La pastilla del d¨ªa despu¨¦s vuelve a ser legal en Honduras
Despu¨¦s de 13 a?os de prohibici¨®n, el pa¨ªs centroamericano permite el uso y la comercializaci¨®n de la p¨ªldora anticonceptiva de emergencia. ¡°No es abortiva¡±, insiste la presidenta. El comprimido es legal ahora en toda la regi¨®n
Honduras le devolvi¨® a las mujeres el derecho a decidir sobre sus cuerpos, al menos parcialmente, con el acceso a la p¨ªldora anticonceptiva de emergencia (PAE). Este mi¨¦rcoles, el D¨ªa Internacional de la Mujer, la presidenta del pa¨ªs centroamericano, Xiomara Castro, anunci¨® el acuerdo ejecutivo ¡°para su libre uso y comercializaci¨®n¡±. ¡°La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) determin¨® que es parte de los derechos reproductivos de la mujer y no es abortiva¡±, dijo en sus redes....
Honduras le devolvi¨® a las mujeres el derecho a decidir sobre sus cuerpos, al menos parcialmente, con el acceso a la p¨ªldora anticonceptiva de emergencia (PAE). Este mi¨¦rcoles, el D¨ªa Internacional de la Mujer, la presidenta del pa¨ªs centroamericano, Xiomara Castro, anunci¨® el acuerdo ejecutivo ¡°para su libre uso y comercializaci¨®n¡±. ¡°La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) determin¨® que es parte de los derechos reproductivos de la mujer y no es abortiva¡±, dijo en sus redes.
Las ¨²ltimas tres palabras van dirigidas al sector ultraconservador y religioso que lleva a?os dinamitando la lucha feminista por avanzar en los derechos sexuales de la mitad de la poblaci¨®n. Honduras es uno de los cinco pa¨ªses de la regi¨®n donde la interrupci¨®n voluntaria del embarazo est¨¢ totalmente prohibida. Este mi¨¦rcoles tambi¨¦n se ha convertido en el ¨²ltimo pa¨ªs de Am¨¦rica Latina en permitir la pastilla del d¨ªa despu¨¦s. Esta ser¨¢ gratuita en los centros de salud y tambi¨¦n se conseguir¨¢ sin receta en las farmacias, como cualquier otro anticonceptivo.
¡°Es una victoria enorme del movimiento feminista¡±, explica Jinna Rosales, coordinadora del Ge PAE, el grupo estrat¨¦gico que lleva 13 a?os luchando por la legalizaci¨®n de la p¨ªldora. ¡°Lamentablemente hay una campa?a de desinformaci¨®n enorme de los grupos antiderechos y religiosos que llega tambi¨¦n a quienes toman las decisiones¡±.
Aunque los componentes cambian (solo levonorgestrel o etinilestradiol y levonorgestrel), la anticoncepci¨®n de emergencia no tiene efectos abortivos, ya que no ser¨ªa eficaz contra un ¨®vulo fecundado. Sin embargo, esta creencia equivocada ha ido de boca en boca entre los hombres que han decidido sobre este servicio de salud de las mujeres, que adem¨¢s de ser legal en toda Am¨¦rica Latina, es gratuito en varios pa¨ªses como Chile, Argentina, Espa?a o M¨¦xico.
La PAE se prohibi¨® en Honduras en 2009 bajo el falso pretexto de que era ¡°abortiva¡±. Este fue uno de los primeros derechos arrebatados tras el golpe de Estado de Honduras, ya que su uso era libre y gratuito en el pa¨ªs desde 1999. Desde entonces, las ideas moralistas alrededor de la pastilla han calado entre los sectores m¨¢s conservadores del pa¨ªs, incluido el actual Ministro de Salud, Jos¨¦ Manuel Matheu, quien, a pesar de aparecer sonriente en la firma del acuerdo ejecutivo de este mi¨¦rcoles no ha escondido nunca su recelo. El tambi¨¦n doctor ha manifestado varias veces que consultar¨ªa el debate con la Conferencia Episcopal y en una entrevista con BBC asegur¨® incluso que no iba a promover la medida ¡°para que haya desenfreno sexual¡±. ¡°Vamos a usar la p¨ªldora del d¨ªa despu¨¦s para la que es v¨ªctima de una violaci¨®n. Para el que tenga un sexo irresponsable debe hacerse responsable del sexo¡±, a?adi¨®.
Bajo esta premisa que ignora la autonom¨ªa de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos se aprob¨® una medida a finales de 2022 en la que se permit¨ªa la venta de la PAE solo para supervivientes de violencia sexual. Esta iniciativa fue celebrada por algunos, que se?alaban que era un primer paso, y criticada por otras como el Centro de Derechos de las Mujeres de Honduras (CDM), quienes lamentan que es iniciativa ¡°revictimizante¡±. ¡°Esto obliga a las ni?as o mujeres violadas a ir al hospital a que los sanitarios lo comprueben¡±, explica Argentina Rodr¨ªguez, comunicadora y vocera de CDM. ¡°Adem¨¢s, dado el subregistro de estos casos, no beneficiar¨ªa siquiera al 1% de las afectadas¡±. Seg¨²n un estudio de la entidad, al a?o, solo 50 mujeres v¨ªctimas de la violencia sexual acuden al centro de salud. Sin embargo, el a?o pasado, el pa¨ªs registr¨® 2.914 v¨ªctimas de violaci¨®n.
Ahora empieza el trabajo m¨¢s fuerte
La lucha por la igualdad fue bandera pol¨ªtica de la presidenta quien, en su plan de Gobierno, asegur¨® que promover¨ªa la educaci¨®n sexual, combatir¨ªa la violencia de g¨¦nero, incorporar¨ªa a m¨¢s mujeres a la econom¨ªa, legalizar¨ªa el aborto en circunstancias limitadas y anular¨ªa la prohibici¨®n de las p¨ªldoras anticonceptivas de emergencia. Esta es de las primeras medidas m¨¢s tangibles de Castro, aplaudida incluso por las feministas m¨¢s cr¨ªticas con su Gobierno. El trabajo ahora, explican las mujeres que han impulsado esta legalizaci¨®n, es la veedur¨ªa. ¡°Existe un sector tan fuerte en contra de nuestros derechos que ahora es cuando empieza el trabajo m¨¢s fuerte de sensibilizaci¨®n, educaci¨®n sexual y desmitificaci¨®n de todo lo que se inventan alrededor de los derechos sexuales¡±, narra Regina Fonseca, coordinadora del programa de fortalecimiento al derecho a decidir de CDM.
Costa Rica fue el ¨²ltimo pa¨ªs que aprob¨® la PAE en Am¨¦rica Latina, en 2019, y la entrega de las p¨ªldoras se da por medio de la Caja Costarricense del Seguro Social de forma gratuita a la poblaci¨®n. Para Marcia Aguiluz, directora Legal para Am¨¦rica Latina en Women¡¯s Link, la decisi¨®n de la presidenta es todo un acierto: ¡°Significa eliminar una barrera para el acceso a la salud sexual y reproductiva; significa que ni?as, adolescentes y mujeres que requieren esta pastilla ya sea porque han tenido sexo en relaciones sin protecci¨®n o porque han sido v¨ªctimas de violencia sexual, puedan tenerla. Esta medida evitar¨¢ embarazos adolescentes y, sobre todo, garantiza el acceso a la salud de las mujeres. Es hist¨®rico¡±.
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