Tete Montoliu regresa al Jamboree

Tete Montoliu falleci¨® el domingo 24 de agosto de 1997 tras diversas complicaciones de un c¨¢ncer pulmonar. De no haber sido por ello, el m¨¢s grande de nuestros m¨²sicos de jazz habr¨ªa cumplido 80 a?os en el d¨ªa de hoy, una edad en la que muchos m¨²sicos conservan todav¨ªa intacta su creatividad. Probablemente, ese hubiera sido el caso de Montoliu, ya que sus ¨²ltimos a?os fueron indiscutiblemente los mejores de su larga carrera, musicalmente hablando, y todo parec¨ªa indicar que su creatividad segu¨ªa un camino ascendente.

El tiempo ha pasado, pero su recuerdo perdura entre m¨²sicos y aficionados. As¨ª, un grupo de ellos, tanto m¨²sicos como aficionados, amigos o simples seguidores, se reunir¨¢n el domingo en la barcelonesa sala Jamboree para celebrar este ochenta aniversario. Se tratar¨¢ de dos sesiones consecutivas, a las 18 y 20 horas, presentadas como Perry Robinson and Tete Friends, contar¨¢n con la presencia de diversos instrumentistas que o bien actuaron con Tete o han seguido sus pasos musicales. Al final de cada una de las sesiones se proyectar¨¢ el documental Tete. Una mirada.

En los a?os 40 en Espa?a ser ciego implicaba ser tonto, dec¨ªa

Tete Montoliu naci¨® en Barcelona, hijo de un m¨²sico profesional y de una amante del jazz. ¡°Mi madre ten¨ªa 16 a?os cuando se cas¨®, mi padre 29 y yo nac¨ª cinco meses despu¨¦s¡±, recordaba el pianista en el libro Tete, quasi autobiografia (1998). Tete naci¨® ciego y probablemente el reto de superar esa malformaci¨®n en la ¨¦poca m¨¢s dura de la Espa?a franquista (¡°En los a?os cuarenta, en Espa?a, nacer ciego implicaba, adem¨¢s, convertirte irremediablemente en tonto, porque a nadie se le ocurr¨ªa que un ciego tambi¨¦n pod¨ªa ser inteligente y hacer otras cosas que quedarse encerrado en casa¡±) le sirvi¨® como acicate para convertirse en un gran pianista, titul¨¢ndose en el Conservatorio Municipal de Barcelona en contra de la opini¨®n de su director que no quer¨ªa ense?ar a un ciego.

Y, con el t¨ªtulo en el bolsillo, Tete Montoliu comenz¨® su andadura en la m¨²sica tropical antes de decantarse exclusivamente por el jazz. Una carrera que tuvo que realizar eminentemente en el extranjero porque el jazz gozaba entonces entre nosotros a¨²n de menos popularidad que ahora. En esa parte de su carrera el nombre Jamboree adquiri¨® una importancia fundamental ya que era pr¨¢cticamente el ¨²nico club de jazz espa?ol con una cierta entidad (solo el Whisky Jazz madrile?o pod¨ªa compar¨¢rsele) y Tete pas¨® largas temporadas en el s¨®tano de la plaza Reial llegando a dirigir el grupo estable del local en la primera mitad de los a?os sesenta. ¡°Jamboree pon¨ªa jazz, pero era un cabar¨¦ de marinos y putas. (...) Joan Rosell¨® (fundador de Jamboree) busc¨® una salida en el p¨²blico del cercano Liceo. Todo cambi¨® cuando el Jamboree se puso de moda entre la intelectualidad catalana: entonces comenzaron a ir los aficionados al jazz que antes no se atrev¨ªan¡±. Y mucho tuvo que ver en ese cambio la presencia del pianista de la calle Muntaner que en Jamboree actu¨® con alguno de los nombres m¨¢s importantes del jazz de la ¨¦poca.

Jamboree fue esencial en la historia de Tete Montoliu, por esa raz¨®n estos actos en su recuerdo cobran ahora una dimensi¨®n muy especial.

Perry Robinson y Horacio Fumero actuar¨¢n en el homenaje

Si el local fue importante para Tete, la mayor¨ªa de los m¨²sicos que este domingo honrar¨¢n su memoria tambi¨¦n lo fueron. El pianista Francesc Burrull fue amigo personal de Tete desde los tiempos del Conservatorio y particip¨® tocando el vibr¨¢fono en sus primeros discos puramente jazz¨ªsticos en 1958. Burrull es otro de esos casos de creatividad inalterable ya que, solo un a?o m¨¢s joven que Tete, acaba de editar un magn¨ªfico ced¨¦ en compa?¨ªa de otro amigo de Tete, el trompetista egarense Josep Maria Farr¨¤s, que tambi¨¦n estar¨¢ presente en el homenaje.

Tete conoci¨® en 1959 a Perry Robinson (nacido en 1938) en Madrid cuando este clarinetista norteamericano formaba parte del grupo The New Blues Quartet. Tete qued¨® asombrado por las nuevas sonoridades que aportaba Robinson y se lo trajo para Barcelona, juntos tocaron en la inauguraci¨®n oficial de Jamboree el 9 de enero de 1960. Fueron las primeras actuaciones importantes en la carrera de Robinson. Su presencia ser¨¢ una raz¨®n m¨¢s para convertir estas sesiones en algo m¨¢s que un homenaje. Como lo es la presencia de otro hombre que estuvo al lado de Tete durante m¨¢s de 20 a?os: el genial contrabajista argentino afincado en Barcelona Horacio Fumero. Adem¨¢s de los mencionados tambi¨¦n actuar¨¢n el pianista Ignasi Terraza, el contrabajista Ignasi Gonz¨¢lez y el bater¨ªa Esteva Pi.

Con todos esos m¨²sicos sobre el escenario seguro que el concierto ser¨¢ de los que le hubieran gustado a Tete y eso que, como oyente, nuestro pianista era extremadamente exigente.