Javier Milei: el desprecio por las instituciones
Con una visi¨®n maniquea y ultrapersonalista, el presidente de Argentina pasa por encima de los l¨ªmites institucionales y considera enemigos a quienes piensan distinto o apenas discrepan con sus formas
Son apenas cuatro oraciones, pero dicen mucho sobre los tiempos que vivimos en la Argentina de Javier Milei.
Las primeras dos: ¡°Para neutralizar una fuerza se necesita una de igual intensidad y sentido contrario. No se puede combatir al kirchnerismo siendo moderados¡±.
?Qui¨¦n las pronunci¨®? No se sabe, pero todos lo sospechamos. Las poste¨® en X la cuenta an¨®nima ¡°Enfant Terrible¡± (@nicolasbrandeis), que propios y ajen...
Son apenas cuatro oraciones, pero dicen mucho sobre los tiempos que vivimos en la Argentina de Javier Milei.
Las primeras dos: ¡°Para neutralizar una fuerza se necesita una de igual intensidad y sentido contrario. No se puede combatir al kirchnerismo siendo moderados¡±.
?Qui¨¦n las pronunci¨®? No se sabe, pero todos lo sospechamos. Las poste¨® en X la cuenta an¨®nima ¡°Enfant Terrible¡± (@nicolasbrandeis), que propios y ajenos adjudican al estratego pol¨ªtico Santiago Caputo, el tercer y poderoso v¨¦rtice del declamado ¡°tri¨¢ngulo de hierro¡±, junto al presidente Milei y la herman¨ªsima Karina.
Caputo jam¨¢s ha salido a desmentir que esa cuenta sea suya. Y el presidente Milei aliment¨® las sospechas el lunes 4 de noviembre. Retuite¨® ese posteo con dos frases adicionales, que redact¨® en may¨²scula, que en la jerga de las redes sociales equivale a gritar: ¡°Nota para los tibios pelotudos cultores de las formas sobre el contenido. Fin¡±.
Mucho puede extraerse de ambos mensajes, tanto sobre el fondo como sobre las formas, mal que le pese al presidente, cuando cumple un primer a?o de mandato. Dicen mucho sobre c¨®mo Milei vive y gestiona el poder, sobre c¨®mo se comunica con la sociedad, sobre el notable retroceso institucional que afronta la Argentina desde que ingres¨® a la Casa Rosada en diciembre de 2023¡ y lo poco que eso les importa a ¨¦l y a muchos argentinos.
Primero, el contexto. Ambos mensajes fueron posteados cuando la oposici¨®n parec¨ªa muy cerca de juntar los votos necesarios para aprobar en el Congreso un proyecto de ley que limitar¨ªa las facultades de Milei para dictar decretos de necesidad y urgencia (DNU), salte¨¢ndose al Congreso, donde se encuentra en rotunda minor¨ªa.
Al final, la iniciativa opositora no prosper¨® porque el PRO, el partido que lidera el expresidente Mauricio Macri, sali¨® al rescate de Milei, que a¨²n as¨ª los corre por derecha y ningunea a Macri y al PRO, y responde con insultos a todos los que abogan por m¨¢s institucionalidad en un pa¨ªs devastado por la anomia desde hace d¨¦cadas.
Para Milei, esos planteos son propios de ¡°tibios pelotudos¡±, cuando no de aquellos que conspiran para derrocarlo, en un juego de espejos con la expresidenta Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, que tambi¨¦n rechazaba las formas, debilit¨® las instituciones cuanto pudo y vio una conspiraci¨®n ¨Cy un enemigo¨C a la vuelta de cada esquina.
Pero los mensajes dicen mucho m¨¢s. Por ejemplo, sobre Caputo, que adora moverse en las sombras. As¨ª como no firma sus posteos en X, tampoco estampa su firma en las decisiones pol¨ªticas y administrativas que toma en la Casa Rosada. De hecho, en el organigrama del Estado figura apenas como un ¡°asesor¡±, sin responsabilidad jur¨ªdica.
Esos mensajes tambi¨¦n denotan un notable desprecio por quienes piensan distinto que Milei o siquiera discrepan con sus formas. Son, sin vueltas, ¡°pelotudos¡±, que al decir de la Real Academia Espa?ola ¨Cpara aquellos que lean estas l¨ªneas y no sean argentinos¨C son personas que ¡°tienen pocas luces¡± o que obran como as¨ª fuera.
¡°Pelotudos¡± es, cabe aclarar, uno de los insultos m¨¢s suaves que ha lanzado Milei desde que asumi¨® la Presidencia. Basta con consultar en Internet para corroborar las agresiones verbales que lanz¨® contra otros jefes de Estado y de Gobierno extranjeros y contra expresidentes, diputados y senadores, gobernadores, banqueros, periodistas, industriales, empresarios, sindicalistas y dirigentes sociales y deportivos, adem¨¢s de los destratos p¨²blicos que propin¨® a referentes de su propio espacio, La Libertad Avanza, empezando por la vicepresidenta, Victoria Villarruel, o quienes fueron sus primeros jefe de Gabinete, Nicol¨¢s Posse, y ministra de Relaciones Exteriores, Diana Mondino.
Para Milei y sus ac¨®litos, la ecuaci¨®n es sencilla: est¨¢s con ¨¦l o contra ¨¦l. No hay margen para terceras posiciones, objeciones, discrepancias, dudas o matices. Todo eso es, seg¨²n el Presidente, propio de ¡°la casta¡±, de ¡°ensobrados¡±, de ¡°retrasados mentales¡± o ¡°amargos con muy lindos modales¡±, o de ¡°empresaurios¡± y ¡°prebendarios¡± que s¨®lo defienden sus ¡°kioscos¡± y ¡°negociados¡±, cuando no de ¡°comunistas¡± a los que hay que derrotar en una ¡°batalla cultural¡± y echar de la administraci¨®n p¨²blica.
?Suena exagerado? El propio Milei aludi¨® a la purga ideol¨®gica que orden¨® dentro de la Canciller¨ªa, en una entrevista que concedi¨® a¡ su pareja, ¡°Yuyito¡± Gonz¨¢lez. ¡°La pol¨ªtica exterior la fija el Presidente, vos no pod¨¦s votar cualquier cosa¡±, remarc¨®, tras echar a la canciller Mondino por una votaci¨®n en las Naciones Unidas. ¡°Estoy para echarlos a todos. Son traidores a la patria¡±.
En la visi¨®n maniquea y ultrapersonalista de Milei, quienes no adscriben a los bandos mile¨ªsta y kirchnerista, o plantean matices, son los peores. As¨ª lo sostuvo el ¨²ltimo viernes de noviembre: ¡°Los que juegan para todos lados son los peores de todos, incluso mucho peor que los completamente malvados. Ya que al que es malvado y se identifica como tal lo tenemos completamente identificado. En cambio, el otro se comporta como bueno, y no sabemos nunca cu¨¢les son sus actitudes y sus intenciones nefastas¡±.
S¨ª, ¡°nefastas¡±. Para Milei, no hay posibilidad alguna de que la intenci¨®n de quien objete, relativice o matice una idea o iniciativa suya sea v¨¢lida, mucho menos aceptable (y menos todav¨ªa positiva). Y en esto, las huestes que siguen al libertario, empujados por las diatribas de ¡°el Gordo Dan¡± y otros alfiles en las redes sociales, se asemejan mucho a la advertencia que en otros tiempos le lanzaba Carlos Zannini a quienes estaban por ingresar al despacho de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner: ¡°A la Presidenta no se le habla; se la escucha¡±.
La ret¨®rica cruje, sin embargo, al analizar algunas iniciativas oficiales durante este primer a?o de Milei en el poder. Porque el Gobierno redujo la inflaci¨®n, baj¨® el riesgo pa¨ªs, control¨® el d¨¦ficit fiscal y acot¨® el gasto p¨²blico ¨Centre otros notables y bienvenidos logros econ¨®micos, fiscales y financieros¨C, pero tambi¨¦n redujo el poder adquisitivo de millones de argentinos y licu¨® las jubilaciones, mientras que mantiene intacto el r¨¦gimen prebendario de Tierra del Fuego para unos pocos multimillonarios. Y pregona contra la publicidad oficial, pero por debajo de los radares contin¨²a el reparto discrecional de la ¡°pauta¡± entre ciertos medios de comunicaci¨®n y periodistas.
Tambi¨¦n se encienden algunas luces amarillas en el tablero pol¨ªtico. ?El ejemplo m¨¢s reciente? Los legisladores libertarios impidieron que la C¨¢mara de Diputados le diera media sanci¨®n a ¡°ficha limpia¡±, el proyecto para que los pol¨ªticos condenados por corruptos no puedan ser candidatos, alimentando las sospechas de un acuerdo solapado ¨Co al menos connivencia¨C con la expresidenta Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner rumbo a las elecciones de 2025. ?Otro ejemplo? Milei quiere que sus candidatos, Ariel Lijo y Manuel Garc¨ªa Mansilla, lleguen a la Corte Suprema, sea con acuerdo del Senado o con una designaci¨®n ¡°ad hoc¡±, por decreto, durante el receso del Congreso, sin importar las objeciones que acumularon, en particular Lijo, que arrastra m¨²ltiples cuestionamientos jur¨ªdicos, laborales y morales.
Para Milei, las formas son anecd¨®ticas o irrelevantes. Importa el objetivo, incluso si conlleva pasar por encima de las instituciones y las pol¨ªticas de Estado, dejar aislada a la Argentina ¨Ccomo cuando fue el ¨²nico pa¨ªs que vot¨® en contra de una resoluci¨®n de la ONU que busca intensificar los esfuerzos para prevenir y eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres¨C, o poner en riesgo a diplom¨¢ticos argentinos, como con su idea de trasladar la embajada de Tel Aviv a Jerusal¨¦n, a pesar de la legislaci¨®n vigente y una resoluci¨®n de la ONU.
As¨ª, a lo largo de estos 12 meses, el presidente estabiliz¨® la econom¨ªa y reduce cada d¨ªa la mara?a de regulaciones y trabas que la ralentizan. Tambi¨¦n recuper¨® el control de las calles, que eran un martirio. Y cuenta con un amplio apoyo popular, m¨¦rito de sus acciones y de las paup¨¦rrimas opciones que ofrece hoy la oposici¨®n. Pero si algo nos muestra la historia ¨Cy en particular la historia reciente¨C es que quienes hoy est¨¢n arriba, ma?ana estar¨¢n abajo. Y viceversa. Y que las reglas y abusos que hoy te benefician y que hoy impon¨¦s, ma?ana te perjudicar¨¢n y te las impondr¨¢n. Por eso son importantes las formas, por eso son bienvenidos los controles cruzados y los l¨ªmites institucionales al poder.
Al actuar como act¨²a, pasando por encima de instituciones y personas, el presidente olvida que para llegar a un objetivo a menudo resulta esencial el recorrido.
Sin camino, no se llega al destino.