C¨®mo salir de esta

Les propongo como lectores que hagamos abstracci¨®n del mal llamado debate del estado de la naci¨®n, porque naciones hay varias en Espa?a o ninguna para algunos. Es una cuesti¨®n de fe. Seamos pr¨¢cticos y vayamos al problema, a buscar las soluciones que puedan evitar el caos social, la protesta continuada, la huelga indefinida y, finalmente, incluso la violencia.

La admisi¨®n a tr¨¢mite de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) relativa a los desahucios, viene a significar la ruptura ciudadana con un orden social ya inexistente. Los ciudadanos han dicho: "Apartad pol¨ªticos corruptos, Parlamento in¨²til, dejad que le digamos a Rajoy lo que tiene que hacer". La tramitaci¨®n de esta ILP significa que ahora mismo el poder lo ejercen los ciudadanos, porque el Grupo Popular tendr¨¢ que votarla a favor respetando su esencia.

As¨ª lo determinan las ¨²ltimas encuestas: el 90% de los ciudadanos respaldan la iniciativa con independencia del partido al que votan (Metroscopia, 17 de febrero de 2013). La sociedad en su conjunto defender¨¢ a los desahuciados y a los que no tienen recursos para atender sus hipotecas, esto es, defender¨¢ el constitucional derecho a la vivienda por encima de otras consideraciones, lo que conmina al PP a resolver en este sentido. Considero que cualquier titubeo al respecto nos situar¨ªa ya en el caos.

Pero si el PP de Rajoy defiende a las personas desproteger¨¢ los intereses de los bancos y en consecuencia del sistema euro en su conjunto, evidenciando, adem¨¢s, la situaci¨®n de debilidad extrema en que se encuentra su flamante mayor¨ªa absoluta de 186 esca?os. El problema ya no tiene soluci¨®n, ahora mandan los ciudadanos, que finalmente han arrinconado al absolutista PP de Rajoy en la misma esquina que ocupa la presunta caja B de este partido.

En la Uni¨®n Europea de Merkel y Hollande ya saben que el sistema electoral espa?ol ha fallado, lo que significa que la flexibilizaci¨®n de los plazos est¨¢ garantizada, tambi¨¦n el pacto PSOE-PP si no hay otra f¨®rmula, incluso el cambio dr¨¢stico de las pol¨ªticas sobre el sur de Europa: no se puede permitir la inestabilidad pol¨ªtica continuada o la retirada del PIB espa?ol aunque lo pida la mayor¨ªa social, como en Grecia.

Ya hemos indicado una soluci¨®n: el rey debe abdicar en el pr¨ªncipe Felipe, para iniciar un proceso donde los ciudadanos deciden en las comunidades aut¨®nomas si se transforman en Estados de una confederaci¨®n, se establece una nueva Constituci¨®n, deliberativa y ciudadana, y se somete a refrendo la continuidad de la propia monarqu¨ªa al finalizar el nuevo proceso constituyente. Resulta chocante el dogmatismo religioso de la vieja izquierda espa?ola, que es republicana y no soportar¨ªa pedir la abdicaci¨®n del rey aunque resolviera todos los problemas, cualquier soluci¨®n menos esta. Tampoco le sirve esta idea a otros partidos nuevos como UPyD, incapaces de digerir que Euskal Herria sea la naci¨®n de la mayor¨ªa social vasca: la cesta se tiene que hacer con estos mimbres, sobre todo, porque no hay otros.

Enric Morera es portavoz de Comprom¨ªs en las Cortes