L¨¢grimas de Aguirre y de desahuciados. Una fiesta mortal. Diputados d¨ªscolos. Mineros, m¨¦dicos y profesores. El a?o de las protestas y los recortes
Madrid -
Ma?ana del 26 de abril.
Jonatan Torres abrazaba a su abuelo Vicente al enterarse de que hab¨ªan ganado la batalla al desahucio que amenazaba con dejarlos en la calle. El anciano, enfermo de coraz¨®n, hab¨ªa avalado en 2004 a su ¨²nico hijo para que se comprara una vivienda. Cuando el padre de Jonatan dej¨® de pagar las cuotas del pr¨¦stamo, Citibank inici¨® los tr¨¢mites de desahucio. Finalmente Vicente, de 78 a?os, logr¨® un acuerdo para seguir en su piso de Carabanchel durante cinco a?os con un alquiler de 150 euros. Como reconocieron en su d¨ªa, no lo hubieran conseguido sin la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Madrid (PAH), de los vecinos del barrio y del 15-M, que unieron sus fuerzas contra este drama social. Solamente en Madrid, el movimiento antidesahucios ha logrado paralizar este a?o casi 200 lanzamientos y ha conseguido abrir el debate entre los partidos pol¨ªticos. El 15 de noviembre el Gobierno central aprob¨® una serie de medidas para paliar los efectos de los desahucios entre las que destaca una moratoria de dos a?os para las familias m¨¢s vulnerables. Pero estas medidas no contemplan los principales reclamos de la PAH: ni aluden a la daci¨®n en pago ni suponen un cambio en las leyes que regulan el proceso del desalojo.
FOTO: ?LVARO GARC?A / TEXTO: MAR?A HERV?S3.32 del 1 de noviembre.
Uno de los cuatro pasillos de dos metros y medio de ancho que serv¨ªan para entrar y salir de la pista del Madrid Arena se bloque¨® al caer al suelo varias personas y amontonarse sobre ellas hasta cinco o seis como sacos de arena. Cinco chicas de 17 a 20 a?os se dejaron all¨ª la vida.
Se celebraba una fiesta de Halloween con un aforo m¨¢ximo de 10.500 personas. Sin embargo, la investigaci¨®n judicial indica que el organizador, Miguel ?ngel Flores, vendi¨® 16.791 entradas. Esa madrugada, podr¨ªa haber en la pista hasta 15.000.
Flores est¨¢ imputado por el juez, que lo puso el viernes en libertad despu¨¦s de que abonara en pocas horas una fianza de 200.000 euros impuesta por riesgo de fuga. Tambi¨¦n est¨¢n imputados los encargados de la seguridad y el control de aforo del recinto esa noche; y el concejal Pedro Calvo, como responsable pol¨ªtico de que el Ayuntamiento de Madrid alquilara el pabell¨®n a Flores.
La comisi¨®n de investigaci¨®n impulsada por el l¨ªder municipal socialista, Jaime Lissavetzky desvel¨® sombras en la actuaci¨®n del Samur y la Polic¨ªa Municipal. Adem¨¢s, el Ayuntamiento sab¨ªa desde 2010 que el Madrid Arena ten¨ªa fallos de seguridad, pero sigui¨® alquil¨¢ndolo sin solventarlos.
La regidora ha prohibido que se celebren macrofiestas y ha reducido notablemente el aforo de los recintos municipales; adem¨¢s, ha avanzado que privatizar¨¢ la gesti¨®n del Madrid Arena. Pero pese a la estricta vigilancia policial y el celo extremo desplegado por el Ayuntamiento tras la tragedia para enjuagar su imagen, Madrid ha vivido de sobresalto en sobresalto: el festival Primavera Club ha emigrado a Francia tras sufrir un fuerte recorte de aforo de ¨²ltima hora; el rastrillo ben¨¦fico Nuevo Futuro estuvo a un tris de suspenderse por falta de seguridad. Y la polic¨ªa par¨® y tuvo que reanudar ante las protestas del p¨²blico el acceso a un concierto en Vistalegre, que lleva meses con el plan de seguridad caducado.FOTO CEDIDA POR ESTEFAN?A SA / TEXTO: BRUNO G. GALLO19.30 del 7 de agosto.
Un estruendo rompe la tranquilidad de una soleada tarde de verano en las cocheras de Metrosur en Loranca (M¨®stoles). El gerente de mantenimiento de ciclo corto de Metro Jos¨¦ Manuel P¨¦rez Garc¨ªa, de 36 a?os, y la canguro suiza Jeanne A., de 17, pierden la vida en el choque del metro M-8403 que circula por los 800 metros de una v¨ªa muerta. En el siniestro tambi¨¦n resultan heridos la esposa del gerente y el hijo de ambos. La tragedia es el resultado de una temeridad, porque est¨¢ prohibido que personas ajenas a Metro entren en el espacio donde se arreglan y duermen los convoyes. Sin embargo, minutos antes, P¨¦rez hab¨ªa pedido las llaves para coger un metro al jefe de dep¨®sito, que no pudo decirle que no a su superior. El gerente lleva el tren al principio de la v¨ªa muerta y choca tras recorrer m¨¢s de 500 metros.
La cabina queda hecha un amasijo de hierros a los pies de un talud ubicado al final de la v¨ªa. Sus 4,5 metros cuadrados terminan en la parte delantera del espacio destinado a los pasajeros. No hay ni llamas ni explosiones. Solo hierros doblados y una catenaria ¡ªel cable que transmite la energ¨ªa el¨¦ctrica¡ª derribada. La extracci¨®n de los cuerpos se convierte en una tarea dif¨ªcil. Los bomberos tienen problemas para cortar la chapa del convoy convertido en un acorde¨®n. A las diez de la noche termina el operativo despu¨¦s de que la Polic¨ªa Cient¨ªfica haya recogido las grabaciones de las c¨¢maras de seguridad.FOTO: LUIS SEVILLANO / TEXTO: F. JAVIER BARROSOAlg¨²n momento del 6 de mayo.
Un millar de hect¨¢reas al norte de Alcorc¨®n son el destino preferido para albergar Eurovegas, el megacomplejo de casinos, hoteles y congresos que Las Vegas Sands Corporation construir¨¢ en la regi¨®n tras descartar a Barcelona. La elecci¨®n final se espera para enero y, aunque tambi¨¦n compiten las candidaturas de Valdecarros y Paracuellos del Jarama, la ciudad que gobierna David P¨¦rez (PP) es la gran favorita. La estampa de Sheldon Adelson, se?or de los casinos y 14? fortuna mundial, inspeccionando los terrenos el 6 de mayo corrobora las impresiones al respecto. La misma Esperanza Aguirre lo ha dejado caer: su ¡°intuici¨®n¡± es que Eurovegas ir¨¢ a Alcorc¨®n. Pese a que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid anulara tres semanas despu¨¦s los acuerdos de 2008 que convert¨ªan en urbanizables 1.231 hect¨¢reas que de momento ¡ªla Comunidad ha recurrido al Supremo¡ª vuelven a ser r¨²sticas.
El examen de Adelson fue una visita de apenas cuatro horas que vale una docena de hoteles, seis casinos, miles de millones y hasta 250.000 empleos, seg¨²n las cifras m¨¢s optimistas. Le acompa?aron su esposa, Miriam Ochsorn; P¨¦rez, Jes¨²s Sainz (presidente de Promomadrid), Percival Manglano (exconsejero de Econom¨ªa y Hacienda), Pablo Cavero (consejero de Transportes) y David Hatchwell, vicepresidente de
los jud¨ªos de Espa?a.
Cuatro meses m¨¢s tarde, Las Vegas Sands eleg¨ªa a Madrid como ¡°localizaci¨®n preferente¡±. En diciembre de 2013 est¨¢ previsto que se coloque la primera piedra de un proyecto al que sus detractores ven mitad centro de perdici¨®n mitad brindis al sol, y sus defensores como la oportunidad de hacer de Madrid la capital de los congresos del sur de Europa. Aunque el secretario de Estado de Comercio, Jaime Garc¨ªa-Legaz, asegura que el juego solo representar¨¢ al 3% del negocio que mueva Eurovegas, la bater¨ªa de medidas fiscales y administrativas aprobadas por la Comunidad dan a entender que ser¨¢ mucho m¨¢s.FOTO: COMUNIDAD DE MADRID / TEXTO: JOS? MARCOSMa?ana del 10 de septiembre.
Ten¨ªa que ser otro de esos actos perfectamente sincronizados. Visita, recorrido, planos amables con ni?os para las c¨¢maras de televisi¨®n y vuelta al coche oficial. La presidenta Aguirre lleg¨® al colegio p¨²blico Virgen de Navalazarza (San Agust¨ªn de Guadalix) con un anuncio preciado bajo el brazo: todos los nuevos colegios p¨²blicos ser¨¢n biling¨¹es. Sandra Peralta, madre de dos hijos y ama de casa en un hogar con econom¨ªa maltrecha, se encontr¨® con la comitiva a la puerta del centro al que iba para su hija a la lista de pr¨¦stamos de libros. Madrid ha eliminado las ayudas a textos (que recib¨ªan 310.000 familias) y ha reducido un tercio del presupuesto para becas de comedor. A cambio, se abren los comedores para las familias que den a sus hijos comida en una tartera, pagando hasta 3,80 euros, menos que un diputado madrile?o por su men¨² en el Parlamento regional.
Un grupo de profesores de la marea verde protestaba junto al acceso. Una protesta m¨¢s de entre miles. Este a?o la Comunidad de Madrid ha perdido docentes, ha cerrado colegios, ha aumentado las tasas universitarias, recortado presupuestos¡ Las movilizaciones han ganado en contundencia mientras algunos directores de instituto han confesado que es ¡°imposible¡± garantizar la limpieza y los rectores universitarios se han declarado en rebeld¨ªa contra los recortes. Los manifestantes de aquella ma?ana llevaban tuppers como s¨ªmbolo de protesta. Y le dieron uno a Peralta. ¡°Se lo entregar¨¦ a Aguirre cuando salga y le preguntar¨¦ si llevar¨ªa a su hijo con comida para recalentar al colegio¡±, pens¨®. Pero el cord¨®n de seguridad le impidi¨® acercarse a la presidenta. Y la mujer lanz¨® la tartera al paso sin pensar en las consecuencias. Acto reflejo. A¨²n avergonzada, mientras las redes sociales desbordaban con las im¨¢genes su gesto, la mujer reflexionaba: ¡°A los pobres no se les puede reventar as¨ª¡±.FOTO: SANTI BURGOS / TEXTO: PILAR ?LVAREZNoche del 10 de julio.
Madrid parec¨ªa muerta. Los recortes y la crisis hab¨ªan enterrado el ¨¢nimo ciudadano y lo peor se ve¨ªa ya como sin¨®nimo de lo inevitable. Entonces llegaron los mineros, caminando desde sus cuencas secas de ayudas al carb¨®n en Arag¨®n y Asturias para reivindicar un poco de ¨¦pica obrera. Durante 19 d¨ªas les precedieron relatos sobre ampollas sangrantes y abrazos solidarios en cada pueblo del camino. Y el 10 de julio al fin entraron en el centro de Madrid. Desde Moncloa hasta Sol las calles de la ciudad se colapsaron para ovacionar a los caminantes coronados con las linternas del casco prendidas. Sin convocatorias ni anuncios: un golpe de rabia espont¨¢nea. Al paso de la marcha negra hubo aplausos, l¨¢grimas y silencios respetuosos. En Sol se escuch¨® un Santa B¨¢rbara bendita de gargantas rotas.
Los mineros pelearon por su pan y su forma de vida, y perdieron: sin darles tiempos a descansar, se confirm¨® que el Gobierno retiraba las ayudas a la producci¨®n de carb¨®n. Qued¨® la luz rom¨¢ntica de la que ti?eron Madrid aquella noche de verano como un anuncio del endurecimiento de las protestas. FOTO: ULY MART?N / TEXTO: JER?NIMO ANDREU Noche del 25 de septiembre.
De derechas, formal, encargado de un bar de los de toda la vida. Alberto Casillas es uno de esos se?ores respetables a los que Mariano Rajoy parece dirigirse en todos sus discursos. Y como aconseja siempre el presidente, lo que el se?or Casillas hizo aquella noche fue aplicar el sentido com¨²n. Concretamente impidi¨® que un grupo de antidisturbios entrara en su bar buscando a un participante de la manifestaci¨®n del 25-S. ¡°Me daba miedo que se montara una masacre¡±, contaba al d¨ªa siguiente Casillas. Los polic¨ªas ten¨ªan un aspecto algo inquietante cargados de armaduras, porras y cascos con la visera bajada. Casillas se plant¨® a las puertas del bar y dej¨® claro que all¨ª solo se iba a entrar por encima de su cad¨¢ver. ¡°Se me hab¨ªa metido una marea de gente: viejos, ni?os¡¡±, explicaba a¨²n apurado.
Casillas se convirti¨® en el s¨ªmbolo de una Espa?a tranquila, incluso conservadora, que simpatizaba con las causas de los manifestantes y no terminaba de entender la contundencia policial a la hora de controlarlos. La noche que se hizo famoso miles de personas estaban intentando rodear el Congreso de los diputados para transmitir su desagrado por la gesti¨®n pol¨ªtica de la crisis. Las protestas no han remitido desde entonces, hasta el punto de que la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, y el presidente de la Comunidad, Ignacio Gonz¨¢lez, han pensado que lo mejor era pedir que se limitara el derecho de manifestaci¨®n. Hace dos d¨ªas el propio Mariano Rajoy tuvo que salir a expresar su oposici¨®n a la idea: eso no ser¨ªa razonable. Tampoco constitucional ni f¨¢cilmente digerible para la poblaci¨®n. FOTO: JASPER JUINEN (GETTY IMAGES) / TEXTO: J. ANDREUApertura del metro el 12 de marzo. Forrada. De arriba abajo. A la estaci¨®n de Sol, la m¨¢s transitada de la red, le cambiaron el nombre y el aspecto durante un mes en una campa?a para promocionar un tel¨¦fono m¨®vil. Carteles, fotograf¨ªas, expositores, un caricaturista que pintaba sobre el tel¨¦fono¡ El consejero de Transportes, Pablo Cavero, se dej¨® dibujar y recorri¨® los andenes con los responsables de la empresa. Ante la pol¨¦mica, defendi¨® ¡°la forma creativa¡± de aumentar los ingresos de Metro sin tocar el precio de los billetes. No quiso dar el coste de la operaci¨®n publicitaria, pero el tiempo le ha quitado la raz¨®n. Dos meses despu¨¦s, los viajeros sufr¨ªan el tarifazo de la d¨¦cada, con una subida media del 11% y de casi el 30% para billetes como el abono de 10 viajes. Volvieron a subir en septiembre con el IVA al transporte. Y los ingresos por publicidad del a?o conocidos el 4 de diciembre, con 10 millones previstos, suponen menos de lo previsto. Mientras, Metro vive un periodo de agitaci¨®n sin precedentes: huelgas, descenso de la frecuencia y nerviosismo ante un plan fantasma que podr¨ªa suponer el fin del servicio a medianoche.FOTO: SAMUEL S?NCHEZ / TEXTO: PILAR ?LVAREZ24.00 del 4 de diciembre. Volvi¨® el negro. Una palanca y todo qued¨® congelado en el plat¨®. Ten¨ªa que haber permanecido a oscuras, en luto, o con el cartel sobre una imagen fija de la torre de emisiones: ¡°Nuestra programaci¨®n se est¨¢ viendo alterada a causa de la huelga convocada por los sindicatos CC OO, UGT y CGT¡±. La Comunidad de Madrid ha anunciado el despido de 925 trabajadores de una plantilla de 1.170. El plazo de las negociaciones termina la v¨ªspera de Reyes. Los despidos comenzar¨¢n a hacerse efectivos ese d¨ªa. Sin embargo, en la madrugada del 4 de diciembre en el centro de la pantalla y durante horas no fue el cartel de huelga el que qued¨® congelado sino la imagen del d¨ªa del expresidente de los empresarios, Gerardo D¨ªaz Ferr¨¢n, detenido por alzamiento de bienes y blanqueo. All¨ª qued¨®, con la mirada perdida y el gesto circunspecto a su llegada al juzgado. Los trabajadores de Telemadrid acusan a los responsables de la cadena, con 240 millones de deuda, de arruinarla a base de malas decisiones y despilfarros.FOTO: ULY MART?N / TEXTO: PILAR ?LVAREZ11.25 del 27 de agosto. Lunes. Se desata el mayor incendio forestal de la regi¨®n de las ¨²ltimas d¨¦cadas. Un pir¨®mano arroj¨® desde una furgoneta blanca cuatro artefactos incendiarios en los m¨¢rgenes de la carretera M-537, que une Robledo de Chavela con Valdemaqueda. Las altas temperaturas, la sequedad de la zona y una densa poblaci¨®n de ¨¢rboles se al¨ªan para que el fuego alcance en minutos dimensiones espectaculares. Una densa columna de humo negro es visible desde kil¨®metros de distancia. El pir¨®mano sab¨ªa perfectamente d¨®nde lanzaba los explosivos: tres en la zona sur y el cuarto al norte, en una mezcla de superficie forestal y urbana. Pese a que los vecinos dieron aviso de inmediato, la falta de helic¨®pteros y otros medios de extinci¨®n imprescindibles hace que la intervenci¨®n de los bomberos arranque tarde, dando tiempo a que el fuego corra colina arriba. Trepa tan r¨¢pido que es necesario desalojar algunas urbanizaciones, como La Suiza Espa?ola o R¨ªo Cofio. La presa de Robledo est¨¢ adem¨¢s vac¨ªa. Las llamas llegan hasta el municipio de Santa Mar¨ªa de la Alameda, lo que supone unas 1.500 hect¨¢reas arrasadas. Los bomberos, las brigadas forestales y la Unidad Militar de Emergencias se ven incapaces de acceder a lugares escarpados, por lo que tardan cuatro d¨ªas en dar por extinguido el fuego. Atr¨¢s quedan miles de ¨¢rboles destrozados y una ampl¨ªsima zona devastada. Hasta la fecha no hay detenidos por un atentado forestal en el que, al menos, no hubo v¨ªctimas humanas.FOTO: LUIS SEVILLANO / TEXTO: F. JAVIER BARROSO17.21 del 27 de diciembre. La Asamblea de Madrid vota una ley decisiva para la sanidad p¨²blica, la que permitir¨¢ algo in¨¦dito en la regi¨®n y en Espa?a: que seis hospitales inaugurados en 2008 y 27 centros de salud se vac¨ªen de personal p¨²blico y vean entregada su gesti¨®n a empresas privadas. Una decisi¨®n del Gobierno regional que ha provocado una movilizaci¨®n hist¨®rica del colectivo sanitario, con los m¨¦dicos ¡ªpoco dados a protestar en p¨²blico¡ª haciendo huelga indefinida durante cinco semanas, llenando la calle con sus batas blancas y dejando 40.000 consultas suspendidas y 6.000 operaciones aplazadas. Mientras se vota, el 27 de diciembre, el fot¨®grafo ?lvaro Garc¨ªa capta la imagen de dos diputados del PP, Bartolom¨¦ Garc¨ªa e Isabel Redondo, entreteni¨¦ndose con una partida de Apalabrados, un juego online. Las redes sociales se llenan de muestras de indignaci¨®n; ellos piden disculpas. De momento, no han recibido sanci¨®n. El mayor conflicto sanitario que vive la regi¨®n, con cuatro multitudinarias mareas blancas de protesta en el centro de la capital y paros totales convocados por todos los sindicatos, cambia de estrategia al abandonar los m¨¦dicos la huelga indefinida: ahora llega el turno de las dimisiones en masa de las direcciones de los centros y de los comit¨¦s consultivos. Medidas de presi¨®n para tratar de evitar lo que declaraciones p¨²blicas de todo tipo de sociedades cient¨ªficas y colegios profesionales no han conseguido, que el Gobierno regional renuncie a privatizar la gesti¨®n de los hospitales escud¨¢ndose en un mayor ahorro que sus cifras a¨²n no han conseguido demostrar.FOTO: ?LVARO GARC?A / TEXTO: E. G. SEVILLANO
