CDC y el Palau: m¨¢s que conjeturas

Artur Mas afronta ma?ana su primera comparecencia en el Parlament para dar explicaciones por la implicaci¨®n de Converg¨¨ncia Democr¨¤tica de Catalunya (CDC) en el caso Palau.Todo apunta a que el presidente de la Generalitat no a?adir¨¢ nada nuevo a lo que ya ha dicho desde que estall¨® el esc¨¢ndalo y se limitar¨¢ a negar que el partido haya cobrado comisiones ¡ª5,1 millones, seg¨²n el juez¡ª a cambio de la adjudicaci¨®n de obra p¨²blica a Ferrovial.

El guion exculpatorio de la formaci¨®n nacionalista pivota sobre tres ideas-fuerza. La primera, que los responsables de finanzas del partido ¡ªel extesorero Daniel Os¨¢car es uno de los imputados¡ª han negado rotundamente los pagos il¨ªcitos. Aunque fue apartado del cargo poco despu¨¦s de las elecciones que le auparon al poder, en 2010, Mas cree en la palabra de Os¨¢car y conf¨ªa en su inocencia. La segunda, que no se han detectado irregularidades en los concursos, una realidad admitida por los investigadores. Y la tercera, consecuencia del anterior, que no hay pruebas s¨®lidas para sostener que hubo financiaci¨®n ilegal.

La conclusi¨®n de los investigadores ¡°no tiene ninguna base¡± y se apoya en ¡°puras suposiciones¡±, dijo Mas tras conocer el ¨²ltimo escrito del fiscal anticorrupci¨®n Emilio S¨¢nchez Ulled. El presidente rechaz¨® entonces comparecer en la c¨¢mara aut¨®noma; tampoco lo hizo en la comisi¨®n de investigaci¨®n de 2010. Un mes m¨¢s tarde, sin embargo, el magistrado Josep Maria Pijuan ratific¨® las tesis de la fiscal¨ªa y dio por concluida la investigaci¨®n cuatro a?os despu¨¦s de que los Mossos d¡¯Esquadra registraran el Palau, v¨ªctima de un expolio de 26,5 millones. Solo entonces, y arrastrado por la presi¨®n de la oposici¨®n, Mas solicit¨® comparecer.

El pr¨®ximo paso de la investigaci¨®n es la apertura de juicio oral. Por ahora, cabe hablar de ¡°indicios racionales¡± de delito. A tenor del juez y el fiscal, esos indicios tienen suficiente peso como para considerar a Converg¨¨ncia responsable civil a t¨ªtulo lucrativo e imponerle una fianza de 3,3 millones. Estos son algunos de los ¡°indicios s¨®lidos y plurales¡±, que no ¡°meras conjeturas¡± ¡ªson palabras del juez¡ª que perfilan la implicaci¨®n de CDC en el caso.

Testigos de las reuniones. Diversos testigos han explicado c¨®mo el extesorero Carles Torrent ¡ªmuerto en 2005¡ª visitaba con frecuencia al saqueador confeso del Palau, F¨¨lix Millet, en su despacho. Esos breves encuentros serv¨ªan ¡°para recoger el dinero en efectivo que Millet le entregaba¡±, seg¨²n el instructor. Una de las tres secretarias de Millet, adem¨¢s, afirm¨® haber visto en una caja de seguridad del Palau ¡°sobres gruixudets¡± con billetes de 500 euros.

Las agendas de Millet. Uno de los documentos m¨¢s valiosos del sumario son las agendas de Millet, donde se recogen las reuniones que el otrora factotum del Palau mantuvo con altos responsables pol¨ªticos, incluidos Torrent y el exdiputado de CiU Jaume Camps (tambi¨¦n imputado) o el directivo de Ferrovial Pedro Buenaventura.

La anotaci¨®n de ¡°Daniel¡±. La agenda de la exdirectora financiera, Gemma Montull, tambi¨¦n depar¨® sorpresas: all¨ª consta un documento que incluye pagos a un tal ¡°Daniel¡±, identificado m¨¢s tarde como Daniel Os¨¢car. Las defensas creen que esa alusi¨®n es insuficiente para acusar al extesorero.

Uno de los documentos m¨¢s valiosos del sumario son las agendas de Millet

Carpetas y obras. En otras carpetas se hallaron anotaciones relativas a las obras de la Ciudad de la Justicia, adjudicadas por 263 millones. Los papeles citaban un 4% y su correspondiente reparto. Ese es el porcentaje, seg¨²n los investigadores, de las mordidas. Seg¨²n el juez, cuatro obras centran las sospechas: adem¨¢s de los juzgados, la l¨ªnea 9 del metro, un pabell¨®n en Sant Cugat y el revestimiento de una acequia del Ebro. Ferrovial enmascar¨® los pagos como patrocinios al Palau y Millet ejerci¨® como intermediario a cambio de una comisi¨®n.

Concursos impecables. Uno de los argumentos que esgrime la defensa es que no hay indicios de que las adjudicaciones hayan vulnerado la ley. Aunque estas no resultaran ¡°arbitrarias¡± o ¡°irrazonables¡±, eso no significa que no exista un delito de tr¨¢fico de influencias que haya favorecido esas adjudicaciones. Seg¨²n juez y fiscal, Converg¨¨ncia y Ferrovial suscribieron un ¡°pacto criminal¡± entre 1999 y 2009 para asegurar un flujo de adjudicaciones. La compa?¨ªa recuerda que obtuvo siempre la mejor puntuaci¨®n en esas obras.

Los caminos del dinero. El ¡°flujo de fondos¡± de Ferrovial a CDC lleg¨® por tres v¨ªas. 1) Las entregas de dinero en efectivo (2,3 millones) a los extesoreros. 2)Las facturas falsas (2,1 millones) que cinco empresas emitieron a la instituci¨®n musical por trabajos inexistentes o servicios, que, en realidad, prestaron a Converg¨¨ncia; por ejemplo, de buzoneo electoral. Y 3) La Fundaci¨®n Trias Fargas.

El rol de la Trias Fargas. La fundaci¨®n, af¨ªn a CDC, firm¨® ¡°convenios de colaboraci¨®n aparentes¡± con el Palau por 630.655 euros. La fundaci¨®n, rebautizada como CatDem, se ha comprometido a devolver el dinero.

Los nombres de CDC. Adem¨¢s de los imputados Os¨¢car y Camps ¡ªque, supuestamente, cobr¨® por mediar en el pago de comisiones¡ª hay otros nombres que aparecen relacionados con el Palau de Millet. Como ?ngel Colom, secretario de Inmigraci¨®n del partido, que percibi¨® 75.000 euros que ya ha devuelto. El juez y el fiscal creen que en el cobro de comisiones participaron ¡°otros altos responsables del partido¡± que ejercieron ¡°el necesario ascendiente¡± sobre los cargos p¨²blicos. Pero no han podido ser identificados. Esteve Escuer, miembro del consejo nacional de CDC, recibi¨® 13.000 euros del Palau, aunque ¨¦l cre¨ªa que proced¨ªan del patrimonio personal de Millet. Y Marc Puig ¡ªexalto cargo de Pujol y cargo de confianza de Xavier Trias en el Ayuntamiento de Barcelona¡ª figura como responsable de una de las empresas que factur¨® al Palau trabajos ficticios.