Roca, tan ¨ªntimo como p¨²blico

Paco Roca (Valencia, 1969) es un personaje famoso en el que lo p¨²blico y lo privado parecen llevarse muy bien. De hecho, es sabido que trabaja en pijama, como queda patente en sus Memorias de un hombre en pijama. Por si quedaba alguna duda, la presentaci¨®n de su exposici¨®n antol¨®gica en el Museo de la Ilustraci¨®n y al Modernidad (Muvim) la hizo ataviado con esta prenda de andar por casa. E incluso consigui¨® que al final de la rueda de prensa se la enfundaran tambi¨¦n Mar¨ªa Jes¨²s Puchalt, diputada provincial de Cultura, que destac¨® ¡°la sencillez y ausencia de vanidad del artista¡± y Joan Gregori, director del museo que abre con esta muestra ¡°un ciclo nuevo basado en la ilustraci¨®n gr¨¢fica¡±. MacDiego, dise?ador y comisario, ya se hab¨ªa travestido antes, tras resistirse por un instante a hacerlo.

¡°Cuando me manda un whatsApp desde California, me emociona¡±, confiesa el dise?ador, que es tambi¨¦n su amigo. Ambos han colaborado, por ejemplo, en la adaptaci¨®n escult¨®rica de la silueta de Picasso para comunicar la colecci¨®n de Bancaja sobre el legendario pintor malague?o, f¨¢cil de ver integrada en el paisaje urbano de alguna de nuestras ciudades. ¡°Cualquier cosa que hace Paco se traduce a varios idiomas¡±, subraya MacDiego, para justificar una expresi¨®n razonable: ¡°Es el personaje de moda¡±.

Ciertamente, es el creador que pas¨® por la izquierda a Almod¨®var en el goya al mejor gui¨®n adaptado y se llev¨® adem¨¢s la estatuilla de mejor largometraje de animaci¨®n, entre otros premios de aqu¨ª y all¨¢. Arrugas ya est¨¢ traducido a siete idiomas, como puede comprobarse en la muestra reci¨¦n inaugurada, y ¡°est¨¢ a punto de editarse en Corea¡±, agrega el autor. ?Qu¨¦ pasa con la fama?, le preguntan. ¡°El ¨¦xito te ayuda a vender si trabajas¡±, dice, pero al mismo tiempo ¡°no te permite trabajar¡±, con lo cual se convierte ¡°en un c¨ªrculo del que es dif¨ªcil de salir¡±.

A pesar de ese lastre, prepara una exposici¨®n sobre los Borja, una nueva novela gr¨¢fica sobre un grupo de exiliados de la Guerra Civil y la adaptaci¨®n cinematogr¨¢fica de Memorias de un hombre... Sobre todo lo que precede a estos proyectos va la exposici¨®n El dibujante ambulante, que recibe al visitante con un ninot de Roca en pijama a la puerta y sigue con a un muestrario de toda su obra.

Se exhiben m¨¢s de 200 piezas entre las que hay bocetos, publicaciones, retratos, ilustraciones, c¨®mics, trabajos en prensa y, por primera vez, los cuadernos de viajes que siempre le ha dado ¡°pudor¡± sacar y que constituyen ¡°la ¨²nica parte hecha por el placer de dibujar¡±. De hecho, dijo, ¡°no hay nada m¨¢s ¨ªntimo que esto¡±. La muestra, entretenida y exhaustiva, al igual que el cat¨¢logo, est¨¢ a la altura de un autor que ha devuelto a algunos profesionales ¡°la confianza en este medio de expresi¨®n¡±, en palabras del consagrado Sento Llobell.

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