De Caixanova a los juzgados
Los exdirectivos de la caja imputados preparan su defensa El banco les reclamar¨¢ el pr¨®ximo viernes las indemnizaciones multimillonarias
Jos¨¦ Luis Pego, que pasar¨¢ a la historia por ser el primer y ¨²nico director de Novacaixagalicia en sus diez meses de vida, se despidi¨® de sus compa?eros el 14 de septiembre de 2011 con una carta que ten¨ªa el mismo tono paternalista con el que su mentor, Julio Fern¨¢ndez Gayoso, hab¨ªa gobernado los destinos de Caixanova durante tres d¨¦cadas. Tras una breve exposici¨®n de c¨®mo lleg¨® al puesto, abandonando la ¡°agradable zona de confort de la Universidad de Santiago¡± de donde proced¨ªa, valoraba que el viaje profesional hab¨ªa valido la pena: ¡°La Caja, vosotros, las personas que en ella habit¨¢is, me hab¨¦is dado mucho. M¨¢s de lo que nunca hubiera llegado a poder imaginar. M¨¢s de lo que jam¨¢s podr¨¦ llegar a devolver¡±. Cuando se public¨® su indemnizaci¨®n multimillonaria, de 7,7 millones de euros, resultado de multiplicar su salario fijo (627.000 euros) por los a?os que le quedaban para jubilarse en el momento de su baja (ten¨ªa 54), junto a un plan de pensiones de m¨¢s de diez millones, esas palabras de despedida cobraron un significado que ni en sus peores sue?os hubiera deseado.
¡°Hoy emprendo el tr¨¢nsito hacia otros destinos desconocidos para m¨ª. Lo hago por causas que me son ajenas S¨¦ que este proyecto vale los sacrificios que conlleva. S¨¦ tambi¨¦n que quedan en buenas manos. Mi m¨¢ximo af¨¢n fue siempre el cuidar de vosotros. Tengo el convencimiento de que los nuevos responsables del Banco tambi¨¦n van a cuidar de tod@s¡±, dec¨ªa Pego. La realidad se impuso a sus entra?ables deseos. Con prejubilaciones cuantiosas, aunque infinitamente menores a las de Pego, con la fusi¨®n se marcharon 1.200 trabajadores. Este a?o habr¨¢ otros 1.000 despidos ¡ªcomo m¨ªnimo. Para oto?o, cuando se determinen las multimillonarias necesidades de capital de NCG, que superan los 4.000 millones, se preparan nuevos recortes de personal y oficinas.
Jos¨¦ Luis Pego ha disfrutado del verano en su chal¨¦ situado en Nigr¨¢n
Sus compa?eros lo respetaban ¡ªy lo respetan¡ª pese la corriente de indignaci¨®n que caus¨® el esc¨¢ndalo de las indemnizaciones. Era uno de los ejecutivos m¨¢s capacitados de la antigua Caixanova, donde accedi¨® a la direcci¨®n general en 2006. Culto, afable, ¡°la ¨²nica tacha a su curr¨ªculo haber sido demasiado servil con el presidente¡±, comenta un exempleado. ¡°Eso y que el puesto se le qued¨® grande¡±, a?ade un empresario. El Banco de Espa?a, que lo hab¨ªa considerado un gestor adecuado ¡ªla Xunta tambi¨¦n estaba de acuerdo¡ª cambi¨® de opini¨®n los meses posteriores a la integraci¨®n. ¡°Personalmente ha sufrido bastante, lo ha pasado muy mal y lo sigue pasando mal¡±, asegura un consejero de la actual caja. Aunque su primera decisi¨®n fue alejarse de los focos y volar a Miami, este verano ha permanecido en su casa de Nigr¨¢n, la misma que visitaron sin ¨¦xito en julio un grupo de afectados por las preferentes para protestar por el ¡°corralito¡±. ¡°Se le ve deprimido, sin duda es el que peor lo est¨¢ llevando¡±, asegura otra fuente. Al contrario que sus compa?eros del sector bancario, carece del barniz de soberbia que cubre a los altos ejecutivos. ¡°Es un hombre cuyo gran error fue ser el recadero de Gayoso¡±, atacan desde las posiciones m¨¢s cr¨ªticas, ¡°durante las negociaciones de la fusi¨®n sal¨ªa frecuentemente de las reuniones para llamar al presidente. Sin su aprobaci¨®n no mov¨ªa un dedo, y as¨ª nos fue¡±. Cuando el equipo de Jos¨¦ Mar¨ªa Castellano se hizo con el banco y reclam¨® a los exdirectivos las indemnizaciones, la posici¨®n de Pego fue, en principio, favorable a negociar, ¡°incluso intent¨® convencer a Goyo [Gregorio Gorriar¨¢n] y a ?scar [Rodr¨ªguez Estrada], para que cediesen¡± comenta una fuente interna. Para ahorrarse el linchamiento medi¨¢tico solo ten¨ªa que haber devuelto el dinero. Por muy legal que fuese su retribuci¨®n, sal¨ªa de una caja que hab¨ªa recibido 1.200 millones y que estaba a punto de ser nacionalizada. ¡°No llevaba ni cinco a?os como director general y tuvo la indecencia de llevarse el equivalente a su sueldo multimillonario para el resto de su vida¡±, expone un sindicalista indignado. El resto de la historia es conocido: las negociaciones se frustraron y NCG interpuso una demanda laboral contra los tres exdirectivos para recuperar el dinero. Las primeras citas en el Servicio de Mediaci¨®n est¨¢n fijadas para el pr¨®ximo viernes. Si no hay acuerdo, como parece, el caso se alargar¨¢.
Sus excompa?eros de equipo se han ocultado menos. M¨¢s delgado, con el pelo casi rapado al cero, a Gregorio Gorriar¨¢n, director de la secci¨®n inmobiliaria (cobr¨® 4,8 millones y le quedan 9,2 en su plan de pensiones cuando cumpla 65), se le puede ver habitualmente de terrazas por la Alameda viguesa, donde vive. Despu¨¦s de su salida de la caja asegur¨® en c¨ªrculos cercanos que iba a ser fichado por Castellano como asesor para temas relacionados con el ladrillo. Quiz¨¢ por eso no recogi¨® su despacho y dej¨® algunas semanas aparcado su Maserati en el garaje de la entidad.
Este verano se traslad¨® a Madrid para preparar su defensa en los dos frentes que tiene abiertos: la citada demanda laboral de Novagalicia y la denuncia de la fiscal¨ªa en la Audiencia Nacional. Lo hace con un prestigioso despacho con el que trabaj¨® antes de entrar en Caixanova.
?scar Rodr¨ªguez Estrada, mano derecha de Gayoso durante a?os en la extinguida Caixanova, apenas ha cambiado sus costumbres. El fiscal les reclama, a ellos tres y al exdirectivo de Caixa Galicia, Javier Garc¨ªa de Paredes, 7,7 millones de euros. Supuestamente, y poco antes de abandonar el barco, habr¨ªan modificado sus contratos para consolidar en su finiquito la parte variable de su salario a espaldas de los ¨®rganos de control. ¡°No s¨®lo vaciaron el caj¨®n, quisieron llevarse hasta la ¨²ltima moneda¡±, brama un delegado de UGT. El de Garc¨ªa de Paredes es un caso aparte. Su liquidaci¨®n se realiz¨® desde el banco ya nacionalizado con los nuevos gestores al mando. Incomprensiblemente le permitieron cobrar la indemnizaci¨®n de golpe y no mes a mes, como figuraba en su contrato. Aunque prometi¨® devolver la mayor parte, el proceso judicial posterior bloque¨® el reintegro. Tambi¨¦n congel¨® los planes de pensiones. Rodr¨ªguez Estrada, con 65 a?os cumplidos, es el ¨²nico que lo ha sufrido en el bolsillo: no puede retirar los 8,1 millones de su fondo.
Julio Fern¨¢ndez Gayoso ya no organiza cenas multitudinarias
Julio Fern¨¢ndez Gayoso, jubilado en 2006, s¨ª percibe los 689.000 euros anuales de su pensi¨®n. El pr¨®ximo 8 de diciembre cumplir¨¢ 81 a?os rodeado de hijos y nietos en su casa del barrio residencial de Canido. Acostumbrado al coche oficial, que utilizaba hasta para recorrer la distancia que separa el centro social de la caja de la sede (tres minutos andando), no se le ha vuelto a ver en ning¨²n acto social. Su mujer, Ana Mediero, tampoco ha tenido que aplicarse en la cocina este verano porque en su chal¨¦ junto al mar no se ha celebrado ninguna cena multitudinaria.
Nada que celebrar tiene Gayoso, que sin embargo, contin¨²a eludiendo toda la responsabilidad en el fracaso de la fusi¨®n, algo que tambi¨¦n le ocurre lo que a Jos¨¦ Luis M¨¦ndez (exdirector de Caixa Galicia). Imputado por ser, supuestamente, ¡°colaborador necesario¡±, para hacer la vista gorda sobre las modificaciones de contratos de los exdirectivos, se ha defendido argumentando que ¨¦l no tuvo funciones ejecutivas, que carec¨ªa de poderes porque su cargo era ¡°institucional y representativo¡±. No tomaba, dijo en su declaraci¨®n ante una comisi¨®n en el Congreso, ¡°ni una sola decisi¨®n personal porque no pod¨ªa¡±. Una l¨ªnea argumental que, seg¨²n personas de su entorno, mantendr¨¢n sus abogados en los tribunales.
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