El futuro de la Ertzaintza, al caj¨®n
El adelanto de las auton¨®micas ha situado en v¨ªa muerta la nueva Ley de Polic¨ªa que abanderaba Ares. El par¨®n deja en el aire la modernizaci¨®n del cuerpo
Era uno de sus proyectos estrella, pero no lo podr¨¢ culminar. Al menos, en esta legislatura. La nueva Ley de Polic¨ªa en la que el ya exconsejero de Interior Rodolfo Ares, pretend¨ªa basar la modernizaci¨®n de la Ertzaintza no ver¨¢ finalmente la luz antes de las pr¨®ximas auton¨®micas, pese a que contaba con el respaldo necesario en el Parlamento. El adelanto electoral al 21 de octubre decretado en agosto por el lehendakari, Patxi L¨®pez, ha dejado en punto muerto una iniciativa con no pocas repercusiones. La renovaci¨®n de una envejecida plantilla con nuevas promociones de agentes o su posterior desarrollo profesional quedan ahora en el aire, a la espera de saber la identidad del futuro responsable del departamento.
La conocida como cuarta modificaci¨®n de la Ley de Polic¨ªa, la cual data originalmente de 1992, pretend¨ªa incorporar los cambios de los ¨²ltimos a?os y establecer un marco de futuro. Tan importante era para Ares, como un icono m¨¢s del cambio propiciado por el Ejecutivo socialista, que su partido la comenz¨® a negociar en 2010. No era f¨¢cil el acuerdo, sin embargo, al implicar no solo al Gobierno, sino tambi¨¦n a Diputaciones, Ayuntamientos y otros organismos p¨²blicos de muy distinto perfil. El consejero aspiraba a una polic¨ªa integral que aglutinara a la Ertzaintza y las distintas guardias urbanas, as¨ª como a regular otras figuras como los serenos, los alguaciles o los vigilantes municipales, hoy en el limbo de la legalidad.
Retos de ¨²ltima hora para Mendia
La marcha de Ares a finales de agosto dej¨® a la portavoz del Gobierno vasco, Idoia Mendia, al frente de un macrodepartamento integrado por las ¨¢reas de Justicia, Administraci¨®n P¨²blica e Interior. Es esta ¨²ltima, sin embargo, la que m¨¢s quebraderos de cabeza le puede crear en las ¨²ltimas semanas de la actual legislatura, habida cuenta de la situaci¨®n que atraviesa la Ertzaintza y de la capacidad de movilizaci¨®n que tienen sus sindicatos.
Dos retos le quedan por delante a Mendia, como consejera de Interior, antes de las pr¨®ximas auton¨®micas. Por un lado, garantizar el decreto que regular¨¢ la segunda actividad por edad entre los agentes. Entrar¨¢ en vigor tras su publicaci¨®n en el Bolet¨ªn Oficial del Pa¨ªs Vasco, antes del 20 de octubre, aunque lo har¨¢ con car¨¢cter retroactivo al 1 de julio. La negociaci¨®n est¨¢ cerrada ya entre los sindicatos y el Gobierno vasco, que incluso ha dado prioridad a esta normativa sobre otras que ten¨ªa tambi¨¦n sobre la mesa. Cualquier esfuerzo del Ejecutivo parece escaso con la campa?a electoral a la vuelta de la esquina.
El segundo objetivo est¨¢ tambi¨¦n encaminado. Tras la pol¨¦mica decisi¨®n sobre el concurso de traslados aprobada en julio, pese a la oposici¨®n de la mayor parte de las centrales, el departamento se ha plegado a modificarla en favor del consenso. La nueva resoluci¨®n est¨¢ publicada ya y abierta a la solicitud de destinos por parte de los agentes sin plaza. Su entrada en vigor, en octubre, reforzar¨¢ la dotaci¨®n de comisar¨ªas vizca¨ªnas con una gran carga de trabajo, como las de Bilbao, Sestao, Getxo, Basauri o Muskiz.
Las diferencias, pese a todo, se fueron limando. El acuerdo era posible y el PSE se granje¨® incluso el apoyo expl¨ªcito del PP, suficiente para impulsar la normativa en el Parlamento. En julio, sin embargo, todo se vino abajo. Durante la comisi¨®n de Interior, y ante la previsi¨®n ya de un adelanto electoral, los populares instaron a habilitar el mes de agosto para aprobar distintos proyectos de ley, incluido el de Polic¨ªa. Los socialistas, sin embargo, se negaron tras argumentar el coste que el visto bueno a la normativa conllevar¨ªa, pese a la incertidumbre sobre qu¨¦ partido comandar¨¢ el pr¨®ximo Gobierno vasco. En efecto, la inversi¨®n se disparar¨ªa, sobre todo en lo referido a la carrera profesional y el consecuente aumento de sueldos, que implicar¨ªa un desembolso de 50 millones de euros en cuatro a?os.
Las repercusiones del env¨ªo al caj¨®n de la iniciativa no afectar¨¢n solo al desarrollo profesional de los agentes. Tambi¨¦n a su propia entrada en el cuerpo. A un lustro vista de unas jubilaciones que se vaticinan masivas, dado que la Ertzaintza suma tres d¨¦cadas de historia y sus primeras generaciones peinan ya canas, la incorporaci¨®n de nuevos efectivos se ha visto paralizada. Ares no quer¨ªa convocar promociones hasta regular, con la renovada Ley de Polic¨ªa, la asignaci¨®n de la mitad de las futuras plazas a mujeres, una pretensi¨®n personal que el Tribunal Superior vasco ha invalidado en el marco actual. La promesa de estabilizar un cuerpo con 8.000 agentes ha quedado, as¨ª, en agua de borrajas.
La convocatoria de promociones se ha frenado en espera de la reforma legal
La futura normativa iba a reglamentar, por otro lado, el paso de los ertzainas m¨¢s veteranos a la segunda actividad, una hist¨®rica reivindicaci¨®n de la plantilla, ya que su concesi¨®n es ambigua en la actualidad. La iniciativa formaba parte de los acuerdos laborales que Ares alcanz¨® con la mayor¨ªa sindical en agosto de 2011 y cuyo cumplimiento, al igual que el de la carrera profesional, a¨²n no se hab¨ªa aplicado. La afecci¨®n que la no aprobaci¨®n de la Ley de Polic¨ªa iba a tener en esta materia supuso la gota que colm¨® el vaso de la paciencia de las centrales, que ya en julio amenazaron con impulsar una ¡°conflictividad como nunca¡± antes en la Ertzaintza.
A escasas semanas ya de la cita con las urnas, y consciente de la capacidad de movilizaci¨®n que tienen los sindicatos de la Polic¨ªa vasca, el Ejecutivo se mostr¨® dispuesto a negociar y aprobar por separado lo referente a la segunda actividad. El acuerdo es firme y se materializar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas, aunque un relevo al frente del Gobierno en octubre podr¨ªa dar al traste con los cambios, ya que estos se aprobar¨¢n por decreto y no por ley. A partir de los 56 a?os, los agentes quedar¨¢n exentos de los dispositivos especiales y tendr¨¢n la posibilidad de dejar de hacer noches. Con 59, cambiar¨¢n las patrullas por trabajos de oficina. Siempre, con el compromiso de jubilarse a los 60.
La carrera de los ¡®ertzainas¡¯ queda en manos del pr¨®ximo Gobierno vasco
El decreto sobre segunda actividad por edad, al menos, saciar¨¢ las reivindicaciones de unos sindicatos que se han sentido estafados con el incumplimiento de la mayor parte de los acuerdos alcanzados con Ares en agosto del pasado a?o. De ellos, la carrera profesional quedar¨¢ pospuesta, en el mejor de los casos, hasta la pr¨®xima legislatura. Sin olvidar que el m¨¢s importante de aquellos pactos, el del nuevo convenio regulador, tampoco se ha podido ejecutar en las condiciones econ¨®micas previstas, al no ser ajena la Ertzaintza a los recortes decretados para el conjunto de los funcionarios. Tan solo el decreto de indemnizaciones, de los cuatro firmados, se ha llevado a la pr¨¢ctica seg¨²n lo consensuado.
La dimisi¨®n de Ares a finales del pasado mes dej¨® a medio camino el pretendido cambio impulsado en la Ertzaintza, tras d¨¦cadas de mandato nacionalista al frente de la consejer¨ªa. De su ¨¦xito como coordinador de la campa?a electoral socialista depender¨¢, en buena medida, el resultado del PSE en las pr¨®ximas auton¨®micas y el color del nuevo Gobierno vasco. Ser¨¢ este el que tendr¨¢ que definir, con nueva ley o sin ella, el futuro de la Polic¨ªa vasca, en un escenario que se antoja lastrado por la crisis econ¨®mica.
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