Una pasarela ef¨ªmera

Rehabilitaci¨®n, sustituci¨®n o demolici¨®n son las tres alternativas que se barajan para la pasarela peatonal que atraviesa la gola de El Perell¨® y que une los t¨¦rminos de Sueca y Valencia. Once a?os y pocos meses han sido la vida ¨²til de la infraestructura. Presupuestada en 770.313 euros (128 millones de las antiguas pesetas), su instalaci¨®n se ultim¨® a finales de 2000. Coincidiendo con el inicio del verano acaba de ser cerrada al p¨²blico a instancias de los t¨¦cnicos de la Demarcaci¨®n de Costas de Valencia, aunque se sigue utilizando a pesar de las vallas y el precinto de la Polic¨ªa Local de Sueca.

El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino encarg¨® un informe de diagn¨®stico en 2010. El trabajo, realizado en marzo y abril, ratific¨® un estado de corrosi¨®n avanzado en puntos concretos que afectaba a su vida ¨²til y seguridad. La naturaleza sigui¨® su curso sin que se llevara a cabo ninguna reforma de consideraci¨®n.

A pesar de que los trabajos de diagn¨®stico del puente se realizaron hace dos a?os, los primeros problemas surgieron poco despu¨¦s de su inauguraci¨®n, el 20 de febrero de 2001, a la que asistieron el secretario de Estado de Aguas y Costas, Pascual Fern¨¢ndez; el consejero de Obras P¨²blicas, Jos¨¦ Ram¨®n Garc¨ªa Ant¨®n y el alcalde de Sueca, Alfredo Guillem. La infraestructura est¨¢ ubicada, pr¨¢cticamente en su totalidad, en terrenos de dominio p¨²blico mar¨ªtimo-terrestre y es propiedad del ministerio. En aquel momento fue entregada al Ayuntamiento de Sueca para su explotaci¨®n y conservaci¨®n.

Nadie asume ahora la responsabilidad de su sostenimiento. Desde el gobierno local de Sueca argumentan que depende de la entidad local menor de El Perell¨® por el hecho de que tienen cedida la competencia del cuidado de los viales. Adem¨¢s, esgrimen que la junta vecinal puso recientemente el nombre del Ayuntamiento de la poblaci¨®n tur¨ªstica en la base de hormig¨®n de donde arranca el m¨¢stil que sostiene el puente atirantado. Desde la entidad recuerdan que el municipio no les puede ceder una propiedad que no es suya y que, adem¨¢s, ¨¦sta se encuentra en terrenos de dominio p¨²blico mar¨ªtimo-terrestre por lo que no es un vial m¨¢s.

La alternativa propuesta para vecinos y visitantes de ambas partes del pant¨¤ es dar un peque?o rodeo por el puente de la carretera Nazaret-Oliva, que dispone de una amplia acera para viandantes. Su acceso, no obstante, no est¨¢ adaptado a discapacitados f¨ªsicos. El paso de las compuertas de la Junta de Desag¨¹e de la Albufera no puede utilizarse porque se automatizaron y representan un peligro para personas ajenas a la instalaci¨®n, fundamentalmente ni?os.