La autoficci¨®n manda en el c¨®mic

?Atragantados de literatura del yo? Pues algunas de las novelas gr¨¢ficas m¨¢s vibrantes del a?o vienen de ah¨ª, de hurgar en la memoria personal y familiar, a veces con la sutileza de una retroexcavadora. El g¨¦nero est¨¢ por todas partes (narrativa, teatro, cine¡­), aunque nada como las redes sociales para fabricar acaramelada autoficci¨®n. El c¨®mic lleva d¨¦cadas explorando ese camino. L¨ªcito preguntarse si todav¨ªa queda algo nuevo bajo este sol. Ver¨¢n que s¨ª.

Nora Krug ha logrado en Heimat (Salamandra Graphic) una obra implacable y delicada sobre la imbricaci¨®n pol¨ªtica, social y militar de su familia en el Tercer Reich y su propio sentimiento de culpa. Autoficci¨®n y nazismo: imposible juntar dos tendencias m¨¢s comerciales. Sin embargo, el c¨®mic desprende verdad por todas partes. Una narraci¨®n que avanza conforme la autora desvela aspectos desconocidos del pasado al tiempo que profundiza en su identidad alemana: la verg¨¹enza, el disimu?lo, la melancol¨ªa, el heimat (que traducido en corto significa patria y en largo define el sentido de pertenencia a una cultura, se encarne en un bosque o en unas galletas de Navidad). Casada con un jud¨ªo neoyorquino, Krug visita archivos en las localidades donde nacieron sus abuelos; se entrevista con parientes, vecinos e historiadores; compra objetos y fotos antiguas en mercadillos, dibuja un cuaderno de nostalgias con cosas de solidez germana: el pegamento Uhu, los ap¨®sitos Hansaplast o el jab¨®n Gall-Seife.

Una lee como si estuviera espiando por el ojo de la cerradura, asomada al interior del alma atormentada (?hay algo m¨¢s alem¨¢n que un alma atormentada?) de la autora, atrapada entre el deseo de disfrutar de una identidad (el derecho a la nostalgia) y el remordimiento heredado por los d¨ªas de Hitler. La narraci¨®n relega la cl¨¢sica estructura en vi?etas, reservada para episodios concretos, y se despliega en un heterodoxo formato que mezcla fotograf¨ªas, documentos, libretas escolares, dibujos y caligraf¨ªas (y s¨ª, las tipograf¨ªas pueden tener poder evocador).

Tambi¨¦n Jorge Gonz¨¢lez y Paco Roca desvelan una parte de su ¨¢lbum familiar en Llamarada (ECC) y Regreso al Ed¨¦n (Astiberri). Puede que no partan de un pasado tan traum¨¢tico como el de la alemana, pero cada familia esconde en el armario sus tragedias y disfunciones. Gonz¨¢lez rescata la historia de su abuelo, gloria del f¨²tbol en las barriadas de Avellaneda, conocido como Llamarada por su cabello pelirrojo. En saltos sin orden cronol¨®gico, el dibujante argentino se introduce a s¨ª mismo, a su padre y a sus hijos en un ¨¢lbum hecho con l¨¢pices y silencios, que explora las relaciones paternofiliales y la relevancia de mantener cadenas de transmisi¨®n entre generaciones. El viaje de Paco Roca es la culminaci¨®n de un proyecto ¨ªntimo que se despert¨® tras la muerte de su padre en La casa, que este verano le dio su primer Eisner (Emma R¨ªos recibi¨® otro por su portada para Bella muerte. La rata). Ahora la biograf¨ªa de su madre le sirve para retratar la machacada generaci¨®n de la posguerra espa?ola, cuyo principal acto de hero¨ªsmo consisti¨® en sobrevivir.

Memoria familiar ex¨®tica hay en Mis cien demonios (Reservoir Books), colorida autobiograf¨ªa gr¨¢fica de Lyn?da Barry, hija de emigrantes filipinos en EE UU, y exploraci¨®n personal dolorosa en las vivencias de Gabrielle Bell en Todo es inflamable (La C¨²pula). Para acabar, dos autoficciones m¨¢s: Algo extra?o me pas¨® camino de casa (Astiberri), donde Miguel Gallardo cuenta su experiencia con el c¨¢ncer en este a?o maldito, y Siempre tendremos 20 a?os (Norma), donde Jaime Mart¨ªn cierra su trilog¨ªa familiar ahora con su generaci¨®n como protagonista del tebeo. Entre quienes eligieron contar vidas ajenas figuran Sybille Titeux de la Croix y Amazing Am¨¦ziane, que reconstruyeron la lucha de la activista Angela Davis en Miss Davis (Flow Press), un ¨¢lbum contundente y oportuno en el a?o en que repunt¨® el Black Lives Matter.

Otra tendencia en alza fue la reformulaci¨®n gr¨¢fica de obras exitosas. Patria (Planeta C¨®mic) sigui¨® su imparable expansi¨®n hacia otros formatos: Toni Fejzula hace un esfuerzo de s¨ªntesis en su adaptaci¨®n al c¨®mic y juega con los colores para identificar personajes. El best seller internacional sobre el origen de la humanidad de Yuval Noah Harari (16 millones de ejemplares vendidos) tiene tambi¨¦n una versi¨®n en vi?etas, Sapiens. Una historia gr¨¢fica (Debate), gracias a Daniel Casanave y David Vandermeulen. Por su parte, Eug¨¨nia Angl¨¨s logra un poderoso despliegue visual a partir del ensayo de Antony Beevor La Segunda Guerra Mundial (Pasado & Presente), condensado en 2.000 ilustraciones.

Igualmente la literatura est¨¢ detr¨¢s de los ¨²ltimos trabajos de Isabel Greenberg y Santiago Garc¨ªa y Javier Olivares, aunque son proyectos originales. La brit¨¢nica public¨® a comienzos de 2020 La ciudad de cristal (Impedimenta), una recreaci¨®n de los mundos imaginarios de infancia y juventud de las hermanas Br?nte. Otro ¨¢lbum valioso de una dibujante que casi nunca decepciona. Si en Las Meninas Garc¨ªa y Olivares se arriesgaron con ¨¦xito, en La c¨®lera (Astiberri) confirman que son la pareja art¨ªstica m¨¢s potente del c¨®mic espa?ol con un prodigio gr¨¢fico que transmite la energ¨ªa, la fuerza y la determinaci¨®n de Aquiles y dem¨¢s h¨¦roes cl¨¢sicos.

Hubo, claro est¨¢, sugerentes ficciones de todo estilo y condici¨®n. Thrillers como el protagonizado por Cassandra Darke (Salamandra Graphic), una galerista estafadora, c¨ªnica y mis¨¢ntropa, de Posy Simmonds, la dama del c¨®mic brit¨¢nico; el noir c¨¦ltico de Miguelanxo Prado alrededor de una trama arqueol¨®gica en El pacto del letargo (Norma), o la intriga sobre la corrupci¨®n pol¨ªtica en Yo, mentiroso (Norma), de Antonio Altarriba y Keko. Felipe Hern¨¢ndez Cava y Antonia Santolaya indagan en los fanatismos de anteayer en Del Trastevere al para¨ªso (Reservoir Books), un c¨®mic de sutiles acuarelas y locuras terroristas alrededor de las Brigadas Rojas. Y de luchas pol¨ªticas y represi¨®n policial tambi¨¦n habla El dif¨ªcil ma?ana (Astiberri), de Eleanor Davis, una autora del c¨®mic alternativo estadounidense encumbrada por esta obra, premio Ignatz a la mejor historia de 2020. El repaso al c¨®mic de autor puede concluir con A trav¨¦s (P¨ªpala), el libro mudo de Tom Haugomat, que narra la existencia de un hombre a partir de lo que ocurre tras ventanas, pantallas, escotillas o prism¨¢ticos. El r¨ªo de la vida sin palabras.