¡°A los pol¨ªticos espa?oles les falta honestidad, mostrarse como son¡±

De recoger toallas en un gimnasio a asesorar a Barack Obama. El publicitario Rub¨¦n Figueres (Gandia, 1974) aterriz¨® hace quince a?os en Chicago para buscarse la vida. Como en toda carrera de fondo, desfalleci¨® en alg¨²n tramo pero se levant¨® como un resorte. Y su tes¨®n le recompens¨®. Pilota desde 2002 Alario Group, una agencia especializada en la seducci¨®n del voto hispano que asesor¨® al dem¨®crata Rahm Emanuel y contribuy¨® a la reelecci¨®n del carism¨¢tico inquilino negro de la Casa Blanca.

Pregunta. ?C¨®mo fueron sus inicios?

Respuesta. Duros y desde abajo. Como cualquier inmigrante que aterriza en EE UU. El deporte fue mi plataforma de ascenso. Daba clases de tenis en un gimnasio cuando conoc¨ª a alguien que me abri¨® las puertas de la agencia de publicidad m¨¢s grande de Chicago, Leo Burnett. Otros contactos llegaron despu¨¦s con el triatl¨®n o la nataci¨®n. Me presentaron en una piscina al alcalde de Chicago, Rahm Emanuel. Mi empresa era ya una de las m¨¢s importantes en el mercado hispano. El dem¨®crata me acerc¨® al presidente Barack Obama.

P. Veo que concibe el tenis como salvoconducto de poderosos como lo fue el p¨¢del en la Espa?a del expresidente del Gobierno Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.

R. Con el p¨¢del he hecho tambi¨¦n muchos amigos que ocupan cargos relevantes. El deporte facilita contactos.

P. ?Qu¨¦ le sirvi¨® m¨¢s su postgrado MBA o el deporte?

R. El deporte. Por eso, quiero que mis tres hijos tengan una buena carrera pero sin descuidar el ejercicio f¨ªsico.

P. ?Hubo muchos altibajos en el ascenso?

R. S¨ª. En quince a?os en EE UU he visto de todo. Pero hay una cosa cierta, el valor de la constancia. Los baches y momentos dif¨ªciles se superan. El trabajo duro recompensa.

P. ?Esa apelaci¨®n al esfuerzo le habr¨ªa garantizado el ¨¦xito en Espa?a?

R. No lo s¨¦. En Espa?a hay muchas trabas. No se premian valores como el trabajo duro. Los profesionales est¨¢n m¨¢s preparados que en EE UU pero los salarios son muy bajos. Es dif¨ªcil progresar. En cambio, las empresas americanas ascienden r¨¢pido a sus empleados v¨¢lidos.

P. ?D¨®nde pesan m¨¢s los enchufes en Espa?a o en EE UU?

R. La palabra enchufe tiene una connotaci¨®n negativa en Espa?a, donde se interpreta como aquel que coloca a su primo aunque no valga para nada. En EE UU es diferente. Se valora el networking, que es como se conoce a la red de contactos. Conocer gente, moverse bien. Se menciona incluso en el curr¨ªculum vitae. Busco ese activo como empresario que contrata.

P. ?Se ve asesorando a la alcaldesa de Valencia, la popular Rita Barber¨¢?

R. Nunca digo de este agua no beber¨¦. Pero ser¨ªa poco probable. Mi carrera est¨¢ en EE UU. La comunicaci¨®n pol¨ªtica requiere una dedicaci¨®n personal y mucho tiempo.

P. Hay quien piensa que los j¨®venes de la Comunidad Valenciana solo tienen una salida, Manises, por lo del aeropuerto¡­

R. Hay otras opciones, pero el panorama espa?ol pinta negro. Aconsejo a los j¨®venes que ampl¨ªen horizontes, que miren al exterior. Reforzar¨¢n conocimientos e idiomas.

P. ?C¨®mo encuentra Espa?a cuando vuelve?

R. Muy cambiada. Todo ha empeorado. La mayor¨ªa de mis amigos espa?oles son funcionarios. Se quejan aunque tienen trabajo. Otros est¨¢n parados o cerraron las empresas donde trabajaban desde hace a?os.

P. ?Y qu¨¦ perfil proyecta la Comunidad Valenciana en el exterior?

R. Una imagen rara. Ten¨ªa buena presencia antes de la crisis. Fue un ejemplo de modernidad, figuraba como reclamo publicitario. Recuerdo una visita a Chicago del expresidente de la Generalitat Francisco Camps. En los ¨²ltimos dos o tres a?os todo eso ha cambiado. Valencia y Espa?a proyectan una imagen similar a la de Grecia.

P. ?C¨®mo se combate la desafecci¨®n hacia los grandes partidos?

R. La opini¨®n p¨²blica espa?ola est¨¢ muy quemada. Tengo mis ideas sobre c¨®mo reencauzar la situaci¨®n. Ser¨ªa muy dif¨ªcil ponerlas en pr¨¢ctica. Necesitar¨ªa dedicaci¨®n y un tiempo del que carezco. En Chicago tengo mucho trabajo. No obstante, he mantenido contactos con partidos pol¨ªticos espa?oles.

P. ?D¨®nde le gustar¨ªa que se educasen sus hijos?

R. Soy defensor del sistema espa?ol de sanidad y educaci¨®n. Cuando llegu¨¦ a Chicago me di cuenta de que no valoramos lo tenemos hasta que se pierde. En EE UU un seguro m¨¦dico puede costar hasta 1.000 d¨®lares mensuales. Para muchas familias es un gasto impensable. Se convierte en una preocupaci¨®n similar a la de los espa?oles con la hipoteca. Lo mismo ocurre con la educaci¨®n, que es peor que la espa?ola.

P. ?C¨®mo habr¨ªa sido su carrera de haberse quedado en Gandia?

R. No lo s¨¦. Imagino que trabajar¨ªa en una empresa en un puesto de directivo medio o alto.

P. ?Es cierto que el emprendedor lo tiene m¨¢s f¨¢cil en EE UU?

R. S¨ª. Resulta m¨¢s sencillo montar una empresa.

P. ?Piensa regresar a Gandia?

R. Hasta hace unos a?os lo contempl¨¦. Ahora, ya no. En EE UU tengo una determinada posici¨®n.

P. ?Y d¨®nde se vive mejor?

R. Siempre se dice que la Comunidad Valenciana es la mejor. En Chicago disfruto de buena calidad de vida. Soy un privilegiado. Aunque un ciudadano de clase media ser¨ªa m¨¢s feliz en Gandia.

P. ?Cu¨¢l es el error imperdonable del pol¨ªtico?

R. Mentir. En EE UU no decir la verdad trunca una carrera pol¨ªtica. En Espa?a no pasa.

P. ?El pol¨ªtico valenciano depura su responsabilidad ante la corrupci¨®n?

R. Deber¨ªa dimitir si existen indicios de que ha cometido un delito. Lo importante son las consecuencias penales. En Illinois hay tres exgobernadores en la c¨¢rcel. Si la corrupci¨®n est¨¢ probada, el dirigente tiene que asumir las consecuencias. Es un ciudadano m¨¢s. El sistema espa?ol es demasiado blando.

P. ?Qu¨¦ echa en falta en la comunicaci¨®n pol¨ªtica espa?ola?

R. La honestidad. Los pol¨ªticos deben mostrarse como son. No proyectar una imagen agresiva. La t¨ªpica frase: Mire usted, se?or¡­Eso causa un baj¨®n total.

P. ?Se considera un hispano?

R. En EE UU, s¨ª. Aunque soy multicultural: europeo, hispano y norteamericano. Me identifico con los nuevos inmigrantes. Segu¨ª su camino. Me gusta contar esta historia para animar. Hay un lema claro que defiendo: S¨ª se puede.