La justicia avala el modelo de inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica en Catalu?a

La inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica est¨¢ a salvo. El modelo educativo catal¨¢n que han defendido todos los presidentes de la Generalitat desde Jordi Pujol y la mayor parte de la ciudadan¨ªa ha recibido el respaldo del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC). El Gobierno catal¨¢n, sin embargo, deber¨¢ otorgar una atenci¨®n individualizada a las tres familias que reclamaron la escolarizaci¨®n de los hijos en castellano en base a la sentencia dictada por el Tribunal Supremo en diciembre de 2010.

El alto tribunal oblig¨® al ejecutivo a adoptar ¡°cuantas medidas sean precisas¡± para que el castellano tambi¨¦n sea lengua vehicular en la escuela, aunque matiza que compete a la Generalitat fijar la proporci¨®n de ambas lenguas y la forma de aplicarlo en las aulas. En el caso de las tres familias, ¡°no ha quedado acreditado¡± que la Generalitat ¡°haya ejecutado debidamente el fallo¡±, seg¨²n el auto del pleno, presidido por el magistrado Emilio Berlanga. El auto se limita a los tres casos planteados, pero abre la puerta para que, a partir de ahora, las familias que lo reclamen puedan acogerse a su derecho de recibir una atenci¨®n personalizada y escolarizar a sus hijos en castellano, tal como precisa el Supremo.

Tras siete horas de debate en dos sesiones, el pleno aprob¨® este jueves por mayor¨ªa ¡ª22 votos sobre 23¡ª estimar, parcialmente, el recurso de la Generalitat contra un auto de la Secci¨®n Quinta del mismo TSJC. En aquel auto, de julio de 2011, los magistrados daban la raz¨®n a las tres familias que impulsaron la demanda y otorgaban un plazo de dos meses al Departamento de Educaci¨®n para ¡°adaptar su sistema de ense?anza a la nueva situaci¨®n creada¡± por la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto, que otorgaba al castellano, lo mismo que al catal¨¢n, el estatus de ¡°lengua vehicular de la ense?anza¡±.

A partir de ahora, la Generalitat deber¨¢ responder de forma obligatoria a las familias que reclamen educar a sus hijos en castellano

Ese auto fue el que encendi¨® todas las alarmas y levant¨® una enorme polvareda pol¨ªtica, ya que daba a entender que el modelo de inmersi¨®n en su conjunto estaba en tela de juicio. Tras una serie de sucesos procesales que culminaron con la suspensi¨®n temporal del auto, el TSJC acord¨® ayer dejar el pol¨¦mico auto sin efecto ¡°en cuanto se refiere al entero sistema de ense?anza en Catalu?a¡±, aunque no en relaci¨®n con las medidas sobre ¡°la ense?anza que se imparte a los hijos del recurrente¡±, en alusi¨®n a las familias afectadas.

En consecuencia, al dejar sin efecto la resoluci¨®n, el TSJC mantiene el modelo educativo vigente en Catalu?a, circunscribe el asunto a las familias demandantes y remite la resoluci¨®n de este tipo de conflictos a lo que ya ha dicho el Tribunal Supremo. Ahora bien, ?c¨®mo debe interpretarse la sentencia del alto tribunal, que es poco clara en cuanto al alcance y la profundidad de las medidas que garanticen la presencia del castellano como lengua vehicular?

El pleno del TSJC no ha entrado a valorar esa cuesti¨®n y considera que ¡°no se puede hacer un pronunciamiento general¡± sobre el uso del castellano a ra¨ªz de ¡°una lectura descontextualizada y literal de una frase del fallo del Supremo¡±. ¡°Tan solo el propio Tribunal Supremo hubiera podido en su momento, v¨ªa aclaraci¨®n de la sentencia, haber precisado el contenido de aquella frase¡±. La sentencia admit¨ªa que el catal¨¢n ¡°pueda tener un trato diferenciado¡±, siempre y cuando el castellano ¡°no quede reducido al objeto de estudio de una asignatura m¨¢s¡±.

Los demandantes han anunciado
que presentar¨¢n un recurso de casaci¨®n ante el Supermo

La sentencia de diciembre de 2010 ¡ªalfa y omega del embrollo judicial a prop¨®sito del modelo educativo catal¨¢n¡ª se ampara en ¡°la nueva situaci¨®n creada¡± por la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto. El Supremo admite que la puesta en pr¨¢ctica corresponde al Gobierno catal¨¢n. Si este considera que el objetivo de normalizaci¨®n ling¨¹¨ªstica est¨¢ conseguido, ¡°ambas lenguas cooficiales deber¨ªan ser vehiculares en la misma proporci¨®n¡±. Pero si no lo cree as¨ª y cree que existe a¨²n ¡°un d¨¦ficit en detrimento de la lengua propia de Catalu?a¡± ¡ªcomo defiende la Generalitat¡ª ¡°se deber¨¢ otorgar al catal¨¢n un trato diferenciado sobre el castellano en una proporci¨®n razonable que, sin embargo, no haga ilusoria o simplemente constituya un artificio de mera apariencia en la obligada utilizaci¨®n del castellano como lengua vehicular¡±.

Convivencia C¨ªvica Catalana, la entidad que respalda las demandas de las familias, ya ha anunciado que presentar¨¢ un recurso de casaci¨®n ante el Tribunal Supremo. Su abogado, ?ngel Escolano, considera que, a partir de ahora, los padres que demanden a la administraci¨®n podr¨¢n exigir que se cumpla la sentencia.

La magistrada N¨²ria Cl¨¨ries emiti¨® un voto particular en el que considera que la Generalitat ya ha ejecutado la sentencia del Supremo y ha demostrado, adem¨¢s, que el catal¨¢n ¡°est¨¢ en situaci¨®n de desventaja¡±.