¡°Marc, hoy vivir¨¢s un d¨ªa hist¨®rico¡±

Se lo dijeron de buena ma?ana, mientras desayunaba: ¡°Marc, cuando seas mayor te acordar¨¢s de que viviste un d¨ªa hist¨®rico¡±. Vaso de leche, la camiseta de la segunda equipaci¨®n del Bar?a, la de la senyera,y a la calle. Desde las diez de la ma?ana. Toda la familia: tres generaciones, 15 personas de entre 3 y 67 a?os. Todos de Arenys de Munt, el primer pueblo catal¨¢n que en septiembre de 2009 celebr¨® una consulta soberanista.

Marc, de siete a?os, es el mayor de los hijos de Santi Roig (38 a?os) y Anna Riera (34). Paleta ¨¦l; maestra de infantil, ella. El peque?o se llama Guillem y tiene tres a?os. No par¨® de correr y pegar saltos en todo el d¨ªa. Tambi¨¦n camiseta del Bar?a en ristre. Los padres lucieron la camiseta amarilla, la de la Via Catalana. Y estelada anudada al cuello. Emoci¨®n a tope. A lo largo de la ma?ana se les sumaron el resto de la familia: Pepita, Josep, Joaquim, Susi, Jordi, Tere, Daniela, Sonia, Dani, Oriol y Alba, para participar en la cadena humana, en los dos tramos de la carretera N-II de Arenys de Mar asignados a los vecinos de Arenys de Munt.

Los Roig-Riera son una de las miles y miles de familias que ayer salieron a la calle en toda Catalu?a para reclamar el derecho a decidir sobre la independencia de Catalu?a. Varias generaciones, desde beb¨¦s en el carrito hasta ancianos en silla de ruedas. En el caso de Arenys (de Munt y de Mar, en la comarca del Maresme) con el orgullo de ser dos de los epicentros de la jornada. Arenys de Munt por haber organizado la primera consulta hace cuatro a?os. Arenys de Mar, por ser el pueblo originario de la familia del poeta Salvador Espriu, del que este a?o se celebra el centenario de su nacimiento, y en cuyo cementerio est¨¢ enterrado.

¡°Nunca nos hemos sentido espa?oles¡±, subrayaba Santi.¡°Toda nuestra familia es de aqu¨ª, no tenemos ning¨²n v¨ªnculo con Espa?a¡±, a?ad¨ªa Anna. Se sienten independentistas y argumentan que est¨¢n ¡°hartos de ver que mucho dinero se va a Espa?a y que mientras en otras regiones tienen mejores servicios p¨²blicos, nosotros sufrimos recortes. ?Qu¨¦ pasa, que trabajamos para otros?¡±, pregunta Anna. La otra pata de su sentimiento es cultural: ¡°Somos muy distintos, me siento mucho m¨¢s europea que espa?ola¡±, prosigue Anna con sus argumentos y asegura que no es un sentimiento de superioridad, sino de distancia.

"Ante el movimiento tan grande, los pol¨ªticos se suben al carro¡±

La pareja y su familia celebra que haya sido ¡°la gente del pueblo quien haya organizado la cadena humana a trav¨¦s de la Asamblea Nacional Catalana¡±. ¡°Que se sumen los partidos a esta enorme movilizaci¨®n es una cuesti¨®n electoralista, ante un movimiento tan amplio, los pol¨ªticos no pueden dar la espalda y se suben al carro¡±, manifestaba Santi, al tiempo que celebraba que la movilizaci¨®n de ayer fuera ¡°una fiesta familar¡±.

Los cuatro bajaron de Arenys de Munt a Arenys de Mar con otras 400 personas acompa?ando a los m¨²sicos y los gegants. A medio camino se encontraron con el resto de la familia. Perro incluido, Moiso, la mascota del t¨ªo Jordi, tambi¨¦n vestido para la ocasi¨®n con una camiseta con una estelada y el lema "?Som-hi!" \[?Vamos!\].

Solo faltaban la abuela Pepita y el abuelo Josep. Estaban a pie de carretera, como voluntarios, cocinando paella para 300 personas. Un grupo de hombres y mujeres que tambi¨¦n plantaron la estrella de la bandera independentista en sus delantales confeccionados para la ocasi¨®n por una mercer¨ªa del pueblo.

Como otras tantas familias, son ciudadanos vinculados a las asociaciones del pueblo, que llevan tiempo participando en la gestaci¨®n de la Via Catalana. Hace diez d¨ªas, antes de que saliera el sol acudieron a la playa al el rodaje de uno de los anuncios promocionales de la Asamblea Nacional Catalana (ANC). Ayer, los hermanos, t¨ªos y primos que no estaban en Arenys faltaron o porque trabajaron o porque se desplazaron a otros tramos.

¡°Viendo esto, viendo tanta gente, ?no nos pueden hacer caso en Madrid?¡±

Tras almorzar en el espacio habilitado junto a los tramos 478 y 479 ¡ªde la rotonda de la antigua Renault al Hispania, como se conocen popularmente los extremos¡ª, la emoci¨®n subi¨® de tono. ¡°?Qu¨¦ quiere esta gente? ?Catalu?a independiente!¡±, ¡°?I-inde-independencia!¡±, ¡°No queremos ser una regi¨®n de Espa?a, no queremos ser un pa¨ªs ocupado¡± clamaban y cantaban las ya miles de personas congregadas.

¡°Nos hace mucha ilusi¨®n de lo vivan los ni?os, es un d¨ªa hist¨®rico¡±, repet¨ªan Santi y Anna de pie en la carretera, formando la cadena humana desde casi una hora antes de las 17.14. Tres hileras de familias apretujadas y los portavoces de la organizaci¨®n dando instrucciones para que si era preciso se formaran cuatro hileras. ¡°Que no se vea una pi?a de gente, que se vea como nos damos las manos¡±, ordenaban por megafon¨ªa. ¡°Viendo esto, viendo tant¨ªsima gente... ?No nos pueden hacer caso?¡±, preguntaba Santi volviendo la cabeza hacia Madrid.

?Y si la capital espa?ola hace caso, si se acaba celebrando la consulta, qu¨¦ puede pasar? ¡°Cinco o diez a?os atr¨¢s, el apoyo al s¨ª hubiera sido justito, pero la crisis nos ha ayudado a abrir los ojos¡±, conclu¨ªa.

Todav¨ªa faltaba escuchar los tres discursos desde El Pert¨²s, Amposta y la plaza de Catalunya de Barcelona, donde el discurso de la presidenta de la ANC, Carme Forcadell y su exigencia de que la consulta se celebre ¡°ahora y no en 2016¡± arranc¨® un estruendoso aplauso. Y cantar Els Segadors.

Acabada la cadena y pese al cansancio, Santi, Anna, Marc, Guillem y el resto de la familia se quedaron para escuchar el concierto de la Banda Biruji, de j¨®venes del pueblo. Luego, ¡°a casa a ver la tele y a conectarse a Facebook¡±. Hoy comienza el cole, pero ayer daba igual acostarse a las tantas.