¡°Estamos al l¨ªmite: cualquier nuevo recorte afectar¨¢ a la calidad docente¡±
El rector de la Universidad Jaume I ha tenido que renunciar a proyectos como la rehabilitaci¨®n del antiguo edificio de Hacienda y de la Audiencia al aplazarse el pago de 13,6 millones del Consell
Vicent Climent (Castell¨®n, 1954), rector de la Universidad Jaume I desde hace dos a?os, ha tenido que renunciar a proyectos previstos este curso como la rehabilitaci¨®n del antiguo edificio de Hacienda y de la Audiencia provincial al aplazarse el pago de 13,6 millones de la Generalitat. Ha ahorrado 1,2 millones en gastos de mantenimiento y ha reducido hasta 104 millones (un 8,5% menos) el presupuesto. Sin margen para m¨¢s ajustes, asegura que cualquier otro recorte ir¨ªa en detrimento de la docencia y la investigaci¨®n. Climent pide al Consell que cumpla con los pagos para no rechazar la Facultad de Ciencias de la Salud y critica las formas del ministro de Educaci¨®n por no escuchar a los rectores.
Pregunta. Despu¨¦s de los ajustes ?qu¨¦ le espera a la universidad con el decreto de racionalizaci¨®n del gasto p¨²blico educativo?
Respuesta. Se crea un escenario de gran incertidumbre. La subida de tasas es muy elevada y aunque es dif¨ªcil predecir el impacto exacto no es atrevido aventurar un descenso de la matr¨ªcula y un incremento de la morosidad. La sensaci¨®n que se tiene desde las universidades es que en el ministerio no existe una pol¨ªtica universitaria, s¨®lo existe la pol¨ªtica de los recortes o de los ajustes, se legisla desde un punto de vista econ¨®mico y se olvidan temas de fondo y aspectos colaterales.
P. ?Qu¨¦ implicar¨¢ la subida de tasas para la Jaume I?
R. El aumento se ha establecido sin saber cu¨¢les son las consecuencias. La Jaume I ha detectado este a?o un aumento de morosidad de los estudiantes de grado que se ha multiplicado en un 3,5. Y esto solo con el t¨ªmido aumento del pasado a?o del 7,5%. En los m¨¢steres la morosidad ha alcanzado el 15%. Si ahora se plantea un 33%, la morosidad puede tener una repercusi¨®n muy grande. Pero adem¨¢s hay temas de fondo que plantea la aplicaci¨®n del Real Decreto que ni siquiera se han podido discutir en el foro en donde deber¨ªan haberse tratado: el Consejo de Universidades. Por ejemplo, ?es justo socialmente que la continuidad en una titulaci¨®n dependa de la capacidad econ¨®mica? Un estudiante con recursos econ¨®micos puede permitirse primeras, segundas, terceras y cuartas o m¨¢s matr¨ªculas, cosa que no podr¨ªa hacer otro estudiante con menos capacidad econ¨®mica.
P. ?Hay alternativa?
R. Si la subida de tasas se ve desde el punto de vista financiero podemos decir que no parece existir mucho margen de maniobra, pero si lo miramos desde el punto de vista del estudiantado y el papel social de la universidad p¨²blica, las consecuencias son muy importantes. El problema es el impredecible impacto en el n¨²mero de matr¨ªculas efectivas y en la morosidad. El grueso de la financiaci¨®n proviene de la subvenci¨®n p¨²blica y si con una subvenci¨®n comparable acabamos atendiendo a un n¨²mero de alumnos significativamente inferior, el pa¨ªs pierde buena parte del retorno esperable de su inversi¨®n en conocimiento y capital humano.
P. La semana pasada fue noticia el plant¨®n de los rectores al ministro Jos¨¦ Ignacio Wert ?c¨®mo calificar¨ªa este hecho?
R. El plant¨®n manifest¨® un desencuentro entre lo que hizo el ministerio y lo que solicitaban los rectores. Para m¨ª fue un acto de protesta meditado despu¨¦s de haber agotado todas las v¨ªas posibles para podernos manifestar sobre el decreto. No se ha querido escuchar a los rectores y no es un problema de fondo, las formas hay que cuidarlas. En momentos como en los que estamos tiene que haber mucho di¨¢logo y nunca ser¨¢ suficiente.
P. ?Respalda la eliminaci¨®n de t¨ªtulos con escasa demanda?
R. Es algo que no se puede hacer de un mes para otro y nos hemos comprometido a hacer el pr¨®ximo curso un estudio sobre la oferta, la demanda y si existen duplicaciones porque entendemos que s¨ª que es necesario hacer una reflexi¨®n, pero hay que establecer criterios que no solo pueden ser economicistas sino tambi¨¦n de territorialidad. Por ejemplo, hay estudios como el Grado en Ingenier¨ªa Qu¨ªmica de la Jaume I que, siendo una titulaci¨®n emblem¨¢tica en Castell¨®n, se ha visto afectada por la crisis del sector cer¨¢mico y se ha reducido su demanda. A pesar de que el sector est¨¢ sufriendo una grave crisis el papel del t¨¦cnico cer¨¢mico est¨¢ llamado a seguir desempe?ando un papel fundamental en la innovaci¨®n del sector.
P. La Jaume I ha reducido a la mitad el d¨¦ficit con el que preve¨ªa cerrar el a?o. ?Es posible apretarse m¨¢s el cintur¨®n?
R. Desde que tom¨¦ posesi¨®n hace dos a?os empezamos a hacer ajustes reduciendo la partida de gastos corrientes en un 10% cada a?o. Hasta el momento se ha atacado especialmente el gasto corriente. Tambi¨¦n se ha sido muy riguroso en nuevas infraestructuras, reduciendo ¨¦stas a lo imprescindible: la Facultad de Ciencias de la Salud. En gasto corriente ya no nos queda m¨¢s recorrido. Estamos en una situaci¨®n l¨ªmite. Cualquier recorte adicional afectar¨¢ ya a la calidad de la docencia y de la investigaci¨®n, aspectos que hemos intentado conservar contra viento y marea.
P. Recientemente la Fundaci¨®n Caja Castell¨®n-Bancaja ha anunciado que no podr¨¢ seguir con su aportaci¨®n de 600.000 euros, m¨¢s de la mitad destinada a la investigaci¨®n. Con las nuevas medidas, ?en qu¨¦ situaci¨®n se quedan los investigadores?
R. El plan de investigaci¨®n de la Jaume I est¨¢ dotado con 4,3 millones de euros, de los cuales 395.000 euros, un 10%, proced¨ªan de la fundaci¨®n. Esto supondr¨¢ revisar algunos programas del plan y reasignar recursos. Mi voluntad es luchar por mantener la inversi¨®n en investigaci¨®n y preservarla de los recortes. A nivel general el momento para la estabilizaci¨®n del personal investigador no es bueno, pues la incertidumbre y las limitaciones del decreto estatal de diciembre de 2011 impiden la contrataci¨®n de personal. Estamos en una situaci¨®n l¨ªmite y si finalmente la Generalitat no puede cumplir los compromisos de pago, no s¨¦ si podremos seguir preservando la docencia, la investigaci¨®n y sobretodo la inversi¨®n fundamental para la facultad de Ciencias de la Salud.
P. ?En qu¨¦ punto se encuentra el proyecto?
R. La facultad de Ciencias de la Salud concentra toda la inversi¨®n en obra p¨²blica de la universidad. La primera fase del edificio debe iniciar su proceso de licitaci¨®n antes de agosto, pero para ello necesitamos que se nos asegure una cierta estabilidad en el presupuesto. La Generalitat ha retrasado dos a?os el pago de 13 millones con los que cont¨¢bamos para abordar la financiaci¨®n del edificio y necesitamos que cumpla lo que est¨¢ firmado para poder abordar la construcci¨®n. Hemos de despejar estas incertidumbres antes de mediados de julio para tomar una decisi¨®n que asegure liquidez durante la construcci¨®n.
P. Y en este escenario de recortes, ?qu¨¦ papel juega la VIU?
R. La VIU nace ya con una contestaci¨®n de muchos ¨¢mbitos pero tambi¨¦n de las universidades porque no entend¨ªamos para qu¨¦ se creaba, pero dijimos que si ten¨ªa sentido deb¨ªa ser colaborando con las cinco universidades p¨²blicas y se firm¨® un convenio con el compromiso de que estuvieran en el patronato. Eso no se ha cumplido. Tambi¨¦n entiendo que la situaci¨®n econ¨®mica ha cambiado mucho y no s¨¦ qu¨¦ papel juega ahora. Es un organismo que funciona con dinero p¨²blico pero como entidad privada. Creo que en los tiempos que corren la Generalitat debe dar respuesta ya a qu¨¦ debe hacer con la VIU.
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