Inaugura Maroto, pagan otros

Un centro cultural, el de Montehermoso, pr¨¢cticamente vac¨ªo y un socav¨®n, el de la futura estaci¨®n de autobuses, en plena actividad constructiva. Son la contraposici¨®n que puede resumir los dos primeros a?os del retorno del PP a la Alcald¨ªa de Vitoria marcados por la Green Capital, cuyos efectos ¡ªel turismo aument¨® un 3%¡ª se ver¨¢n, indica el equipo de gobierno, a largo plazo. Los importantes tijeretazos en algunas ¨¢reas y la gesti¨®n de los a?os m¨¢s duros de la crisis no han frenado del todo a la ciudad, cuyo alcalde, el popular Javier Maroto, se ha caracterizado por su insistente discurso de pagar las inversiones con dinero de otras arcas, como los 50 millones de euros del Gobierno vasco y sin emitir nueva deuda este a?o ¡ªarrastra 122 millones de deuda viva, menor a los 134 con los que el PSE dej¨® la Alcald¨ªa¡ª.

Es en las grandes obras donde m¨¢s se ha notado el retorno del PP a la Alcald¨ªa de una ciudad. Maroto ser¨¢, si se cumplen los plazos, el alcalde que logre lo que muchos intentaron: inaugurar una estaci¨®n de autobuses ¡ªa finales de 2014, a las puertas de las elecciones¡ª que ning¨²n otro regidor vitoriano ha logrado. Lo ha hecho en un lugar simb¨®lico, el espacio en el que el anterior equipo, socialista, hab¨ªa empezado a construir un auditorio que llevar¨ªa, con 180 millones de euros de inversi¨®n, a la ¡°bancarrota¡± a la ciudad, seg¨²n aseguran desde la Alcald¨ªa actual, y de la mano de Bildu.

Mientras Vitoria ve c¨®mo se levanta una de sus arterias principales, la Avenida Gasteiz, de donde se han arrancado ¨¢rboles para plantar m¨¢s, obras tradicionalmente reclamadas, como el soterramiento del tren a su paso por la ciudad, se quedan en el caj¨®n de los olvidos de los grupos municipales debido al elevado nivel de inversi¨®n y la escasa prisa del Gobierno central a poner dinero. Y es que la atracci¨®n de fondos auton¨®micos no ha tenido su equivalente por parte del Gobierno central. As¨ª lo subraya el portavoz del PNV, Gorka Urtaran, que pone en contradicci¨®n los 20 millones en concepto de canon de capitalidad que pagar¨¢ el Gobierno vasco a Vitoria en cuatro a?os y los 138.000 euros del central este a?o ¡ª¡°la cifra m¨¢s baja de la d¨¦cada¡±¡ª para la ciudad. PNV y PSE coinciden en se?alar que el alcalde no ha logrado influir al Gobierno central en decisiones relacionadas con Vitoria, en cuestiones como el aeropuerto de Foronda. Maroto ¡°saca pecho ante otros, pero es poco beligerante con los suyos¡±, critica el PNV. Lo reconocen incluso desde el equipo de Maroto, que indican que ¡°se puede sacar m¨¢s¡± del Gobierno central y aseguran que van a redoblar los intentos el resto de mandato. La ¡°absoluta falta de influencia¡± que denuncian no solo se da en materia econ¨®mica, sino tambi¨¦n en cuestiones como el cierre de Garo?a. En este aspecto, Maroto est¨¢ estrat¨¦gicamente desacompasado con la l¨ªnea oficial de su partido.

En el terreno pol¨ªtico, el alcalde vive ahora una ¨¦poca dulce de la mano del PNV, su socio presupuestario para 2013 y con predisposici¨®n para los siguientes. El arranque de mandato fue convulso y plane¨® sobre ¨¦l la moci¨®n de censura. La negativa a presentar un presupuesto por parte del PP uni¨® a la oposici¨®n y empuj¨® a aprobar una norma foral que obliga a presentar las cuentas en los primeros tres meses del a?o. Aquel a?o hubo recortes draconianos en cultura y cooperaci¨®n al desarrollo que han dejado malheridos ambos sectores, que a¨²n no se han recuperado, reconoce Urtaran, pese a que en las cuentas actuales el tijeretazo no es tal. Urtaran destaca este apret¨®n de manos como un ¡°punto de inflexi¨®n¡± en las pol¨ªticas iniciadas por el alcalde y lo describe como un ¡°muro de contenci¨®n¡± de los primeros meses de recortes. Kike Fern¨¢ndez de Pinedo (Bildu) entiende al PNV como un ¡°flotador¡± para ¡°seguir recortando¡±. Toda la oposici¨®n censura las iniciativas ¡°populistas¡± ¡ªla ¨²ltima, la cita con el alcalde y los comerciantes¡ª y la querencia de Maroto por el autobombo, pese a que el equipo de gobierno subraya el recorte de publicidad, de un 40%.

Preocupa el aumento de atenci¨®n social por los efectos del desempleo

Vitoria se ha convertido en el laboratorio de pruebas de la pol¨ªtica que predica el PP vasco. Ha eliminado sociedades p¨²blicas como la Agencia para la Rehabilitaci¨®n Integral de la Ciudad Hist¨®rica, Arich, y har¨¢ lo propio con la encargada de grandes obras, Ensanche 21. Los recortes han llevado al despido de 251 interinos, seg¨²n datos del PSE que el equipo de Maroto niega, se?alando que ha aumentado los interinos de 358 a 392 y duplicado los contratos programa. Este desajuste es uno m¨¢s de los ejemplos por los que Patxi Lazcoz (PSE) asegura que en el Ayuntamiento ¡°se ha instaurado la mentira¡± y recuerda que por primera vez se ha reprobado a una concejal por no aportar la informaci¨®n real sobre el coste de la retirada de nieve el pasado invierno.

Vitoria sigue, por otro lado, en una situaci¨®n complicada en lo que a las personas se refiere. Desde el equipo de gobierno indican que buscan cumplir con el programa de unas elecciones en las que Maroto prioriz¨® ¡°la generaci¨®n de empleo y salir de la crisis¡±. En junio de 2011, el desempleo era de 17.200 personas. Hoy supera las 22.000 y Vitoria sigue siendo la quinta comarca con m¨¢s desempleo de Euskadi. Urtaran recuerda que hay en Vitoria 6.500 personas en situaci¨®n de pobreza real.

Desde C¨¢ritas, su secretario general en ?lava, Ram¨®n Ibeas, explica que han duplicado el n¨²mero de actuaciones y subraya que antes de la crisis las personas nacionales que atend¨ªan eran un 3% y ahora ya superan el 10%. Ibeas pide al Ayuntamiento que no se den vales, sino dinero, y que ¡°conf¨ªe m¨¢s en las personas¡±. Se refiere al discurso contra el fraude social que abandera el alcalde, que ha vinculado esta realidad con la inmigraci¨®n, un colectivo ¡°invisibilizado¡± en todo lo dem¨¢s por el alcalde, denuncia la oposici¨®n. Lazcoz censura que ocult¨® un informe en el que el fraude social era del 3,8%. Desde la Alcald¨ªa matizan: hay ¡°mucho fraude soterrado¡±.