El juego del amor y del tiempo

Una peque?a escuela de las afueras de Dubl¨ªn. En el patio, el himno luminoso del barrio podr¨ªa ser Village Idiot, de Van Morrison. O un himno de los Kinks, dice el carnicero. O una que, con tono de balada, canta el personaje de Sara mientras abre la peluquer¨ªa. Todo esto lo imagino yo creyendo en la esquina de la escuela y la peluquer¨ªa con un sol que quiero permanente.

Ahora han pasado unos a?os, y en el Bush Theatre de Londres se informa, refulgente como un cartel, que la obra fue escrita y levantada como un ¨¢rbol de hojas verdes por el dramaturgo David Horan y por su pareja art¨ªstica, Iseult Golden, actriz, dramaturga y codirectora del Inis Theatre de Dubl¨ªn. En mi imaginaci¨®n de verano, el grupazo est¨¢ tan cercano a la funci¨®n, llamada Classe, casi como el combo r¨ªtmico de Joe Strummer. Signos de identidad: Classe sube a la escena del 11 de mayo hasta el 1 de junio de 2019. La primera banda del Bush estuvo encabezada (informaci¨®n por gentileza de Tania Brenlle, de La Villarroel) por Will O¡¯Connell, Sarah Morris y Stephen Jonen. M¨¢s estrellas del ?grupo: lo encabeza el profesor Ray McCafferty pero con otro reparto. O sea, catalanes, y con otro ¨¢rbol geneal¨®gico. Y, si gastasen la tarde chulesca, las camisetas llevar¨ªan, enlazadas, las palabras ¡°humor¡± y ¡°tensi¨®n¡±.

El juego de los amigos pregunta en el aire si ese salto es en el tiempo o un se?or flashback. Vamos a seguir repartiendo: en nuestro elenco, el joven profesor y escritor que intenta ayudar a Ray McCafferty, al que encarna Pol L¨®pez. Y Jayden Costello, a cargo del ficticio Brian Kaylen (o sea, su padre), y la joven Sara Kayle, encarnada por la actriz que interpreta a Sara. Datos que suenan muy ap¨®crifos, pero los compro porque: a) los padres est¨¢n separados, y b) los personajes, muy catalanes, imitan con mucho salero el acento irland¨¦s (un poco a lo Kiko Veneno). ?He dicho que el hijo de Sarah y Brian tiene nueve a?os? Dicho queda. M¨¢s datos: Brian trabajaba de mec¨¢nico y ahora lleva un taxi: turno de noche.

A la que me descuido se me va la genealog¨ªa. Ejemplo: tanto McCafferty como Jayden parecen m¨¢s buenos que santos de palo. Adivinen a qu¨¦ chaval le tratar¨ªa un psic¨®logo (o pedagogo) para lijar algunas sencillas dificultades de alfabetizaci¨®n pero que pueden ir a m¨¢s. Otro ejemplo: McCafferty parece t¨ªmido como un ni?o recatado, aunque al final brota una sorpresa a tener en cuenta. Releyendo todo esto, doy en pensar que Classe est¨¢ m¨¢s cerca de una novela que de un musical, o sea, rozando la viva fabulaci¨®n.

Rematen ustedes la historia de la brillante tarde de verano. Y a guisa de canci¨®n brota (o rebrota) esta otra: Classe ¡°habla de todas esas zonas grises que envuelven las buenas intenciones y eso es lo que la hace brillar¡± (What¡¯s On Stage). No teman el peligro de irse por las altas cumbres del despiste: vayan tranquilos, paso a paso, porque Pau Carri¨® es un director y traductor de muy fina mano (y o¨ªdo), y tiene en el zurr¨®n cl¨¢sicos de tron¨ªo como Nit de reis, L¡¯hostalera, Enric V, Hed?da Gabler y Hamlet, buen rep¨®quer para ir abriendo boca.

Algunos hits de su compa?ero el actor Pol L¨®pez: Testimoni de guerra (2021), Solitud (Victor Catal¨¤) o Esperant Godot, de Beckett. Algunos ¨¦xitos de Pau Roca: Obras de Duncan MacMillan (Pulmons) o Lorca. Y de Carlota Olcina: El quadern daurat o Incendios. Un final contundente y capic¨²a: mezclar pu?etazo y carcajada. Y no les digo m¨¢s.

Produce la compa?¨ªa Sixto Paz, nacida en 2013, con voluntad de llegar para quedarse.

Classe. Iseult Golden y David Horan. Dirigida y traducida por Pau Carri¨®. La Villarroel. Barcelona. Hasta el 9 de mayo.

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