Tres detenidos y atascos kilom¨¦tricos por la huelga de transportes
El paro ferroviario coincide con dos parciales de ma?ana y tarde en Metro por la paga extra Los arrestados en Atocha por resistencia y desobediencia a la autoridad, en libertad con cargos Los sindicatos anuncian abusos y acoso policial
El sector ferroviario afronta hoy su segunda huelga de 24 horas en toda Espa?a convocada por los sindicatos en protesta por la liberalizaci¨®n del transporte de viajeros aprobada por el Gobierno, paro que obliga a cancelar 302 trenes de alta velocidad y larga y media distancia. En Madrid, esta huelga coincide con paros parciales de ma?ana y tarde convocados en el metro. Tanto fuentes de Renfe y de Metro de Madrid como de los sindicatos destacan que la jornada est¨¢ transcurriendo con normalidad y que se est¨¢n respetando los servicios m¨ªnimos. Como consecuencia de la protesta, Madrid ha vivido una hora punta complicada y m¨¢s larga y densa de lo habitual, con hasta 120 kil¨®metros de atascos en los accesos a la ciudad y las autov¨ªas de circunvalaci¨®n. En el Metro, los efectos de los retrasos se han dejado notar m¨¢s.
Seg¨²n la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT), la peor situaci¨®n se produc¨ªa pasadas las nueve de la ma?ana en la M-40, con 28 kil¨®metros de retenciones en cinco tramos; en la A-2, con 16 kil¨®metros, y en la A-6, con 15 kil¨®metros. En la capital, presentaban problemas hacia las nueve y media los accesos por la Cuesta de San Vicente (A-5), avenida del Arco de la Victoria (A-6), paseo de Delicias hacia Atocha y Santa Mar¨ªa de la Cabeza (sur), Conde de Casal (A-3), prolongaci¨®n de O'Donnell en sentido centro, norte del paseo de la Castellana y entrada de la M-607. La M-30 ten¨ªa dificultades en todo el recorrido este y en el interior los conductores soportaban tr¨¢fico lento en Men¨¦ndez Pelayo, Pr¨ªncipe de Vergara, en el eje Cea Berm¨²dez-Jos¨¦ Abascal, Raimundo Fern¨¢ndez Villaverde, Joaqu¨ªn Costa y Gran V¨ªa y el eje Prado-Recoletos hacia Cibeles.
Al margen de los problemas de tr¨¢fico, el incidente m¨¢s destacado hasta el momento se ha producido sobre las siete de la ma?ana por intentar algunos huelguistas saltar el cord¨®n policial que protege la estaci¨®n ferroviaria. Se trata de un "forcejeo" entre la Polic¨ªa Nacional y los manifestantes en la estaci¨®n de Atocha, seg¨²n fuentes policiales, que se ha saldado con tres trabajadores detenidos, dos en el and¨¦n de Cercan¨ªas y otro en el de Alta Velocidad, por desobediencia y residencia a la autoridad, informa la Jefatura Superior de Polic¨ªa.
Los arrestados son dos hombres miembros de UGT y una mujer, de CGT, que pasadas las 13.00 han quedado en libertad con cargos. Seg¨²n la Delegaci¨®n del Gobierno, el piquete informativo, compuesto por unas 200 personas, ha intentado traspasar un cord¨®n policial. Los sindicatos, por su parte, se quejan de la actuaci¨®n policial y aseguran que solo estaban manifest¨¢ndose con megafon¨ªa. "Hab¨ªa seis polic¨ªas por cada manifestante", sostiene? Marta Robledo, responsable de prensa de UGT y presente en Atocha. En la zona de acceso a los andenes de Renfe Cercan¨ªas y media distancia permanecen una docena de antidisturbios.
El comit¨¦ de empresa de Renfe ha presentado una denuncia por esta intervenci¨®n, al tiempo que han criticado hostigamiento a los huelguistas por parte de los polic¨ªas y de los guardias de seguridad de la comp?a¨ªa. A juicio de ambos sindicatos, se han producido "abusos que atentan contra los derechos fundamentales de los trabajadores, como es el derecho de reuni¨®n y el derecho a la huelga". Para CGT, se trata "graves incidentes", que identifican como "carga policial" a la que atribuyen que "varios trabajadores" hayan resultado "contusionados de diversa consideraci¨®n", adem¨¢s de los tres detenidos. Una veintena de sindicalistas y trabajadores se han desplazado a primera hora de la tarde al complejo policial de Moratalaz a esperar a que salieran los arrestados. Han sido identificados y hab¨ªa cuatro furgones de antidisturbios, pero no ha habido incidentes.
"He tardado una hora m¨¢s en volver de mi trabajo"
De Boadilla del Monte a Alcal¨¢ de Henares, del este al noreste de la capital, de su trabajo a su casa, Mar¨ªa Beatriz Quintero, una puericultora de 47 a?os, tarda unas dos horas y media. Con huelga de transporte, una m¨¢s. ¡°Esta ma?ana me retrasaba unos 20 minutos en cada trasbordo y ahora me est¨¢ pasando igual¡±, explic¨® en la estaci¨®n de de Avenida de Am¨¦rica. Fue una de los miles de viajeros afectados por los paros parciales del suburbano y la huelga de trenes en Madrid. ¡°Paciencia, es lo que nos queda¡±, resumi¨® Ram¨®n ?lvaro, un jubilado de 71 a?os, mientras esperaba m¨¢s de diez minutos un tren para hacer las 11 estaciones que le separaban de su casa. ¡°Al menos no me toca trasbordo¡±.
Los efectos de la huelga tambi¨¦n se notaron en el Cercan¨ªas, como constat¨® Paloma Moral, una funcionaria de 65 a?os, a la vuelta de su trabajo: ¡°Por la ma?ana tuve suerte y no me toc¨® esperar, pero al volver a casa el tren ha tardado m¨¢s de 20 minutos¡±, declar¨® tras recorrer el trayecto entre Nuevos Ministerios y Sol.
La huelga no solo provocaron retrasos. En Atocha solo estuvieron abiertas las taquillas para los trenes a Toledo, Ciudad Real y Puertollano, que gestiona una subcontrata, seg¨²n una trabajadora. Zhen Ni, trabajadora china de 38 a?os de una tienda madrile?a, ped¨ªa, con dificultades para expresarse en espa?ol, ayuda para comprar un billete. ¡°No uso tarjeta y no puedo usar la m¨¢quina¡±, explic¨®. Fue finalmente remitida a una agencia, donde le cobraron un recargo. En informaci¨®n solo le advirtieron: ¡°La huelga estaba avisada y es un derecho¡±.
Otro punto caliente de la ma?ana ha sido Sol. Un piquete de unas 50 personas ha pasado por la estaci¨®n de Cercan¨ªas y Metro con panfletos "en defensa del transporte p¨²blico y de calidad" para informar a los ciudadanos del motivo de la huelga. No se han registrado incidentes. A las puertas de la estaci¨®n, se ha producido una concentraci¨®n de unas cien personas, 500 seg¨²n los sindicatos. "D¨®nde est¨¢n, no se ven, los empleos del PP", corean, mientras la polic¨ªa les impide cortar el tr¨¢fico.
Los paros en el sector ferroviario (Renfe, Adif y Feve) han arrancado en la medianoche, mientras que la huelga del suburbano ha empezado con el inicio del servicio, a las seis de la ma?ana. Este primer paro de metro ha durado hasta las diez de la ma?ana y el segundo ha empezado a las cinco de la tarde y se prolongar¨¢ hasta las nueve de la noche. El Ministerio de Fomento ha decretado unos servicios m¨ªnimos del 73% en los trenes de alta velocidad y larga distancia, del 75% en el servicio de Cercan¨ªas Madrid en hora punta y del 65% en los trenes interurbanos. Los sindicatos calculan que han secundado las primeras horas de la jornada de huelga en el sector ferroviario entre el 80% y el 90% de los trabajadores con posibilidad de sumarse al paro.
Los paros en el metro, que?se repetir¨¢n los d¨ªas 21 y 28 de septiembre y 1 de octubre, est¨¢n convocados por el comit¨¦ de empresa de Metro ¡ªcompuesto por el Sindicato de conductores, CC OO, UGT, Soliaridad Obrera, Sindicato Libre y Sindicato de T¨¦cnicos¡ª contra los recortes en las n¨®minas aprobados por el Gobierno para todos los trabajadores p¨²blicos, que pierden la paga extraordinaria de Navidad. Tambi¨¦n se quejan de la "brutal subida de las tarifas" del transporte de la Comunidad de Madrid, el cierre de vest¨ªbulos de la red o el plan de adelanto de cierre de metro a las doce de la noche.
Metro asegura que se est¨¢n cumpliendo los servicios m¨ªnimos del 47% y los sindicatos cifran el seguimiento en el 98%, es decir, que todo el personal que pod¨ªa hacerlo ha secundado la huelga. La protesta de la ma?ana ya ha concluido y la tarde, que tiene unos servicios m¨ªnimos del 34%, se desarrolla sin incidentes. Seg¨²n el comit¨¦ de empresa, el 98% de los trabajadores del turno de tarde est¨¢ secundando el segundo paro. El consejero madrile?o de Transportes, Pablo Cavero, ha comparecido para pedir a los sindicatos de Metro que desconvoquen los pr¨®ximos paros y se solidaricen con el resto de ciudadanos que sufren la crisis. No ha dado datos de seguimiento.
"Por no hacer nada, te caen encima cuatro polic¨ªas"
Los tres detenidos del piquete informativo de esta ma?ana en Atocha han denunciado la excesiva represi¨®n policial que, en su opini¨®n, han empleado los agentes antidisturbios y los guardias de seguridad de Renfe que vigilaban la estaci¨®n a esa hora. Montse Cepeda, taquillera y delegada de CGT, y Miguel Romero y Fernando Perilla, trabajadores del centro de mantenimiento de Villaverde y afiliados a UGT, han quedado en libertad con cargos tras ser detenidos esta ma?ana cuando participaban en una concentraci¨®n por la huelga ferroviaria. Cepeda y Perilla est¨¢n acusados de resistencia a la autoridad, mientras que a Romero se le suma el cargo de atentado. La Delegaci¨®n del Gobierno ha vinculado su detenci¨®n a su intento de "traspasar un cord¨®n policial".
"No estaba preocupada por m¨ª, estoy preocupada por hacia d¨®nde va este pa¨ªs, en el que por no hacer nada, te caen encima cuatro polic¨ªas", ha declarado Cepeda a su salida del complejo policial de Moratalaz, donde fue trasladada desde Atocha junto con los otros dos detenidos. Seg¨²n ha explicado, a primera hora de esta ma?ana ha intentado, junto con otros compa?eros, acceder a los andenes de Cercan¨ªas, "para informar de la huelga a los compa?eros y a los viajeros", y al traspasarlos ha sido neutralizada por varios antidisturbios. En ese momento ha acudido en su ayuda Romero, que seg¨²n su testimonio solo ha pedido a los polic¨ªas que la dejaran, ante lo que estos le han arrestado tambi¨¦n.
Romero relata que ha sido esposado a la espalda y que cuando ha advertido a uno de los agente que le dol¨ªa una mano, le han apretado m¨¢s los grilletes. "Soy un trabajador, no un delincuente", ha destacado a las puertas de Moratalaz, donde ha sido retenido unas horas, a¨²n emocionado tras haber sido recibido con aplausos por sus compa?eros.
Fernando Perilla, por su parte, ha sido detenido en la zona de acceso a las plataformas del AVE. "Ha sido todo muy r¨¢pido, han cargado y de repente me he quedado enfrente de unos polic¨ªas", ha explicado antes de insistir, como su compa?ero, en que no son delincuentes, sino trabajadores "luchando por nuestro trabajo y el pan de nuestros hijos".
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