¡°La comunidad cient¨ªfica tiene que espabilar¡±

Ernesto P¨¢ramo (Lugo, 1958) dirige el museo m¨¢s visitado de Andaluc¨ªa, el Parque de las Ciencias de Granada. Estudi¨® Derecho por tradici¨®n familiar, pero la educaci¨®n le atra¨ªa m¨¢s y desde muy joven se involucr¨® en proyectos educativos alternativos. Un verano decidi¨® recorrer los museos de ciencia m¨¢s importantes de Europa y de ah¨ª sali¨® una idea en la que pocos cre¨ªan: un museo interactivo. El parque, sin embargo, ha cumplido con ¨¦xito 18 a?os. El ¡°maridaje¡± entre ciencia, tecnolog¨ªa y otras manifestaciones culturales es la clave del ¨¦xito, seg¨²n este gallego que mantiene intacta su pasi¨®n por el proyecto.

Pregunta. Ha sido recientemente reelegido para la junta directiva de la Red Europea de Museos de Ciencia y es el ¨²nico espa?ol. ?Qu¨¦ supone?

Respuesta. Sobre todo, reconocimiento de la comunidad de museos europeos al proyecto de Granada. Todo el mundo quiere estar en esa plataforma y el hecho de que en Espa?a sea el museo del Parque de las Ciencias es signo de que algo debe estar funcionando.

P. Estudi¨® Derecho, Pedagog¨ªa¡­ ?C¨®mo acab¨® dirigiendo un museo de ciencia?

R. De joven me interesaba mucho la educaci¨®n y el derecho. Con 17 a?os mont¨¦, junto a varios amigos, un sistema de educaci¨®n alternativa en un barrio marginal de La Coru?a y me enganch¨® para siempre. Despu¨¦s de trabajar en cuestiones ambientales me di cuenta que era importante tambi¨¦n dar un sustento cient¨ªfico a esa educaci¨®n ambiental.

P. Hoy nadie se imagina Granada sin el Parque de las Ciencias, pero no hace tanto, cuando empezamos, cont¨® con pocos apoyos¡­

R. M¨¢s que pocos apoyos, mucho escepticismo. A m¨ª me chocaba, pero ahora lo entiendo. En la Espa?a de los 80 o 90 esto era bastante revolucionario. Un museo interactivo, participativo, cambiante¡­

P. ?Imaginaba entonces llegar hasta aqu¨ª?

R. No. Ni las previsiones m¨¢s optimistas imaginaban el desarrollo que ha tenido. Para qu¨¦ mentir. Creo que el proyecto naci¨® bien y, aunque con dificultades, ha crecido como un ser vivo. Aprendi¨® de su propio ¨¦xito y ha tenido gran capacidad para conseguir fondos Feder, que es fundamental. Hemos logrado 35 millones de euros para Andaluc¨ªa.

P. ?Qu¨¦ es para usted un museo de ciencia?

R. Nuestro leitmotiv es muy simple: el conocimiento es preferible a la ignorancia. El sistema educativo espa?ol, con sus defectos, ha logrado que millones de personas eleven su nivel cultural, pero no es suficiente. Para m¨ª es una herramienta de comunicaci¨®n de la ciencia y forma parte de la cultura junto a la poes¨ªa, la literatura, matem¨¢ticas¡­

P. El parque tiene una asociaci¨®n con m¨¢s de 15.000 amigos. ?C¨®mo lo ha logrado?

R. A m¨ª me da hasta verg¨¹enza contarlo. Cuando empezamos decidimos crear una asociaci¨®n de amigos, esper¨¢bamos unos 300 y tenemos cerca de 16.000 personas que pagan una cuota de abono al museo. Es una cosa sorprendente y creo que se debe a que el parque es algo m¨¢s que un museo. Hay muchas actividades y no podemos olvidar otra de las claves del ¨¦xito: la potente Universidad de Granada. Adem¨¢s, el equipo, aunque peque?o, est¨¢ muy bien cohesionado.

P. ?De qu¨¦ est¨¢ usted m¨¢s orgulloso?

R. Ahora, del posicionamiento internacional. Pens¨¢bamos que eso iba a llegar mucho m¨¢s tarde y en 15 a?os nos tratamos de t¨² a t¨² con instituciones de primer nivel como se vio en la exposici¨®n del cerebro coproducida con el Museo Americano de Historia Natural de Nueva York y el Centro de Ciencias de Guandong, en China. Queramos o no, muchas veces desde Europa a los pa¨ªses del sur y a las regiones del sur del sur, se nos ve con cierto escepticismo.

P. Pero en este caso hay ese reconocimiento¡­

R. S¨ª, y es importante. Estamos siendo embajadores de otra de las caras que tiene Andaluc¨ªa, que es muy poli¨¦drica, no solo turismo de sol y playa o flamenco.

P. ?Qu¨¦ papel juega ah¨ª el parque?

R. Hemos sido germen a nivel de difusi¨®n cient¨ªfica, pero podemos hacer m¨¢s. En cualquier caso, la comunidad cient¨ªfica tiene que espabilar. Ha de saber que si la sociedad no respalda a la ciencia de verdad, ya podemos hacer lo que sea que no habr¨¢ dinero, o habr¨¢ lo justo. Tenemos que dar ese salto.

P. Mantiene los visitantes, ?se ha notado la crisis?

R. Ha llegado pero intentamos que no se note¡­ Ahora mismo somos, despu¨¦s de la Alhambra, el segundo reclamo tur¨ªstico de Granada y el museo m¨¢s visitado de Andaluc¨ªa, ha habido ajustes en el presupuesto aunque no nos ha afectado tanto como a otras instituciones. Tambi¨¦n es verdad que nos hemos educado en un alto nivel de autofinanciaci¨®n.

P. Pero hay y ha habido protestas de trabajadores¡­

R. Son fundamentalmente contratas que tienen problemas para pagar, nosotros estamos pagando a las empresas. Hemos tenido que ajustar un poco la plantilla, pero lo fundamental es que la crisis va a pasar y hay que estar bien posicionados. A m¨ª me gustar¨ªa tener m¨¢s presupuesto, pero el compromiso de las instituciones creo que es razonable para el tiempo en el que estamos.

P. ?C¨®mo se ve desde el parque lo que est¨¢ pasando con la ciencia?

R. Creo que forma parte de la baja conciencia que hay en la sociedad del papel que cumple. La clase pol¨ªtica deber¨ªa tener un poco m¨¢s de amplitud de miras. Hay que tener comunidad cient¨ªfica estable, produciendo y generando conocimiento a m¨¢s largo plazo.

P. ?Y se puede hacer algo m¨¢s desde centros as¨ª?

R. Se repite mucho el discurso de que la ciencia y la tecnolog¨ªa son importantes, pero ?la sociedad lo comprende? El progreso depende de ello y de que nosotros tengamos un papel en la ciencia y la tecnolog¨ªa. Si no, seremos una sociedad que no tendremos capacidad de ning¨²n tipo. Ah¨ª nos encontramos con una labor que hacer, pero es a medio y largo plazo.