Arousa cita al f¨²tbol del futuro

Puede que haya algo de casualidad en que Vilagarc¨ªa albergue dos de los eventos de referencia en las categor¨ªas base de f¨²tbol y baloncesto, pero seguramente tambi¨¦n anidan valores que tienen que ver con la ilusi¨®n, la capacidad organizativa y la audacia para derribar barreras que muchas veces s¨®lo existen en la mente o que son f¨¢cilmente traspasables con el trabajo bien hecho. Por eso la ciudad se para en Semana Santa con la Vilagarc¨ªa Basket Cup y vuelve a latir al final de la temporada balomp¨¦dica con la Arousa F¨²tbol 7, la AF7, acr¨®nimo bajo el que cada a?o se acoge a lo m¨¢s granado del f¨²tbol alev¨ªn, torneo que naci¨® en 1996 como una competici¨®n local en un campo de tierra y que ahora maneja un presupuesto de 160.000 euros para ejercer de escaparate de promesas. La n¨®mina de las que han pasado por Vilagarc¨ªa (Granero, Mario Su¨¢rez, Javi Garc¨ªa, Jonathan Pereira, Yoel, Bruno Gama, Iago Falqu¨¦, Asenjo, Jordi Alba, Iturraspe, Bojan, Fran M¨¦rida, Hugo Mallo, Roberto Lago, Tello, Thiago, Canales, Bartra o el argentino Erik Lamela) deja claro que cuando rueda la pelota es bueno mirar hacia A Lomba, donde se reedit¨® la reciente final del torneo de Brunete, el Atl¨¦tico de Madrid super¨® al Valencia en la cita definitiva y brillaron nuevas promesas como el gigante colchonero Salom¨®n Obama, el zaguero madridista Garay, hermano del futbolista argentino del Benfica, o el fino delantero valencianista Abel Ruiz, elegido mejor jugador del torneo.

¡°?Hemos crecido tanto!¡±, exclama Jorge Diz. Su padre, Manuel, es el responsable del comit¨¦ organizador y ¨¦l colabora como hombre orquesta desde hace unas temporadas. Hace cuatro, cuando el Arousa vio que no pod¨ªa destinar recursos econ¨®micos al torneo, decidieron solicitar el alta como asociaci¨®n deportiva y dar continuidad a su labor durante el resto del a?o con una escuela de f¨²tbol que ya congrega a cien chavales desde prebenjam¨ªn a alev¨ªn. Pero la AF7 acapara los desvelos. ¡°Lo ¨²nico que nos permitimos es una cena con las cuarenta personas que trabajamos en la organizaci¨®n para celebrar que todo haya salido bien. A partir de ah¨ª ya pensamos en la siguiente edici¨®n¡±, explica Jorge Diz.

El desaf¨ªo se renueva, tambi¨¦n la ilusi¨®n de los clubes por no perderse la cita. Para los grandes del f¨²tbol espa?ol es estaci¨®n obligada, tambi¨¦n para los del continente, como el Inter, campe¨®n las dos ediciones anteriores. Figurar en la n¨®mina de vencedores de la competici¨®n agrega prestigio a los mejores viveros del mundo: en 2004 River Plate se llev¨® el triunfo, su archirrival Boca Juniors, cuarto aquel a?o, repiti¨® viaje hasta que a la tercera alz¨® el trofeo. ¡°La clave estuvo en 1999 cuando invitamos al Real Madrid y acudi¨®. Crecimos con el boca a boca. Se corri¨® la voz de que era un torneo bien organizado y ahora tenemos peticiones de todas partes¡±, explican los organizadores.

En el Monta?eros ya despunta Nicol¨¢s Gonz¨¢lez, el hijo del deportivista Fran

?ste a?o el cuadro final lo compusieron tan s¨®lo 16 equipos. Doce llegaron por invitaci¨®n, entre ellos Celta y Deportivo, y cuatro m¨¢s salieron de una fase previa abierta a los primeros 80 clubes que solicitaron participar. S¨®lo uno de ellos, el Monta?eros, super¨® la fase de grupos para lograr la mejor clasificaci¨®n de la historia, sextos, para una escuadra proveniente de la previa. El modesto club coru?¨¦s deslumbr¨® con un empate ante el Porto y un hist¨®rico triunfo ante el Barcelona antes de caer en cuartos contra el Valencia y superar al Espanyol en la fase de consolaci¨®n. Todos los goles del conjunto herculino hasta ese tr¨¢mite final llevaron la misma firma: Nicol¨¢s Gonz¨¢lez Iglesias, un chico todav¨ªa en edad benjam¨ªn (naci¨® en enero de 2002), dos a?os menor que el resto de compa?eros y rivales, pero que lleva el f¨²tbol en las venas porque es hijo de Fran y sobrino de Jos¨¦ Ram¨®n, mitos del deportivismo.

El Valencia con su delantero Abel Ruiz se llevaron la edici¨®n de este a?o

Arousa es el mayor reto de la temporada para las canteras gallegas. ¡°La fase final es un caramelo¡±, admite Jorge Diz. Significa probarse al m¨¢s alto nivel, bajo los focos, en un escenario atestado de p¨²blico. Y mostrar que no est¨¢n tan lejos de los mejores porque m¨¢s all¨¢ de la haza?a del Monta?eros, el Victoria super¨® al Par¨ªs Saint Germain, un cl¨¢sico en el cuidado de la base que ya tiene inscrito su nombre en el palmar¨¦s de la AF7, y la Escola de F¨²tbol Lal¨ªn bati¨® a una selecci¨®n de R¨ªo de Janeiro. Esa vocaci¨®n por contrastar niveles es la que empuja a la Arousa F¨²tbol 7 a alimentar su gigantismo. ¡°Hay gente que se piensa que esto es un negocio, pero del presupuesto total s¨®lo el 10% entra v¨ªa ayudas o subvenciones, el resto es patrocinio. Y hay que buscarlo porque los brasile?os o en a?os anteriores los equipos japoneses que vinieron se pagan el viaje, pero traer a equipos como el Inter o el PSG cuesta casi seis mil euros s¨®lo de desplazamiento, y adem¨¢s hay que abonar hoteles y estancias¡±, apuntan. ¡°Mis vacaciones anuales se las entrego al torneo. Hay un punto de masoquismo¡±, reflexiona Jorge Diz. Pero desde hoy ya piensa en la pr¨®xima edici¨®n. Y ser¨¢ la d¨¦cimo s¨¦ptima.