Por si acaso hay justicia
"Eso que llaman el procedimiento acostumbra a ser m¨¢s inseguro que el recorrido selv¨¢tico de Marlow buscando a Kurtz en 'El coraz¨®n de las tinieblas"
En agosto de 1997 muri¨® Diana de Gales, que en paz descanse, pero lo verdaderamente trascendental fue que una profesora de matem¨¢ticas llamada Pilar, hoy felizmente jubilada, inici¨® un proceso en Valencia que lleg¨® hasta el Tribunal de Estrasburgo, que se dice pronto. Ocurr¨ªa ¡ªy ocurre¡ª que en la ciudad m¨¢s ruidosa del mundo la autoridad competente, es un decir, consent¨ªa el abuso del decibelio hasta extremos que ser¨ªa largo enumerar. La cosa no fue de ahora para enseguida, pero antes de que 2004 echase el cierre hubo sentencia condenatoria para el Reino de Espa?a con indemnizaci¨®n para la demandante. Fue una patada al Ayuntamiento de Barber¨¢ en el culo de Zapatero, habida cuenta de que la factura se carg¨® a la cuenta general. Desde aquel dictamen, con su jurisprudencia asociada, han palmado con multas e inhabilitaci¨®n no pocos alcaldes e infractores descuidados. No todos. Ciudades como esta acusan un estado de excepci¨®n casi permanente, cuando no por Fallas por san Sirulo, gracias asimismo a los insondables misterios de la judicatura. Eso que llaman el procedimiento acostumbra a ser m¨¢s inseguro que el recorrido selv¨¢tico de Marlow buscando a Kurtz en El coraz¨®n de las tinieblas. Solo el inmovilismo garantiza la impunidad. Se trata de que no haya paz para los malditos, ni disfruten del bot¨ªn cuantos han participado del estropicio.
Al ritmo que Merkelandia y sus trolls imprimen a la demolici¨®n, muy pronto la gran fosa del Pac¨ªfico ser¨¢ un hoyo de canicas comparado con nuestra fosa mariana y sus depauperadas periferias. Descartadas Uganda y Grecia, ?a qui¨¦n echarle la culpa? La actualidad, en fin, algo entretiene. Entre la Eurocopa y lo que dure el combinado regional preferente de Vicente del Bosque; alg¨²n episodio impagable del estilo de Rafael Blasco bien provisto de calderilla para la ruta de las cabinas telef¨®nicas; el engrudo electoral en Grecia, donde all¨¢ como aqu¨ª PP y PSOE bailan el tango y el PASOK pone la mantequilla¡ Parece, solo parece, que se demora el asalto final. Que nadie se enga?e. El flato a base de banderas, con o sin toro ¡ª?en el Senado lo saben?¡ª y esa recurrente provocaci¨®n de la f¨®rmula 1 que nos iba a salir gratis, se evaporar¨¢ en un visto y no visto. ?Alg¨²n otro farol? Porque en este lado del frente hay vida. Media jornada bast¨® para superar en aportaciones testimoniales la cifra calculada para encausar a Rodrigo Rato. Adem¨¢s del alud de donantes, no faltan empleados y gente documentada que facilitar¨¢ la tarea a jueces y fiscales. Y detr¨¢s de Rato, los dem¨¢s. Denuncien, que la lista es larga y la ciudadan¨ªa, se?alan las encuestas, quiere ajustar cuentas. No precisamente las mismas que otros pretenden enterrar con sus procedimientos habituales. ?Usted ya ha dado? ?Tiene acceso a papeles comprometedores? ?A qu¨¦ espera? En Islandia no se arredraron. Y aqu¨ª ya toca, por si acaso hay justicia o hubiese que peregrinar a Estrasburgo.
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