¡°La hora de la verdad¡±

Cada a?o, en los Presupuestos Generales del Estado para el siguiente ejercicio se plasman las pol¨ªticas econ¨®micas y sociales, entre otras, que el Gobierno quiere desarrollar. Como su propio nombre indica, son presupuestos para todo el estado pero contienen tambi¨¦n decisiones que afectan directamente a cada comunidad aut¨®noma.

Los mandatos que contienen los Presupuestos Generales no son inocuos para la competitividad y el progreso de cada comunidad aut¨®noma. Si se decide hacer un ferrocarril o una carretera desde la comunidad aut¨®noma A a la B, en lugar de desde la comunidad aut¨®noma Y a la Z, se crear¨¢n puestos de trabajo durante la construcci¨®n y ser¨¢ una ayuda a la competitividad en las comunidades A y B y no en la Y y Z. Por cierto ?Por qu¨¦ ser¨¢ que siempre se les da prioridad a las comunicaciones que pasan por Madrid?

Teniendo en cuenta la dif¨ªcil situaci¨®n econ¨®mica que vive Espa?a en su conjunto, y la m¨¢s dif¨ªcil que vive la Comunidad Valenciana, parece oportuno que planteemos cu¨¢les son los m¨ªnimos que precisa para recibir un trato equitativo con respecto al resto de Espa?a. Empecemos por resaltar algunos puntos que son hechos, no opiniones.

No somos una comunidad rica. Eso del Levante feliz es un mito. Nuestra renta per c¨¢pita en 2011 fue del 88,4% de la media nacional. La renta per c¨¢pita o el PIB per c¨¢pita es un indicativo claro, no el ¨²nico, de la riqueza de cada ciudadano. Por ejemplo, Madrid tiene el 127,8%, Catalu?a el 117,9%, Arag¨®n el 111,4%, Galicia el 90,7%.

No somos una comunidad rica.

Somos un contribuyente neto al Estado, los ¨²nicos junto a Madrid, Catalu?a y Baleares. Es decir, el Estado recauda m¨¢s dinero por ciudadano aqu¨ª que lo que luego revierte para financiarnos. No parece l¨®gico. Si nuestra renta es inferior a la media nacional, lo razonable ser¨ªa que los que est¨¢n por debajo de la media recibieran m¨¢s para ayudarles a alcanzar esa media. En ese aspecto, somos la comunidad peor financiada de Espa?a ?Por qu¨¦?

Adem¨¢s de la financiaci¨®n auton¨®mica, otra forma que tiene el Estado para equilibrar las comunidades aut¨®nomas es la inversi¨®n regionalizable. Si el Estado invierte por encima de la media en una comunidad, innegablemente esta comunidad recibe un ¡°empuj¨®n¡± en el empleo y en su competitividad y tampoco en este apartado la Comunidad Valenciana ha sido bien tratada en los Presupuestos Generales del Estado. Con una poblaci¨®n del 10,8% sobre el total nacional y un Producto Interior Bruto (PIB) del 9,7% del espa?ol, la inversi¨®n regionalizable del estado en la Comunidad Valenciana ha sido del 8,7% sobre el total. Y esta cifra es el promedio de los diez ¨²ltimos a?os, no es s¨®lo un dato referido a un ejercicio concreto.

Los empresarios valencianos no practicamos el victimismo por sistema ni ¡°Madrid tiene la culpa de todo¡±. Sabemos que hay cosas que tenemos que hacer nosotros y no es la menor reformar nuestro modelo econ¨®mico. Una reforma que tiene que ir forzosamente en la direcci¨®n de generar actividades de mayor valor a?adido. Un modelo econ¨®mico en el que la industria recupere el porcentaje del PIB que ten¨ªa hace diez a?os, con el objetivo claro de que el sector industrial llegue al 20% del PIB total de la Comunidad Valenciana en cuatro o cinco a?os.

Pero en esta carrera por la competitividad no podemos correr con una bicicleta oxidada y con una rueda pinchada mientras que otros llevan los ¨²ltimos modelos. Sabemos que la situaci¨®n econ¨®mica es la que es y que el Estado no puede sacarse dinero de una chistera. Lo que exigimos es mucho m¨¢s simple: que nos traten como a los dem¨¢s, como al promedio. El resto es cosa nuestra.

Lo que pedimos es una reforma discutida y razonada con las comunidades aut¨®nomas. Que se produzca un reparto m¨¢s l¨®gico del actual. No va a haber m¨¢s, pero lo que hay se debe repartir bien.

Sabemos que una reforma del sistema de financiaci¨®n auton¨®mica no es s¨®lo responsabilidad del Estado sino tambi¨¦n del conjunto de comunidades aut¨®nomas y probablemente este proceso va a llevar su tiempo y no estar¨¢ exento de dificultades. Pero que se inicie ya. Cuanto antes empecemos, antes acabaremos.

Para paliar la situaci¨®n de mala financiaci¨®n de la Comunidad Valenciana, hay cosas que el Gobierno de Espa?a puede hacer de modo inmediato: las inversiones regionalizables. No depende m¨¢s que de s¨ª mismo. D¨®tese a la Comunidad Valenciana en los Presupuestos Generales del Estado de 2013 de unas inversiones superiores a la media nacional y rompamos la tendencia de los ¨²ltimos diez a?os. No es la soluci¨®n definitiva, pero algo es algo.

Y entre esas inversiones, el Corredor Mediterr¨¢neo es la inversi¨®n estrella. Es un proyecto b¨¢sico para el futuro de la Comunidad Valenciana pero lo es tambi¨¦n para Espa?a y Europa. Es la prioridad de las prioridades de esta Comunidad, algo que ha unido a todos los valencianos.

El Estado no nos puede fallar. Los empresarios no lo entender¨ªamos pero el resto de la sociedad valenciana tampoco. A partir de la semana pr¨®xima conoceremos los Presupuestos Generales del Estado 2013. Los empresarios estamos preocupados y expectantes. No nos defrauden.

Jos¨¦ Vicente Gonz¨¢lez es presidente de confederaci¨®n de empresarios CIERVAL.