Ra¨²l Arza dirigir¨¢ el sindicato tras ganar a Pilar Collantes con un exiguo 55%

El actual secretario de Organizaci¨®n y Comunicaci¨®n, Ra¨²l Arza, dirigir¨¢ el centenario sindicato UGT de Euskadi, despu¨¦s de lograr una apurada victoria sobre la ex secretaria de Acci¨®n sindical, Pilar Collantes, que durante buena parte de la ma?ana le ha llevado la delantera en las votaciones a mano alzada sobre estatutos y organizaci¨®n.La plancha de Raul Arza ha ganado por un 55,65%, en una votaci¨®n pol¨¦mica debido a que en la candidatura de Pilar Collantes faltaba uno de los nombres.

Arza ha forzado las

Arza, de 50 a?os de edad y natural de Llodio, Alava, lleva en el sindicato desde 1984 y es licenciado en Ciencias del Trabajo, adem¨¢s de master en Prevenci¨®n de riesgos laborales y trabajador de Lanbide. Tiene por delante la tarea de modernizar la organizaci¨®n, adaptarla a los nuevos tiempos y seg¨²n emplaz¨® el secretario general confederal, C¨¢ndido M¨¦ndez en la jornada precedente, ajustar el desfase entre el n¨²mero de afiliados, unos 40.000 trabajadores, a la representaci¨®n real en n¨²mero de delegados, el 12%, que lo convierte en el cuarto sindicato detr¨¢s de ELA, CC OO y LAB.

Arza dirigir¨¢ una ejecutiva de ocho miembros con una media de edad de 45 a?os, en la que s¨®lo repiten tres personas, ¨¦l mismo, Maribel Ballesteros, la secretaria de Acci¨®n Sindical y Esperanza Morales. El XI congreso de UGT es el claro ejemplo de la importancia que tienen los detalles en las votaciones ajustadas. Arza forz¨® que las votaciones fueran secretas, y eso cambi¨® el curso de una ma?ana en la que a mano alzada ganaba el bloque de Collantes.

Muchas de las votaciones m¨¢s relevantes en materia de estatutos se hicieron en voto secreto frente al tradicional sistema de mano alzada. Ah¨ª pudo estar parte de la victoria en asuntos trascendentales como el n¨²mero de miembros de la nueve ejecutiva. El candidato Raul Arza propon¨ªa ocho y Pilar Collantes seis. Por unos escasos 23 votos gan¨® Arza pero despu¨¦s de una larga serie de votaciones a mano alzada en la que los delegados siguieron las directrices de sus federaciones. Y en esa tesitura ganaba Collantes, que lleg¨® al congreso con un te¨®rico apoyo del 60% de los delegados. En las votaciones secretas, donde el control de las federaciones se disipa, los delegados votaron en conciencia, y en ese nuevo marco, Arza recuper¨® el control que ya mantuvo hasta el final del Congreso.

La candidatura perdedora asegura que esto s¨®lo ha sido la primera parte. "En el pr¨®ximo comit¨¦ nacional podr¨ªan cambiar las cosas", han advertido.