ªs al que acus¨® de privar a China de condiciones igualitarias de mercado. ¡°Estados Unidos viene politizando, instrumentalizando e ideologizando las cuestiones comerciales y tecnol¨®gicas para difamar, desprestigiar y atacar China sin ning¨²n fundamento f¨¢ctico¡±, a?adi¨® el documento.

Esas afirmaciones no ven¨ªan de la nada. Fueron la reacci¨®n a palabras que dio en San Jos¨¦ la jefa del Comando Sur estadounidense, Laura Richardson, tras una reuni¨®n con Rodrigo Chaves con ocasi¨®n de una donaci¨®n de 10 millones de d¨®lares para reforzamiento de la ciberseguridad en Costa Rica. La general critic¨® las intenciones de China en participar en pa¨ªses de la regi¨®n en el desarrollo de ¡°infraestructura cr¨ªtica¡± como puertos en aguas profundas, cibertecnolog¨ªa, inversiones aeroespaciales y redes 5G, con el argumento de que esas inversiones podr¨ªan utilizarse en eventuales operaciones militares.

Semanas antes, en julio, el Departamento de Estado hab¨ªa anunciado que colaborar¨¢ con Costa Rica para impulsar la actual industria local de semiconductores. Washington ve al pa¨ªs centroamericano como un socio particular para garantizarse el suministro de los microprocesadores, objeto de la ¡®Ley Chips¡¯ que Biden emiti¨® en agosto de 2022, el mismo d¨ªa en que autoridades costarricenses participaron en la inauguraci¨®n de las operaciones de manufactura de la trasnacional Intel en la planta en suelo costarricense donde se instal¨® en 1997.

¡°Es clar¨ªsima la enorme importancia de Estados Unidos para la econom¨ªa nacional, pero tambi¨¦n es claro que EE UU est¨¢ presionando. Costa Rica debi¨® contestar que analizar¨ªa el caso seg¨²n el marco legal para no exponerse a demandas legales que probablemente vendr¨¢n; eso es algo que comprender¨ªan bien en Washington¡±, opin¨® Marco Vinicio Ruiz, quien fue ministro de Comercio Exterior, embajador en China y empresario importador de productos de la marca estadounidense Apple. Ahora, en cambio, considera que se usa la ciberseguridad como pretexto para dejar el espacio abierto a ciertas compa?¨ªas, pues el Convenio de Budapest se refiere a asuntos de cooperaci¨®n internacional en ciberseguridad, pero no es un par¨¢metro suficiente para discriminar por factores de riesgo, como hace el Gobierno costarricense.

Un obst¨¢culo para el desarrollo del 5G

El instituto CINPE advierte que el pol¨¦mico decreto plantea un obst¨¢culo para el desarrollo de la red 5G en Costa Rica por potenciales disputas legales y por el posible aumento de hasta 40% en la tarifas de servicios de telecomunicaciones, debido a la necesidad de mayor inversi¨®n de compa?¨ªas que no tienen la infraestructura instalada como s¨ª tiene Huawei, proveedor actual del Estado. Esto, adem¨¢s, implica atrasos en el desarrollo de la tecnolog¨ªa que ya operan en otros pa¨ªses de Am¨¦rica Latina y una reducci¨®n del aporte al PIB nacional, a s¨®lo una s¨¦ptima parte de lo proyectado en un escenario abierto, seg¨²n los investigadores acad¨¦micos.

Chaves, por el momento, no da el brazo a torcer. Consultado por un periodista despu¨¦s de las declaraciones de su ministra Bogantes y de la protesta de China, volvi¨® a aludir a factores de peligro cibern¨¦tico y del temor repetir los problemas que provoc¨® un ataque inform¨¢tico sobre instituciones p¨²blicas a mediados del 2022. El mandatario culpa a otros sectores de hacer ver un conflicto con China o de prestarse para el cabildeo de empresas chinas y rechaza que haya componentes geopol¨ªticos de por medio, a pesar de los comunicados de la embajada asi¨¢tica, los ¡°m¨¢s duros desde que hay relaciones bilaterales¡±, seg¨²n Ruiz.

El presidente asegura que Costa Rica no quiere meterse en el ¡°pleito de elefantes, aunque el deterioro diplom¨¢tico ya est¨¢ hecho, indica Urcuyo, quien reconoce la dificultad del Gobierno de Chaves de comportarse de manera equidistante, debido el peso enorme de Estados Unidos, su importancia para la econom¨ªa local y para la posible cooperaci¨®n en materia de lucha contra el crimen ante la ola de violencia que se desat¨® en este a?o.