La ruta del despilfarro
Un autob¨²s recorre las "inversiones ruinosas" del Ayuntamiento y la Generalitat en Valencia La excursi¨®n se ameniza con una raci¨®n de "chorizos al infierno"
La idea surgi¨® hace mucho tiempo. Antes de que la actual crisis les estallara a los gobernantes en su propio cuarto y ninguno supiese reaccionar a tiempo. Antes, incluso, de que los eufemismos "reforma", "ajuste" o "esfuerzo" se instalaran en el vocabulario popular y suavizaran conceptos m¨¢s duros como "recorte" o "privatizaci¨®n". "Nos dimos cuenta de que la corrupci¨®n estaba en todos los sitios", apunta Teresa Galindo, una de las organizadoras de la Ruta del Despilfarro Valenciano, "y de que la ciudad es algo m¨¢s que sus edificios y su historia. Tambi¨¦n es el d¨ªa a d¨ªa que viven sus ciudadanos". Esta periodista, junto al profesor Miguel ?ngel Ferr¨ªs, ha coordinado una excursi¨®n alternativa por las inversiones de la ciudad que se han convertido en una "ruina" para el Ayuntamiento, el Consell y, por tanto, para sus habitantes.
El recorrido comienza en la ampliaci¨®n de Las Cortes, en la calle de Novellos. De esta c¨¢mara es de donde, seg¨²n explica Ferris con una camiseta en la que se puede leer?Rita, ?el Papa sabe lo tuyo?, procede "el origen de la deuda valenciana": "Corrupci¨®n y malas inversiones", una deuda p¨²blica "que embargar¨¢ a la Comunidad Valenciana durante 30 a?os" y "miles de ejemplos" de una "pol¨ªtica? de especulaci¨®n" que solo ha conseguido "aires de modernidad con carcasas vac¨ªas". A las 10 de la ma?ana de este s¨¢bado 30 pasajeros realizar¨¢n un recorrido, que durar¨¢ cerca de tres horas, por los puntos calientes de la transformaci¨®n urbana en la que el Gobierno ha destinado miles de millones y que, seg¨²n los promotores del trayecto, "no ha generado ni riqueza ni empleo, ya que la Generalitat est¨¢ por encima del resto del territorio nacional en tasa de desempleo".
Dos coches, uno de polic¨ªa local y otro de nacional han seguido al autob¨²s durante todo el recorrido
Primera parada, la torre dispuesta para la homil¨ªa del Papa en 2006: "1.000 ba?os port¨¢tiles, 450 asientos y siete millones y medio para una de las empresas ligadas a la trama G¨¹rtel", se?alan. El colegio 103, cuyas aulas son barracones expuestos en el patio delantero, las naves de Cross o El Cabanyal. Aqu¨ª, Mar¨ªa Villoro, una de las personas que integran la plataforma Salvem El Cabanyal, describe la situaci¨®n de dejadez en la que permanecen los inmuebles de este barrio de pescadores y narra la historia de la Lonja del Pescado, un edificio rectangular construido a principios del siglo pasado que est¨¢ incluido en los planes de derribo del Consistorio.
Para amenizar el viaje, nada mejor que un almuerzo a media ma?ana. La ocasi¨®n y los motivos de dicha ruta se prestan a una buena raci¨®n de "chorizos al infierno". Desde este extremo de la ciudad hasta la depuradora de Pinedo, gestionada hasta hace unos meses por la empresa p¨²blica Emarsa, el barrio de Nazaret, el nuevo hospital de La Fe o el "esqueleto" del Nuevo Mestalla. Un estadio levantado por el club de f¨²tbol Valencia "que deber¨ªa ser municipal porque est¨¢ en suelo p¨²blico", como se?ala Antonio Mar¨ªn Segovia, miembro del C¨ªrculo por la Defensa y Difusi¨®n del Patrimonio. Entre los participantes -desde personas an¨®nimas hasta cargos pol¨ªticos- destaca Fe, una mujer de 82 a?os que, acompa?ada de su hija,? exclama enfurecida en cada uno de estos "agujeros negros" de la econom¨ªa valenciana. "Estoy muy cabreada con este robo a mano armada de todos estos a?os", enfatiza.
Como remate, despu¨¦s de un circuito supervisado en todo momento por un coche de la polic¨ªa nacional y otro de la local, el autob¨²s para en la sede de Bankia. All¨ª, todos los asistentes entregan simb¨®licamente un cheque por valor de 10.000 millones de euros. Una cantidad proveniente, seg¨²n reza la nota, de los ministerios de educaci¨®n y sanidad "en concepto de socializaci¨®n de las p¨¦rdidas" para cubrir el "desmantelamiento" en estos servicios p¨²blicos. "Y nos hemos saltado muchos sitios", anota Ferris antes de despedirse, "como Soci¨®polis, el complejo 9 d'Octubre o los amarres vac¨ªos del puerto de la America's Cup", suspira.
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