¡°Deben ir a M¨¦xico en cuatro d¨ªas¡±

El centenar de amigos y familiares de Isabel Monr¨®s que acudi¨® ayer a los juzgados de Montcada (Valencia) y que hizo frente a los agentes de la Guardia Civil no pudo impedir que sus tres hijos fueran devueltos a su padre. En un ambiente de gran tensi¨®n, una juez de Montcada (Valencia) orden¨® y ejecut¨® su entrega ¡°inmediata¡± en cumplimiento de dos resoluciones judiciales y del convenio de La Haya. La magistrada recoge en un auto dictado ayer que el padre, con domicilio en M¨¦xico y que se encuentra actualmente en Valencia, deber¨¢ viajar ¡°con la mayor brevedad posible¡± a M¨¦xico con sus hijos (un chico de 13 a?os y dos gemelos de 10), para lo que ha concedido un plazo m¨¢ximo de cuatro d¨ªas. Y ello, a pesar de que, como admite en el mismo escrito, los ni?os ¡°se?alaban que prefer¨ªan seguir viviendo en Alboraia al estar perfectamente adaptados a su nueva vida en Espa?a¡±.

Los progenitores de los menores resid¨ªan en M¨¦xico y se divorciaron en 2009. En 2010, la madre decidi¨® abandonar el pa¨ªs norteamericano y volver con su familia a Alboraia (Valencia) por el deterioro de las relaciones con su exmarido y por razones econ¨®micas, seg¨²n ha se?alado los ¨²ltimos d¨ªas. Al acudir a Espa?a junto a sus hijos, rompi¨® el r¨¦gimen de visitas a las que ten¨ªa derecho el padre, que llev¨® la cuesti¨®n a los tribunales espa?oles.

Una sentencia del juzgado de familia del distrito judicial de Tlalnepantla (al norte de la zona metroplitana de la ciudad de M¨¦xico) de 2010 mantuvo la guarda para la madre con un amplio r¨¦gimen de visitas a favor del padre. Adem¨¢s, exig¨ªa que si alguno de los menores ten¨ªa que viajar deb¨ªa de existir una autorizaci¨®n previa del otro progenitor. Todo ello lo recoge una sentencia del juzgado de primera instancia de Montcada que ha conocido el caso y que fall¨® en marzo de 2011 a favor del padre por considerar que Isabel hab¨ªa conculcado el acuerdo del r¨¦gimen de visitas, as¨ª como la obligaci¨®n de comunicar las salidas al extranjero, entre otros aspectos. El fallo alude a la existencia de un ¡°traslado il¨ªcito¡± de los menores, tal y como recoge el Convenio de la Haya. En diciembre de 2012, la Audiencia de Valencia confirm¨® esta resoluci¨®n.

Los tribunales se?alan? que los ni?os fueron tra¨ªdos a Espa?a ilegalmente

En distintas ocasiones, Monr¨®s ha se?alado que en su sentencia de divorcio quedaba pendiente fijar un r¨¦gimen de visitas y una pensi¨®n alimenticia para los ni?os. Y que, al no tener garantizados los recursos para mantener a sus hijos en M¨¦xico, opt¨® por volver a casa de sus padres en Alboraia.

El s¨¢bado pasado, el juzgado de Montcada ya intent¨® ejecutar la sentencia. Entonces, unos 300 vecinos hicieron frente al despliegue de la Guardia Civil frente al domicilio de la madre, en Alboraia. Entre gritos de ¡°?que no salgan!¡±, la muchedumbre impidi¨® que los agentes pudieran acceder a los ni?os y finalmente la operaci¨®n no pudo llevarse a cabo.

Ayer, la magistrada de Montcada cit¨® a la madre y los tres menores en la sede judicial a las nueve de la ma?ana para someter a los chavales a un examen m¨¦dico. La prueba respond¨ªa a las denuncias de maltrato manifestadas p¨²blicamente por parte de Isabel hacia su exmarido, Joaqu¨ªn Escolano.

Tras distintas pruebas psicol¨®gicas, la juez orden¨® en un auto que se ejecutara el fallo. En el mismo escrito, la juez recoge que los chavales no manifestaban se?ales de haber sufrido maltrato. ¡°De existir, debi¨® haberse producido cuando los padres estaban casados, y resulta sorprendente que nada se dijera en esta sede¡± o ¡°que no se formulara denuncia ante las autoridades mexicanas o espa?olas¡±, indica.

La madre de los menores sostiene que en su sentencia de divorcio quedaba pendiente fijar un r¨¦gimen de visitas

Ayer se produjo una escena similar a la del s¨¢bado en el exterior de los juzgados. Pese a ello, tras someterse al examen psicol¨®gico, los menores abandonaron los juzgados en un furg¨®n policial hacia las 11.30 horas acompa?ados por su padre. Medio centenar de agentes de la Guardia Civil hicieron de parapeto entre gritos y forcejeos. Algunas de las personas concentradas, entre las que se encontraba la madre, se abalanzaron sobre el veh¨ªculo en el que viajaban los menores. Isabel Monr¨®s tuvo que ser atendida posteriormente por personal sanitario por una crisis de ansiedad.