Venezuela y su territorio, un trauma nacional
El pa¨ªs ha perdido m¨¢s de 500.000 kil¨®metros desde su fundaci¨®n en laudos internacionales o como consecuencia a una estrategia diplom¨¢tica err¨¢tica
El brusco aumento de la discursiva nacionalista en la causa de la soberan¨ªa venezolana en la Guayana Esequiba, promovido con inusitada agresividad por el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro, descansa sobre una conclusi¨®n que lleva a?os dormida, pero que subyace en la psique de la sociedad, comenzando por las Fuerzas Armadas: la gran cantidad de territorio leg¨ªtimo que ha perdido la naci¨®n en diversos laudos internacionales y circunstancias pol¨ªt...
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El brusco aumento de la discursiva nacionalista en la causa de la soberan¨ªa venezolana en la Guayana Esequiba, promovido con inusitada agresividad por el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro, descansa sobre una conclusi¨®n que lleva a?os dormida, pero que subyace en la psique de la sociedad, comenzando por las Fuerzas Armadas: la gran cantidad de territorio leg¨ªtimo que ha perdido la naci¨®n en diversos laudos internacionales y circunstancias pol¨ªticas confusas, en los tiempos de la colonia espa?ola y tambi¨¦n como naci¨®n independiente.
A pesar de esa realidad y del enorme despliegue de propaganda orquestado desde el Gobierno nacional para promover un refer¨¦ndum de anexi¨®n sobre el Esequibo, los centros de votaci¨®n se vieron con poca gente durante toda la jornada y el chavismo no obtuvo la convocatoria que habr¨ªa deseado para capitalizar la iniciativa de soberan¨ªa.
La celebraci¨®n, en cambio, ha dado paso al debut de un tono nacionalista muy intransigente en el alto Gobierno, que est¨¢ sirviendo como argumento para penalizar judicialmente cualquier posici¨®n pol¨ªtica inc¨®moda. Cuatro de los m¨¢s cercanos colaboradores de la candidata opositora, Mar¨ªa Corina Machado ¡ªuna tradicional activista en la causa del Esequibo, pero que ahora apela a la Corte Internacional de Justicia para dirimir su soberan¨ªa¡ª, han sido detenidos, acusados de colaborar con la multinacional Exxon Mobil y el Gobierno de Guyana.
La antigua Capitan¨ªa General de Venezuela, creada en 1777, ten¨ªa cerca de unos 1.500.000 kil¨®metros cuadrados (la actual Rep¨²blica de Venezuela tiene 912.000), que inclu¨ªan a la isla de Trinidad, una de las provincias de aquella entidad, arrebatada por los ingleses a Espa?a en 1802. Con la llegada de la independencia, el pa¨ªs perdi¨® tambi¨¦n el control de la pen¨ªnsula de la Guajira, parte de los actuales llanos orientales colombianos y amplios sectores de la Amazon¨ªa, en beneficio de Colombia y Brasil.
Tambi¨¦n, progresivamente, la Guayana Esequiba. Un territorio sobre el cual ha existido una larga pugna diplom¨¢tica posterior, primero con los brit¨¢nicos, que fomentaron la colonizaci¨®n de la zona, y luego con el Gobierno independiente de Guyana. Un asunto que hab¨ªa permanecido adormecido como pol¨¦mica durante varias d¨¦cadas hasta ahora.
¡°Hay dos laudos que han dejado una huella profunda en la identidad territorial de Venezuela¡±, afirma Lauren Caballero, internacionalista y analista de la Universidad Central de Venezuela. ¡°El laudo de 1891, que defini¨® la frontera definitiva entre Venezuela y Colombia y la p¨¦rdida casi total de la pen¨ªnsula La Guajira, y el Laudo Arbitral de Par¨ªs de 1899, que se tradujo en la p¨¦rdida del Esequibo. Estos dos eventos de alguna manera han generado una especie de trauma en la conciencia de generaciones de venezolanos, hasta el punto que la diplomacia en Caracas evit¨® durante casi todo el siglo XX comprometerse en alg¨²n tratado internacional que la obligase a dirimir con terceros su delimitaci¨®n territorial¡±.
El famoso ¡°hito de Castilletes¡±, posterior a la delimitaci¨®n que se tradujo en la p¨¦rdida de casi toda la pen¨ªnsula La Guajira, es el punto de partida ulterior del famoso diferendo sobre el Golfo de Venezuela¡ª controlado por el pa¨ªs, pero reivindicado en una parte por Colombia¡ª, que durante a?os fue el que monopoliz¨® todos los titulares noticiosos en esos a?os, con algunos picos de tensi¨®n diplom¨¢tica y militar binacional incluidos.
¡°Siguiendo la doctrina de Sim¨®n Bol¨ªvar, Venezuela apel¨® siempre al principio del uti posedetis juris para delimitar en forma amistosa y expedita sus fronteras al disolverse la Gran Colombia. Para ese entonces, ya los primeros colonos brit¨¢nicos comenzaban a cruzar la frontera de la ribera occidental del r¨ªo Esequibo, lo cual provoc¨® protestas diplom¨¢ticas del propio Bol¨ªvar¡±, explica Kenneth Ram¨ªrez, presidente del Consejo Venezolano de Relaciones Internacionales.
En la p¨¦rdida de estos territorios, advierten ambos expertos, concurren tambi¨¦n como causas la diplomacia incipiente de la Venezuela independiente, y las dificultades de entonces para controlar efectivamente todo su territorio. Venezuela fue, por lo dem¨¢s, uno de los varios teatros de operaciones de la diplomacia imperial brit¨¢nica en todo el mundo.
¡°Con Brasil, el pa¨ªs perdi¨® tambi¨¦n miles de kil¨®metros cuadrados¡±, afirma Ram¨ªrez. ¡°Inexplicablemente, Venezuela acept¨® sin mayor oposici¨®n apartarse del Uti Posedetis Juris, y el tratado de l¨ªmites de 1859 confirm¨® los derechos venezolanos sobre las cuencas de los r¨ªos Orinoco y Esequibo¡±. En aquel a?o, uno de los m¨¢s ca¨®ticos que ha tenido Venezuela en su historia, una naci¨®n sin gobierno, comenzaba la Guerra Federal, un conflicto civil de cuatro a?os de duraci¨®n, a¨²n m¨¢s virulento que la guerra de independencia.
El Congreso venezolano no hab¨ªa querido ratificar el famoso tratado Pombo-Michelena, que colocaba l¨ªmites satisfactorios a las demandas venezolanas frente a Colombia en 1833. Tras sucesivas negociaciones colombo-venezolanas sin acuerdos, ¡°en 1886, el Acta de Par¨ªs nombra ¨¢rbitro de derecho a la Reina Mar¨ªa Cristina para ejecutar sentencia en este diferendo con Colombia. El Laudo de 1891 es muy perjudicial para Venezuela, puesto que le arrebata extensas zonas territoriales desde el Caribe hasta el Amazonas¡±, relata Ram¨ªrez.
¡°Esto es lo que explica la reticencia del Estado venezolano de asistir a la Corte Internacional de Justicia para dirimir con Guayana la controversia del Esequibo, esa ha sido una postura permanente¡±, afirma Caballero. ¡°A pesar de que en el Acuerdo de Ginebra de 1966 los negociadores venezolanos no excluyeron la posibilidad de un arreglo judicial, seg¨²n lo estipulado en las Naciones Unidas¡±.
¡°Venezuela ha perdido un quinto de su territorio desde los tiempos de la Capitan¨ªa General¡±, a?ade Kenneth Ram¨ªrez. ¡°Como bien afirm¨® el poeta Andr¨¦s Eloy Blanco en un famoso discurso parlamentario en 1941, lo hizo sin disparar un solo tiro. Es natural que haya una sensibilidad con el tema de las fronteras. Y han sido, otra vez, los errores diplom¨¢ticos del Gobierno de Maduro los que nos tienen en esta situaci¨®n, negados a asistir a la Corte Internacional de Justicia¡±.
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