Atrapado en la telara?a judicial
El siete veces consejero de la Generalitat est¨¢ procesado por cuatro delitos Tambi¨¦n est¨¢ imputado por cinco m¨¢s y la fiscal¨ªa investiga sus adjudicaciones desde 1999
Rafael Blasco, siete veces consejero de la Generalitat y a¨²n diputado del PP en las Cortes Valencianas, parece ya condenado, al menos, a pasar varios a?os, y tiene 68, entrando y saliendo de los juzgados. Mientras el veterano pol¨ªtico apura su margen de movimiento en el interior de su grupo parlamentario, la maquinaria judicial contin¨²a envolvi¨¦ndolo.
Blasco est¨¢ procesado en la primera pieza separada del caso Cooperaci¨®n, en la que la propia Generalitat y la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n han pedido para ¨¦l 11 y 14 a?os de prisi¨®n respectivamente. Est¨¢ imputado en la segunda y mucho m¨¢s grande parte de la causa, que investiga globalmente el desv¨ªo de ocho millones de euros de fondos p¨²blicos destinados al Tercer Mundo. Y la fiscal¨ªa ya indaga la actividad de la supuesta mafia de la que Blasco presuntamente se rode¨® desde 1999, concedi¨¦ndole contratos desde todas las consejer¨ªas que ha dirigido desde entonces, siendo el saqueo de los fondos de cooperaci¨®n solo el ¨²ltimo cap¨ªtulo m¨¢s de esa relaci¨®n.
Fuentes jur¨ªdicas consideran que, de los posibles delitos cometidos en esa larga etapa, solo estar¨ªan indiscutiblemente prescritos los que hubiera cometido antes del a?o 2002.
Cronolog¨ªa de un esc¨¢ndalo de corrupci¨®n
7 de octubre de 2010. EL PA?S publica que el Gobierno de Francisco Camps destina 1,6 millones de ayudas a la cooperaci¨®n a comprar pisos en Valencia.
11 de octubre de 2010. La diputada socialista Clara Tirado denuncia en fiscal¨ªa los hechos y aporta documentaci¨®n que acreditaba el desv¨ªo de fondos que deb¨ªan invertirse en Nicaragua. La fiscal¨ªa abre diligencias penales de investigaci¨®n.
15 de octubre de 2010. Mireia Moll¨¤, diputada de Comprom¨ªs, presenta una nueva denuncia sobre el desv¨ªo de fondos de cooperaci¨®n en la Consejer¨ªa de Solidaridad y Ciudadan¨ªa. Moll¨¤ aport¨® una voluminosa cantidad de informaci¨®n interna del departamento que dirig¨ªa Blasco.
Abril de 2011. La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n denuncia los hechos en la Audiencia de Valencia, recayendo la causa en Nieves Molina, titular del juzgado n¨²mero 21 de Valencia, que declara el secreto de sumario.
Junio de 2012. Camps, presionado por su imputaci¨®n en el caso de los Trajes, prescinde en su nuevo Gobierno de todos los imputados, incluido Blasco, que se mantiene como portavoz parlamentario del PP.
Febrero de 2012. Despu¨¦s de acumular muchas horas de pinchazos telef¨®nicos, seguimientos e informes policiales, la juez ordena una oleada de detenciones que desarticula la trama.
Octubre de 2012. Blasco es imputado por el Tribunal Superior valenciano. Es relevado como portavoz en las Cortes.
Mayo-Junio de 2013. La juez Mar¨ªa P¨ªa Calder¨®n procesa a Blasco. La Generalitat pide 11 a?os de c¨¢rcel. Anticorrupci¨®n, 14. El Consell le presiona para que deje el grupo parlamentario popular hasta la fecha sin ¨¦xito.
La pol¨ªtica se mueve a un ritmo y la justicia a otro muy distinto. As¨ª, mientras el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, manten¨ªa este mi¨¦rcoles su tesis de que Blasco tendr¨¢ que abandonar el Grupo Parlamentario del PP cuando se abra juicio oral contra ¨¦l, en el Tribunal Superior de Justicia apenas acaba de concluir el plazo para la presentaci¨®n de recursos contra el auto de la juez instructora Mar¨ªa P¨ªa Calder¨®n en el que proces¨® al exconsejero y a cinco de sus ex altos cargos.
De modo que, o el PP adelanta la expulsi¨®n de Blasco, sin esperar a que se cumpla la condici¨®n de apertura de juicio oral, o tendr¨¢ que soportar que el procesado contin¨²e sentado en el esca?o durante meses.
?Cu¨¢ntos? La mejor referencia disponible para predecirlo la que proporciona otra causa judicial del Tribunal Superior valenciano en la que tambi¨¦n est¨¢n imputadas otras dos exconsejeras de la etapa de Francisco Camps que siguen siendo diputadas auton¨®micas:Milagrosa Mart¨ªnez y Ang¨¦lica Such.
Ambas se encuentran procesadas en una de las piezas separadas del caso G¨¹rtel, por haber concedido cinco millones de euros a la trama corrupta en adjudicaciones supuestamente ama?adas. Su procesamiento ¡ªel momento exacto en el que Blasco se encuentra desde hace pocos d¨ªas¡ª se dict¨® a principios de diciembre de 2012, hace seis meses, y todav¨ªa no se ha abierto el juicio oral.
De modo que ese punto, en el caso Cooperaci¨®n, est¨¢ todav¨ªa lejos. Quiz¨¢ no para el ritmo judicial, pero s¨ª para el pol¨ªtico. En paralelo, Blasco continuar¨¢ siendo investigado en la segunda pieza separada de la causa por el desv¨ªo de fondos al Tercer Mundo. En ella, adem¨¢s de los cuatro delitos por los que ya est¨¢ procesado en la primera pieza ¡ªtr¨¢fico de influencias, malversaci¨®n de caudales p¨²blicos, falsedad documental y prevaricaci¨®n¡ª al exconsejero se le atribuye tambi¨¦n el delito de cohecho. Las pruebas contra ¨¦l son m¨¢s contundentes que en la primera pieza ¡ªhay pinchazos telef¨®nicos en los que se le oye tratar la cuesti¨®n de las ayudas con Augusto C¨¦sar Tauroni, su amigo y jefe de la trama, que lleva m¨¢s de un a?o en prisi¨®n preventiva¡ª. Los hechos investigados tambi¨¦n son m¨¢s graves. Y la instrucci¨®n llevar¨¢ a¨²n tiempo.
La telara?a judicial de la que ha quedado preso Blasco se completa con la investigaci¨®n abierta en fiscal¨ªa, que puede desembocar en otra gran causa penal en la que se escudri?en las muchas adjudicaciones que Blasco dio a Tauroni consecutivamente como consejero de Empleo, Bienestar Social, Territorio y Sanidad.
Un caso especialmente feo
La Generalitat y la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n han pedido sever¨ªsimas penas de c¨¢rcel para Rafael Blasco en la primera pieza del caso Cooperaci¨®n. Pero se trata de la parte m¨¢s peque?a de la causa, centrada en el desv¨ªo de 1,6 millones de euros que deb¨ªan financiar proyectos agr¨ªcolas en Nicaragua y se emplearon en comprar pisos en Valencia. La segunda pieza es m¨¢s extensa y a¨²n m¨¢s fea. Y Blasco est¨¢ imputado en ella por cinco delitos.
La trama capt¨® m¨¢s de seis millones vaciando para ello los fondos de proyectos que deb¨ªan servir para combatir la ¡°violencia sexual y la explotaci¨®n de ni?os y adolescentes en Guinea Ecuatorial¡±. O contribuir al ¡°empoderamiento de madres adolescentes y juventud m¨¢s desfavorecida en Asuci¨®n de Paraguay¡±. O introducir ¡°agua potable en zonas rurales de El Salvador¡±. O incrementar la ¡°soberan¨ªa alimentaria de mujeres en situaci¨®n de vulnerabilidad en zonas suburbanas de Camer¨²n¡±.
La trama de la que Blasco era ¡°director¡±, seg¨²n Anticorrupci¨®n, solo logr¨® embolsarse 177.000 euros del que fue su m¨¢s ambicioso y obsceno objetivo: quedarse con los cuatro millones de euros que el consejero decidi¨® destinar a la construcci¨®n de un hospital en Hait¨ª, despu¨¦s del terremoto que devast¨® el pa¨ªs en 2010. La red lleg¨® a quedarse con los fondos de la cuestaci¨®n popular para el proyecto organizada por la Generalitat. Pero el resto del presunto plan naufrag¨® despu¨¦s de que Blasco fuera excluido del Gobierno valenciano tras las elecciones de 2011.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.