In¨²tiles en formaci¨®n de ataque

Si cada integrante de la pandilla basura encaramada al poder, lo mismo da que forme parte del cortejo f¨²nebre de Rajoy, de la descomposici¨®n auton¨®mica, del camposanto de Diputaciones, del mausoleo del Senado, de la monarqu¨ªa armada, de las insolvencias municipales, de la aristocracia judicial y dem¨¢s agrietadas porcelanas, sin olvidar a la banca asesina, la partitocracia a su servicio y la Real Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol, si toda esa legi¨®n de novios de la muerte se armase de unas tijeras de podar, podr¨ªan degustar sus p¨®cimas al mismo ritmo y con dosis tan purgantes como las aplicadas a s¨²bditos, plebeyos, esclavos y siervos, hasta hace poco ciudadanos con derechos y prestaciones. Entretanto Ikea suministra las guillotinas y machetes para cuando den la se?al y comience el gran marat¨®n de justicia po¨¦tica, no estar¨ªa de m¨¢s que los se?oritos y su corte de palanganeros y propagandistas compartiesen algo m¨¢s que el hip¨®crita gesto malcarado con la incontable muchedumbre de damnificados. A cada nuevo recorte ¡ªcon sus inducidos desempleos, desahucios, inanici¨®n, miedo y desesperaci¨®n¡ª, cada miembro de la pandilla deber¨ªa ofrecer en sacrificio una parte de s¨ª, para saber lo que vale un peine. ?Hachazo a la educaci¨®n?: poda de falange. ?Recorte de la sanidad p¨²blica?: arranque de metatarsiano. ?Liquidan la televisi¨®n p¨²blica?: extirpaci¨®n de trapezoide, c¨²bito y radio. Y as¨ª un chasquido tras otro. ?Se cepillan el suministro a la Iglesia cat¨®lica?: implante, aunque sea capilar. Hallar otros m¨¦todos para resolver la crisis provocada por la delincuencia financiera, impune y crecida, ser¨ªa coser y cantar hasta para gentes intelectualmente tan necesitadas. Los parias de la tierra ya conocen las nuevas directrices del Fondo Monetario Internacional a prop¨®sito de los excesos en esperanza de vida que tanto preocupan a los mercados. Todos muertos. Pero a cambio, la clase dirigente puede ofrecer la mejor y m¨¢s ilustre colecci¨®n de mu?ones. Qu¨¦ gran escaparate, el Consejo de Ministros. ?Oh!, prodigio multiforme de Gobierno valenciano¡­ Cu¨¢n excitante y excelsa suena la sinfon¨ªa del afilador.

Nunca en la historia de la democracia postfranquista se juntaron tantos in¨²tiles en formaci¨®n de ataque, a las ¨®rdenes del enemigo y con arsenal truculento. No echen la culpa a las autonom¨ªas, porque m¨¢s all¨¢ del camelo para garantizar el expolio fiscal acostumbrado, fue un gran hallazgo para la derecha celtib¨¦rica con ganas de hacer caja. La vaciaron. Y no hallando salida, hasta la nomenclatura perif¨¦rica sacrifica la propia raz¨®n de ser y de estar, a condici¨®n de evitar su propio harakiri. Tambi¨¦n les llegar¨¢, no desesperen. En el espectacular desfile de momios, s¨®lo faltaba la socialdemocracia errante, predicando desde Saturno la autodefensa de la ciudadan¨ªa esquilmada. Eso s¨ª, dentro de un orden, salvando a la realeza y sin radicalidad. ?Ser¨¢ una misa gospel?