La oposici¨®n a¨²n busca su perfil como alternativa

Llegado el ecuador de la legislatura, los partidos de la oposici¨®n siguen buscando su propio perfil como alternativa. Las malas expectativas del PP, tal y como ponen de manifiesto los ¨²ltimos sondeos electorales, no repercuten de igual manera sobre los tres partidos de izquierda, que comparten el objetivo de desalojar del Palau de la Generalitat a quienes en los comicios de 2015 habr¨¢n gobernado ya durante 20 a?os consecutivos.

Los socialistas valencianos, perjudicados tambi¨¦n por la mala imagen que tienen los ciudadanos de los partidos tradicionales, han tenido que desarrollar una estrategia tendente a minimizar la ausencia de su l¨ªder, Ximo Puig, de las Cortes Valencianas. El congreso del PSPV descabalg¨® en 2012 a Jorge Alarte de la secretar¨ªa general y de la portavoc¨ªa del Grupo Socialista cuando ya hab¨ªa arrancado la legislatura.

A partir de ah¨ª, la nueva direcci¨®n nacional del PSPV ha tenido que ir desplegando su particular plan para dar visibilidad a Puig, mediante la presentaci¨®n de iniciativas valencianas ¡ªcomo las referidas a una mejora de financiaci¨®n¡ª en el Congreso de los Diputados y en el seno del PSOE ¡ªcon aportaciones al debate econ¨®mico o territorial. Una estrategia que ha tenido que acompa?ar el actual portavoz parlamentario Antonio Torres con un discurso de perfil moderado tendente a remachar en las Cortes los puntos d¨¦biles del Consell y a preparar el lanzamiento de los mensajes del secretario general del PSPV.

Sin embargo, los avances de Puig, que ha reconectado con sectores sociales que hab¨ªan abandonado todo contacto con el PSPV y que ha mantenido la batalla contra la corrupci¨®n en los tribunales, se han visto lastrados por la estructura del partido. Las luchas cainitas en agrupaciones clave como Alicante o los debates sobre la monarqu¨ªa ¡ªque han evidenciado cierta divisi¨®n¡ª no han contribuido a transmitir confianza al electorado.

Cambio tranquilo

Comprom¨ªs es la formaci¨®n a quien los sondeos atribuyen un mayor crecimiento respecto a su posici¨®n actual. La coalici¨®n, amplia y heterog¨¦nea, se ha marcado el objetivo de ser percibida como ¡°el cambio tranquilo¡±. Sin embargo, las tensiones por conjugar dentro de Comprom¨ªs visiones distintas de pa¨ªs y, sobre todo, la pugna por pactar un modelo de participaci¨®n democr¨¢tica que garantice (y aumente) la presencia de los distintos partidos que componen la cooperativa pol¨ªtica han hecho aflorar tensiones que pueden desilusionar a parte del potencial electorado si se resuelven mal. El resultado, adem¨¢s, condicionar¨¢ la elecci¨®n del cabeza de cartel. Una carta que se juega entre Enric Morera y M¨°nica Oltra, ambos pendientes del proceso de primarias.

La coordinadora general de Esquerra Unida, Marga Sanz, es quien afronta con mayor tranquilidad un posible cambio de escenario pol¨ªtico. Sanz se ha esforzado por cohesionar internamente la formaci¨®n, sin aspavientos. Ello le ha permitido, sin desvelar siquiera si volver¨¢ a ser la candidata a la Generalitat, limar las aristas m¨¢s puntiagudas del proyecto y preparar EU para nuevos escenarios.