Juan Ram¨®n Masoliver, la construcci¨®n de una cultura fascista

Ezra Pound ¡ªpatriarca del modernism internacional¡ª ser¨ªa acusado de traici¨®n. La noticia la avanz¨® The Washington Post en plena Segunda Guerra Mundial, cuando hac¨ªa un a?o que la Office of Facts and Figures del Departamento de Justicia estaba analizando las locuciones de Pound en Radio Roma. En la emisora p¨²blica del Estado fascista, el poeta elogiaba a ...

Ezra Pound ¡ªpatriarca del modernism internacional¡ª ser¨ªa acusado de traici¨®n. La noticia la avanz¨® The Washington Post en plena Segunda Guerra Mundial, cuando hac¨ªa un a?o que la Office of Facts and Figures del Departamento de Justicia estaba analizando las locuciones de Pound en Radio Roma. En la emisora p¨²blica del Estado fascista, el poeta elogiaba a Mussolini, cultivaba variadas formas de antisemitismo o defend¨ªa las bondades de la eugenesia y las virtudes del Mein Kampf. Y el 2 de octubre de 1941 dedic¨® unos segundos de su programa a una colecci¨®n de poes¨ªa que se publicaba en Barcelona: Poes¨ªa en la mano. Hac¨ªa tres meses que Pound hab¨ªa escrito al director de la colecci¨®n pidiendo informaci¨®n. Juan Ram¨®n Masoliver atendi¨® el ruego y conserv¨® la carta con devoci¨®n. Llevar¨ªa su fidelidad hasta el infinito y m¨¢s all¨¢. El cr¨ªtico Masoliver, primo de Luis Bu?uel, naci¨® en 1910 en Zaragoza y muri¨® en 1997 en Barcelona.

La hip¨®tesis que M¨ªriam G¨¢zquez plantea en este ensayo de historia literaria es apasionante. A finales de los a?os veinte, a Masoliver y sus amigos la vanguardia les atraviesa la conciencia y en muy poco tiempo pasan del fervor surrealista a la decepci¨®n. ?l se va. Primero ampl¨ªa estudios en Par¨ªs porque quiere ser diplom¨¢tico y conecta con n¨²cleos del modernism. Luego salta a G¨¦nova para ejercer como lector de espa?ol y all¨ª conocer¨¢ a Pound, cada vez m¨¢s comprometido con el fascismo. La hip¨®tesis de G¨¢zquez es que el magisterio est¨¦tico de Pound, donde la tradici¨®n occidental debe ser el eje de una cultura fascista y elitista, ser¨¢ el modelo de mediaci¨®n cultural que Masoliver intentar¨¢ replicar en el sistema literario barcelon¨¦s de posguerra: la primer¨ªsima posguerra. Ha sido alfil de la propaganda insurrecta con ramificaciones italianas y con protagonismo en el dise?o de la llegada franquista a Catalu?a, es nombrado jefe de Propaganda durante el periodo de ocupaci¨®n de Barcelona, Serrano Su?er lo delega para que organice el recibimiento al conde Ciano y dirige la colecci¨®n Poes¨ªa en la mano que publica la editorial falangista Yunque.

La comprensi¨®n del periodo cambia con el estudio met¨®dico de la documentaci¨®n conservada por la viuda de Masoliver

La profesora G¨¢zquez demuestra su hip¨®tesis a partir de dos evidencias. La primera es explicar c¨®mo Pound entend¨ªa la mediaci¨®n literaria, una funci¨®n en el sistema cultural cuya mejor concreci¨®n era la pedagog¨ªa a trav¨¦s de las antolog¨ªas. As¨ª actu¨® Masoliver tambi¨¦n, en especial con Las trescientas. Ocho siglos de l¨ªrica espa?ola, de 1941. La segunda evidencia es la principal novedad del libro: el estudio met¨®dico de la documentaci¨®n conservada por la viuda de Masoliver. La comprensi¨®n del periodo cambia con esta informaci¨®n. Cartas, recortes de prensa, programas editoriales. Sobre todo los materiales de esa colecci¨®n de libros de poes¨ªa, tanto los publicados como las pruebas de los que quedaron in¨¦ditos por falta de papel para imprimirlos o porque las ventas no lograron consolidar el proyecto. En tiempos de miseria, Poes¨ªa en la mano era un diamante. Lo que reflejan las diversas caras de esa piedra preciosa se explica solo como una aventura modernizadora, pero a la vez revela otras realidades. Una es el intento de sustituci¨®n integral del sistema literario catal¨¢n de preguerra por otro completamente ajeno. Otra es la m¨¢s oscura y poundiana: ?podr¨ªamos estudiar ese corpus como una propuesta de fundamentaci¨®n de una cultura espa?ola y europea fascista? Dir¨ªa que s¨ª. Y dir¨ªa que ese fracaso activ¨® la mutaci¨®n de Masoliver para convertirse en un mediador clave de posguerra encerrado en una columna y en su torre de marfil.

Puedes seguir a BABELIA en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.