El aniversario agridulce de Castedo
Justo cuatro a?os despu¨¦s de la dimisi¨®n de Alperi el TSJ asumi¨® la pieza de Brugal del PGOU Cuando asumi¨® la vara de mando, la regidora cre¨ªa inminentes obras que hoy est¨¢n relegadas
¡°Se?or, usted puede contar conmigo, no una vez ni dos, sino contar conmigo¡±. La cita del poema de Mario Benedetti sirvi¨® para que Sonia Castedo (Ribadeo, 1970) cerrara entre l¨¢grimas su primer discurso como alcaldesa. La referencia iba dirigida a su mentor, Luis D¨ªaz Alperi, que unos d¨ªas antes, el 11 de septiembre de 2008, hab¨ªa dimitido tras casi 14 a?os para ceder el paso a su delf¨ªn y edil de Urbanismo. El cuarto aniversario de este traspaso coincidi¨® hace unos d¨ªas con la decisi¨®n del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana de asumir la investigaci¨®n de la pieza del caso Brugal que tiene a Castedo y a Alperi a un paso de la imputaci¨®n por el supuesto ama?o del Plan General en favor del promotor Enrique Ortiz.
El caso Brugal empez¨® a cambiar el horizonte pol¨ªtico de Castedo hace casi dos a?os. La regidora ya ha anunciado que dimitir¨¢ de diputada para poder defenderse desde su puesto en la alcald¨ªa. La crisis, adem¨¢s, ha desempe?ado su papel de freno en una ciudad donde muchos proyectos est¨¢n desde hace m¨¢s de una d¨¦cada sobre el papel.
Cuando Castedo fue elegida por Alperi para sucederle, el horizonte parec¨ªa despejado: ten¨ªa dos a?os y medio antes de las siguientes elecciones municipales para hacerse su hueco. Y el viento soplaba a su favor, ya que el plan E salpicaba esta ciudad que carece de algunas infraestructuras importantes, con 57 millones de euros en obras y mejoras de todo tipo. Adem¨¢s, algunas actuaciones de calado, como la remodelaci¨®n de la entrada por el norte, que pag¨® el Consell, estaban muy avanzadas. Y la dimensi¨®n de la crisis a¨²n era desconocida.
La regidora declaraba entonces que su herencia ¡°era magn¨ªfica¡±, con el PGOU ¡°encauzado¡± y la pr¨®xima ¡°primera piedra¡± del Centro de Congresos. Cuatro a?os despu¨¦s, el PGOU est¨¢ pendiente de una tercera exposici¨®n p¨²blica. Y el Centro de Congresos, proyectado en 1998 y cuya ¨²ltima versi¨®n se comprometi¨® a pagar el Consell en el degradado barrio de La Sangueta, no tiene primera piedra ni est¨¢ previsto que la tenga, tras reiterados anuncios incumplidos. Pese a todo, Castedo ampli¨® la mayor¨ªa absoluta heredada en 2011, unos comicios que encontr¨® a la oposici¨®n socialista en horas bajas.
Castedo sabe que el urbanismo es una buena tarjeta de presentaci¨®n. Se dio prisa, por ejemplo, en aprobar la peatonalizaci¨®n de la plaza del Ayuntamiento. La obra es un buen ejemplo de su forma inicial de gobernar. Peatonaliz¨®, gracias al Plan E, la plaza consistorial y la cerr¨® al tr¨¢fico. Pero las quejas de comerciantes y vecinos le obligaron a devolver el tr¨¢fico a la zona. No es la ¨²nica vez ha rectificado. Fren¨® su anuncio de reabrir parte de la Explanada al tr¨¢fico ante la presi¨®n ciudadana. Y anul¨® la decisi¨®n de eliminar una paga extra a los 2.200 funcionarios del Ayuntamiento por la fuerte contestaci¨®n que recibi¨® del colectivo, por citar algunos ejemplos.
La regidora ha rectificado varias decisiones por las cr¨ªticas ciudadanas
Otros proyectos urban¨ªsticos han quedado guardados en un caj¨®n por la crisis. El Consell ha renunciado a levantar, de momento, la Ciudad de la Justicia, proyectada desde hace m¨¢s de una d¨¦cada. Y la llegada del AVE a Alicante, prevista para finales de este a?o, se ha retrasado a 2013.
Pero no todo eran grandes obras. La regidora puso entre sus prioridades embellecer Alicante. Y dos meses despu¨¦s de ser elegida lanz¨® una campa?a para diseminar 40.000 plantas y flores en distintos puntos, decisi¨®n que ha servido en muchas ocasiones de munici¨®n para la cr¨ªtica de la oposici¨®n y de algunos colectivos, que consideran la medida un simple gasto superfluo. Alicante sigue viviendo una fuerte bipolaridad entre la zona m¨¢s pr¨®xima a la playa y los barrios tradicionales, muchos de los cuales, sobre todo los de la conocida como Zona Norte, arrastran carencias que no terminan de solucionarse.
Por otro lado, Castedo ha querido en diversas ocasiones marcar su impronta y, en cierta forma, corregir al profesor. En mayo de 2009 retir¨® los t¨ªtulos honor¨ªficos a Franco, decisi¨®n a la que a?o y medio antes se hab¨ªa opuesto el grupo que lideraba Alperi. Y aunque no sin tensiones, la Comisi¨®n para la Memoria Hist¨®rica de Alicante va logrando peque?os avances en su voluntad de levantar distintos monumentos en puntos destacados de la que fuera ¨²ltima resistencia republicana al final de la Guerra Civil.
Pocos le discuten sus ganas de trabajar, que comparan a menudo con la par¨¢lisis que viv¨ªa Alicante con Alperi. Pero tambi¨¦n se le acusa de no tener un modelo de ciudad. Y se critica su prepotencia. A Castedo le gusta el cuerpo a cuerpo con los alicantinos, aunque ¨²ltimamente mide m¨¢s los actos a los que acude. Adem¨¢s, no tiene pelos en la lengua y en los ¨²ltimos tiempos ha lanzado cr¨ªticas a su partido. El pasado marzo, asegur¨® haberse sentido ¡°muy sola¡± en la investigaci¨®n del caso Brugal. Y este mes, tras conocerse que la puesta en marcha de la l¨ªnea 2 del tranv¨ªa de Alicante sufrir¨¢ otro retraso, conmin¨® a la Consejer¨ªa de Infraestructuras a ¡°no dar m¨¢s fechas si no va a cumplirlas¡±.
¡°Mucho por hacer¡± en Alicante
Los comentarios sobre la gesti¨®n de Castedo difieren diametralmente seg¨²n a quien se le pregunte. Pero hay un denominador com¨²n: ¡°En nuestra ciudad hay muchas cosas por hacer¡±, en palabras del presidente de la asociaci¨®n de comerciantes Coraz¨®n de Alicante, Vicente Armengol.
A Castedo se le reconocen esfuerzos: ¡°La diferencia con Alperi en capacidad de trabajo y voluntad de mejorar la ciudad es como de la noche al d¨ªa¡±, explica el vicepresidente de la Asociaci¨®n de Vecinos La Florida. ¡°Est¨¢ procurando que todo no sea cemento¡±, agrega Armengol. ¡°Apuesta por la hosteler¨ªa aunque no es momento de grandes cambios porque no hay dinero¡±, aporta Mar¨ªa Jos¨¦ San Rom¨¢n, presidenta de los hosteleros.
Entre las cr¨ªticas, la principal es que los cambios son insuficientes. ¡°Necesito que la Concejal¨ªa de Comercio tenga m¨¢s peso porque es un colectivo grande y debemos tener m¨¢s presencia¡±, reclama Armengol. Por su parte, Vicente Alcaraz, de la Plataforma Comarcal por la Movilidad Sostenible de L¡¯Alacant¨ª, valora que se haya introducido la bicicleta con la creaci¨®n de una red urbana, cuya segunda fase, recuerda, no se ha hecho y tendr¨ªa que haberse terminado el a?o pasado. Y lamenta la ausencia de una pol¨ªtica de transporte p¨²blico. ¡°Es una ciudad catastr¨®fica, gobernada para los coches¡±.
¡°La ciudad est¨¢ paralizada¡±, agrega Manolo Alcaraz, presidente de la Plataforma de Iniciativas Ciudadanas (PIC). Alcaraz cree que Castedo cre¨® unas expectativas ¡°que han quedado en papel mojado¡± y asegura que no tiene un modelo econ¨®mico ni de ciudad. Como ¨²nico punto positivo, valora los avances sobre la Memoria Hist¨®rica.
Hern¨¢ndez, por su parte, critica ¡°la falta de la participaci¨®n¡± vecinal en las ¨²ltimas decisiones. Y apostilla: ¡°Si no fuera por los pleitos judiciales que le est¨¢n quitando tiempo, con el mismo tiempo que estuvo Alperi a Alicante no la reconocer¨ªa ni la madre que la pari¨®¡±.
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