Las autoridades escolares de Uvalde despiden a sus polic¨ªas tras el fiasco del d¨ªa de la matanza
El distrito escolar anuncia el cese de la fuerza policial compuesta por cinco personas; uno de los reclamos que exig¨ªan los familiares de las 21 v¨ªctimas
Uvalde contin¨²a transform¨¢ndose para digerir la tragedia. A m¨¢s de cuatro meses del tiroteo que cobr¨® la vida de 19 menores y dos maestras de una escuela p¨²blica, las autoridades del distrito escolar de la comunidad han anunciado la suspensi¨®n del peque?o cuerpo de polic¨ªas encargado de la seguridad en el condado. Es la m¨¢s reciente decisi¨®n del ¨®rgano independiente que supervisa a las escuelas de esta regi¨®n de mayor¨ªa latina ubicada en el centr...
Uvalde contin¨²a transform¨¢ndose para digerir la tragedia. A m¨¢s de cuatro meses del tiroteo que cobr¨® la vida de 19 menores y dos maestras de una escuela p¨²blica, las autoridades del distrito escolar de la comunidad han anunciado la suspensi¨®n del peque?o cuerpo de polic¨ªas encargado de la seguridad en el condado. Es la m¨¢s reciente decisi¨®n del ¨®rgano independiente que supervisa a las escuelas de esta regi¨®n de mayor¨ªa latina ubicada en el centro de Texas. En agosto, el grupo compuesto por ocho personas despidi¨® a Pete Arredondo, el jefe de polic¨ªa del distrito, uno de los primeros en llegar a la zona del tiroteo convertido en la segunda peor matanza estudiantil en Estados Unidos.
El despido de los cinco integrantes del cuerpo de polic¨ªa hab¨ªa sido desde hace semanas uno de los m¨¢s importantes reclamos hechos por los familiares de las v¨ªctimas. Brett Cross, de 32 a?os, comenz¨® el 27 de septiembre una acampada afuera del edificio administrativo del distrito escolar para exigir el cese de los polic¨ªas, quienes tardaron 77 minutos en responder mientras un tirador de 18 a?os disparaba r¨¢fagas con un rifle de alto poder en uno de los salones de la escuela primaria Robb. Cross perdi¨® aquel 24 de mayo a su sobrino de 10 a?os, Uziyah Sergio Garc¨ªa, de quien ten¨ªa la custodia legal. Varios padres de familia se unieron a Cross en las ¨²ltimas semanas a la manifestaci¨®n. El grupo coloc¨® 19 mochilas y dos morrales en las puertas del edificio. Tras 10 d¨ªas, la presi¨®n ha rendido frutos este viernes.
¡°Los sargentos Miguel Hern¨¢ndez y Ken Mueller han sido puestos en una baja administrativa¡±, ha se?alado el distrito escolar en un comunicado fechado este viernes. ¡°Se ha tomado la decisi¨®n de suspender todas las actividades del Departamento de Polic¨ªa del Distrito Escolar Independiente Consolidado por un tiempo indefinido. Los oficiales empleados actualmente tendr¨¢n otros roles en el distrito¡±, a?ade el documento, que informa que el Mueller ha optado por el retiro. El Uvalde Leader News, un medio local, tambi¨¦n ha asegurado en Twitter que Hal Harrell, el superintendente del distrito escolar, ha anunciado su salida, que tendr¨¢ que ser aprobada por los integrantes del ¨®rgano en los pr¨®ximos d¨ªas. La noticia no ha sido confirmada por las autoridades locales.
La decisi¨®n de la junta escolar lleg¨® horas despu¨¦s de que se hiciera p¨²blico el despido de Crimson Elizondo, una polic¨ªa recientemente contratada por las autoridades de Uvalde. Elizondo se hab¨ªa desempe?ado meses atr¨¢s como polic¨ªa estatal de Texas y fue una de las primeras en llegar a la escuela el d¨ªa del incidente. El cese fue anunciado despu¨¦s de que el gobernador Greg Abbott, quien est¨¢ en plena campa?a por la reelecci¨®n, dijera p¨²blicamente que los registros en manos de las autoridades estatales mostraban que Elizondo no cumpli¨®, durante el operativo, con los est¨¢ndares exigidos por la patrulla estatal. Una c¨¢mara corporal la grab¨® aquel d¨ªa diciendo a un compa?ero: ¡°Si mi hijo hubiera estado all¨ª dentro, yo no estar¨ªa aqu¨ª afuera. Te lo prometo¡±.
Uvalde, una poblaci¨®n con menos de 20.000 personas, fue uno de los 100 distritos escolares de Texas que decidieron formar un cuerpo de polic¨ªa para responder a tiroteos, actos de vandalismo, gamberradas y otros problemas al interior de los centros educativos. Estos cuerpos comenzaron a proliferar desde 2017. El de Uvalde se convirti¨® en realidad despu¨¦s de que un tirador asesinara a 10 personas en el instituto Santa Fe, a las afueras de Houston, en mayo de 2018.
Despu¨¦s de aquello debut¨® la fuerza policiaca en Uvalde. Lo hizo con un jefe de polic¨ªa, un detective y dos oficiales. El cuerpo subrayaba su colaboraci¨®n con otras corporaciones. De hecho, el distrito ofrec¨ªa desayunos y comidas gratis a los polic¨ªas de otros grupos que visitaran los colegios. Adem¨¢s de patrullar las entradas a los campus y los aparcamientos, los polic¨ªas ten¨ªan entre sus tareas asegurarse del correcto funcionamiento de las alarmas, sensores de movimiento y las 100 c¨¢maras de instalados en las escuelas. Asimismo, deb¨ªan verificar que los profesores dieran las clases con la puerta cerrada y con seguro, como dictan los protocolos de seguridad para evitar tiroteos masivos. Todo esto fall¨® la ma?ana del martes 24 de mayo, cuando Salvador Ramos entr¨® armado a la escuela a causar el horror.
M¨¢s de 300 uniformados acudieron aquella ma?ana a dar respuesta a la emergencia. La actuaci¨®n de decenas de corporaciones, desde los polic¨ªas escolares de Uvalde hasta la Patrulla Fronteriza, protagonizaron un desastroso operativo que, con el paso de los d¨ªas y seg¨²n se han ido conociendo nuevos detalles, han provocado la ira de los familiares de las v¨ªctimas. A finales de septiembre se hizo p¨²blico que cinco agentes del Departamento de Seguridad P¨²blica de Texas est¨¢n siendo investigados como parte de un proceso que determine lo que sucedi¨®. La oficina de asuntos internos dir¨¢ despu¨¦s si estos cinco elementos recibir¨¢n castigo alguno.
El despido de los polic¨ªas es una peque?a victoria para los padres y familiares de las v¨ªctimas de Uvalde, quienes se han convertido en activistas a favor de la regulaci¨®n de las armas. El gobierno de Abbott, sin embargo, no ha dado el brazo a torcer en uno de los principales reclamos que le hacen: elevar la edad m¨ªnima hasta los 21 a?os para comprar un rifle de asalto. El gobernador, un republicano ultraconservador, se ha opuesto a cambiar las leyes con el argumento de que la modificaci¨®n a la norma ser¨¢ derribada por el Supremo.