El 'Decameron' de la supervivencia

Jos¨¦ Carlos Somoza (La Habana, 1959) reconoce que para parir su ¨²ltima novela ha necesitado escribir antes otras 11. No lo dice como cumbre literaria ni como ocaso de una trayectoria tard¨ªa. "Tetrammeron es un nombre que llevaba conmigo mucho tiempo. Antes incluso que mi carrera de escritor". "De alguna manera me tra¨ªa a la memoria el Decameron de Bocaccio, pero tampoco quer¨ªa suministrar la idea al lector de que iba a encontrarse con unos personajes que cuentan cuentos simplemente por ocio", detalla.

De lo que habla Somoza es de Tretammeron, su ¨²ltima novela, que presentar¨¢ ma?ana a las 12 en la Fira del Llibre de Valencia. Un t¨ªtulo que se acompa?a del subt¨ªtulo ?Te atreves a seguir adelante? precisamente porque narra la historia de una ni?a de 12 a?os, Soledad, que se ve envuelta en una realidad extra?a y decide continuar. El libro est¨¢ contado en una suerte de mu?eca rusa que va abriendo posibilidades a medida que se avanza en la lectura. "Soledad trata de encontrar una forma de pasar de un nivel a otro, hace de lector", explica, "y sufre una mutaci¨®n guiada por la curiosidad".

Dentro de estos par¨¢metros, el autor plantea el paso de la inocencia a la experiencia: "La madurez exige un compromiso. En toda transformaci¨®n hay algo que dejamos atr¨¢s, que destruimos", comenta, "y el t¨¦rmino medio solo se encuentra cuando ya hemos pasado por ambos extremos", confirma.

"No hay nada m¨¢s realista que el misterio"

Este psiquiatra cuenta el desarrollo de la trama como el de su propia vida. Somoza pas¨® de Cuba a Espa?a con tan solo un a?o. M¨¢s tarde, asentado ya en nuestro pa¨ªs, decidi¨® abandonar su carrera de psiquiatr¨ªa por la de escritor. Abierto a todas las variables con las que nos vamos tropezando a lo largo de nuestra existencia, el autor de El cebo apuesta por la indagaci¨®n como motor de progreso: "Soledad procede de un colegio donde est¨¢n todas las normas, todo cuidado, pero llega un momento en que tiene que descubrir las suyas propias", indica, "llega un momento en que tienes que hacerte tus propias preguntas", resume.

Al elegir el g¨¦nero de fantas¨ªa o misterio, al tomar la intriga como algo intr¨ªnseco a su creaci¨®n literaria, este seguidor de Cort¨¢zar, Borges o Nabokov apuesta por asumir el desasosiego como algo fundamental y a mantener el enigma que "demuestra que la vida no es lo que te est¨¢n contando". "El miedo no es una sensaci¨®n negativa. En cierta ocasiones es hasta algo ¨²til. La inquietud del desasosiego es el germen del descontento. Cuando estamos descontentos intentamos avanzar", a?ade.

Para hilvanar la composici¨®n de cuentos que nutren al relato se aferra a la Alicia de Lewis Carroll: "Alicia en el pa¨ªs de las maravillas muestra esa intranquilidad por explorar lo oculto". "Este libro invita al lector a seguir pasando p¨¢ginas, pero al mismo tiempo le est¨¢ pidiendo ayuda", sostiene."Me he querido desmarcar del Decameron porque aqu¨ª la lectura no es l¨²dica, es m¨¢s parecida a la de Las mil y una noches: se hace por supervivencia". Por ¨²ltimo, Somoza considera que la elecci¨®n marcada del g¨¦nero no es caprichosa, sino esencial: "El misterio es un g¨¦nero obligado. No hay nada m¨¢s realista", concluye.