La fiscal¨ªa pide otros nueve a?os de inhabilitaci¨®n para el exalcalde de Pego

Carlos Pascual, alcalde de Pego entre 1995 y 2003, primero con Uni¨®n Valenciana y luego con un partido independiente, ha terminado su imponente recorrido judicial antes de acabar de cumplir condena en la c¨¢rcel de Villena. Ayer acudi¨® al ¨²ltimo juicio de las casi 100 causas judiciales que lleg¨® a acumular durante su mandato, esta vez para enfrentarse a una petici¨®n de la fiscal¨ªa y la acusaci¨®n particular de nueve a?os de inhabilitaci¨®n por un delito de prevaricaci¨®n. Su defensa pidi¨® la absoluci¨®n y, en todo caso, que se le aplique al fallo el atenuante por dilaci¨®n indebida, ya que los hechos por los que fue juzgado se remontan a febrero del a?o 2001.

Hace 11 a?os, Pascual acudi¨® a llevar a su hija al colegio d¨ªas despu¨¦s de haber despe?ado por las escaleras del Ayuntamiento con un empuj¨®n al sargento de la polic¨ªa local, Gonzalo Vicens, hechos por los que fue condenado a cuatro a?os y medio de c¨¢rcel e inhabilitaci¨®n para cargo p¨²blico. Ese d¨ªa, ya en un ambiente de tensi¨®n generalizada en la poblaci¨®n, Rafael Moll, el Polic¨ªa Local que ordenaba el tr¨¢fico en un paso de cebra pr¨®ximo al centro educativo, a su vez delegado de personal de CC OO, le neg¨® el saludo reglamentario, por lo que, seg¨²n su versi¨®n, fue insultado all¨ª mismo por el entonces regidor y expedientado el mismo d¨ªa con una suspensi¨®n de funciones y sueldo, que luego se tradujo en otro expediente multitudinario de suspensi¨®n de empleo y sueldo a 18 polic¨ªas, incluido Moll, y al sepulturero municipal tras una concentraci¨®n de protesta contra Pascual.

El polic¨ªa sancionado fue restituido en su plaza por una sentencia judicial, que oblig¨® al Consistorio a abonarle las retribuciones no percibidas durante la sanci¨®n, pero decidi¨® acudir tambi¨¦n a la v¨ªa penal.

El exalcalde acudi¨® al juicio cuando ha cumplido cinco de los seis a?os de c¨¢rcel de una condena por causar graves da?os en 600 hect¨¢reas del marjal de Pego-Oliva, hoy parque natural, entre 1996 y 1998. Aunque ha sumado otros cuatro a?os y medio de prisi¨®n e inhabilitaci¨®n por agredir al jefe de la polic¨ªa local y siete a?os m¨¢s de inhabilitaci¨®n por suspender de empleo al enterrador municipal, Pascual est¨¢ a punto de obtener el tercer grado penitenciario, lo que implica su pr¨¢ctica libertad. De hecho, disfruta de permisos restringidos desde hace cuatro a?os, pese a ser el primer alcalde de Espa?a encarcelado por un delito medioambiental, y ayer acudi¨® al juzgado con un llamado permiso de gobierno sin escolta policial.

Su actual abogado, que lleg¨® a gestionar hasta 75 causas judiciales de Pascual, asegur¨® que su patrocinado ya no ten¨ªa m¨¢s juicios pendientes. En el de ayer, el exregidor dijo: ¡°Yo no hice nada ni pens¨¦ nada¡±. ¡°Cuando est¨¢s de alcalde, no quieres follones¡±, asegur¨® ante el juez. El exalcalde traslad¨® la responsabilidad de todo lo ocurrido a los funcionarios y t¨¦cnicos municipales.