El dilema existencial de Lula: ?ir o no a Argentina?

La victoria en Argentina de Javier Milei le ha creado a Lula un conflicto existencial sobre la decisi¨®n de ir o no a su toma de posesi¨®n sobre todo porque el nuevo presidente argentino lo hab¨ªa calificado de ¡°corrupto y comunista¡±.

El Gobierno brasile?o cree que Milei deber¨ªa ya haber llamado a Lula para pedirle perd¨®n por el insulto. No lo ha hecho. Y es que para el l¨ªder brasile?o no se trata de una presidencia cualquiera, ya que Argentina siempre ha significado para ¨¦l u...

La victoria en Argentina de Javier Milei le ha creado a Lula un conflicto existencial sobre la decisi¨®n de ir o no a su toma de posesi¨®n sobre todo porque el nuevo presidente argentino lo hab¨ªa calificado de ¡°corrupto y comunista¡±.

El Gobierno brasile?o cree que Milei deber¨ªa ya haber llamado a Lula para pedirle perd¨®n por el insulto. No lo ha hecho. Y es que para el l¨ªder brasile?o no se trata de una presidencia cualquiera, ya que Argentina siempre ha significado para ¨¦l un importante centro pol¨ªtico de atenci¨®n y hasta afectivo. En 2003, cuando gan¨® por primera vez las elecciones, hizo su primer viaje presidencial a Buenos Aires.

El actual embajador de Brasil en Argentina, J¨²lio Bitelli, ha declarado que Lula a¨²n no ha tomado una decisi¨®n, misma que, conocido el talante pol¨ªtico del mandatario, solo tomar¨¢ por s¨ª mismo pese a los consejos que le rodeen.

Para explicar el conflicto existencial que la victoria del ultra argentino le est¨¢ creando a Lula, sobre todo desde que ha sabido que Milei ha invitado personalmente a Bolsonaro y a su familia a su fiesta, los analistas pol¨ªticos y culturales est¨¢n desempolvando la literatura.

As¨ª, se est¨¢n recordando obras cl¨¢sicas como el filme El Dilema de Sof¨ªa, con el drama personal que entra?a, o Informe sobre ciegos, del argentino Ernesto S¨¢bato.

No que el pragm¨¢tico Lula sea un frecuentador de literatura ni de arte, pero s¨ª posee un olfato especial para todo lo que se refiere a la pol¨ªtica, que tambi¨¦n es un arte que pueden ejercer hasta los analfabetos.

Hasta ahora, como suele hacer con frecuencia el pol¨ªtico brasile?o, Lula no ha resuelto el enigma de su ida a Argentina. Por ahora ha preferido esperar a tomar su decisi¨®n. Eso s¨ª: a¨²n no ha felicitado a su hoy ya colega argentino, como ha hecho, por ejemplo, el papa Francisco, a quien el nuevo presidente hab¨ªa tachado de demonio.

Lula ha dejado hasta ahora en abierto su decisi¨®n el 10 de diciembre, donde tendr¨ªa que felicitar a Milei por su victoria aplastante, al rev¨¦s de la suya frente Bolsonaro que fue solo por un pu?ado de votos.

Sin embargo, en las declaraciones de estos d¨ªas y antes de descifrar el enigma del viaje, Lula ha hecho declaraciones de estadista, con gran prudencia, mirando m¨¢s que a su dilema personal y existencial, al futuro de Argentina, coraz¨®n de las relaciones de Brasil con Am¨¦rica del Sur y m¨¢s all¨¢.

Lula ha recordado que en las relaciones de Brasil con los otros gobiernos de Am¨¦rica Latina ¡°no es necesario gustar o no de sus presidentes¡± y que es preciso que las personas ¡°aprendan a vivir democr¨¢ticamente hasta en la adversidad¡±.

Lula no quiso responder a la pregunta de qu¨¦ har¨ªa si se confirmara en la toma de posesi¨®n de Milei la presencia de Bolsonaro y su familia. Y es que, con mucha probabilidad, Lula debe estar esperando, en efecto, saber si tendr¨¢ que cruzarse con su adversario visceral.

En el caso hipot¨¦tico de que tengan que coincidir Lula y Bolsonaro en la fiesta de Milei, no le ser¨¢ tan f¨¢cil al presidente brasile?o olvidar que su antecesor se neg¨® a entregarle el faj¨ªn de mando y hasta se fue del pa¨ªs para no estar presente al acto. Ni podr¨¢ olvidar que est¨¢ acusado de haber tramado, desde el exterior, un intento de golpe popular, apoyado por el Ej¨¦rcito. Y Bolsonaro en este momento tampoco puede olvidar que, de alg¨²n modo, est¨¢ en las manos de Lula el que las decenas de acusaciones, muchas de ellas graves, que corren en manos de la justicia, podr¨ªan ma?ana mismo llevarle a la c¨¢rcel. Ahora el bast¨®n de mando est¨¢ en sus manos.

Y mientras Lula piensa y repiensa en sus adentros si tomar el avi¨®n para estar presente a la toma de posesi¨®n de Milei, la diplomacia de su gobierno trabaja en silencio y con pies de plomo para que el tema personal entre Lula y Milei no acabe quebrando la relaciones entre Brasil y Argentina, cuya importancia va m¨¢s all¨¢ del drama existencial y personal del l¨ªder brasile?o.

Lo acaba de resumir, como pisando en algodones, en una entrevista al diario O Globo, el actual embajador de Brasil en Argentina: ¡°Los canales est¨¢n abiertos. Estamos buscando formas de hacer con que las relaciones comiencen de la mejor forma posible¡±. Y a?adi¨®: ¡°La relaci¨®n bilateral es de tal modo densa e importante que sin duda va a continuar. Y es inter¨¦s de los dos pa¨ªses que inicien ya, entre los dos gobiernos. Brasil trabaja en este sentido¡±.

?Y Lula ir¨¢ o no? Es la noticia que esperan saber los periodistas y no solo ellos. El presidente brasile?o, escucha a su Gobierno y piensa. O ya lo tiene decidido y se divierte escuchando consejos sesudos. No llega a ser para ¨¦l el dram¨¢tico Dilema de Sof¨ªa, pero tampoco es la menor decisi¨®n de su pol¨ªtica exterior. Pol¨ªtica que tanto le atrae y a la que tanto mima. Para ¨¦l ser presidente de Brasil es importante, pero siempre ha oteado m¨¢s lejos.

Sin duda, si decidiera ir a Argentina, para Lula no ser¨¢ solo algo protocolario. Al sagaz pol¨ªtico brasile?o, que lleg¨® al trono del poder desde el polvo de la calle, le gustan los superlativos.