Una plaza del Ayuntamiento que reivindica a Goerlich

La idea surgi¨® hace tiempo pero tom¨® forma hace un a?o cuando el investigador y coleccionista de fotograf¨ªa valenciana Jos¨¦ Huguet present¨® en la zona noble del Ayuntamiento de Valencia una recopilaci¨®n de im¨¢genes sobre la evoluci¨®n de la plaza central desde finales del siglo XIX hasta 1962.

Huguet no se rinde ante uno de los desaf¨ªos urban¨ªsticos m¨¢s relevantes de la capital, la reforma de la plaza del Ayuntamiento. El investigador plantea al Gobierno local que lidera Rita Barber¨¢ la convocatoria de un concurso de proyectos entre arquitectos para recuperar este espacio central a partir de las ideas de Goerlich, al que la capital valenciana debe parte importante de su dise?o.

El historiador propone dos espacios diferencias en la plaza al nivel actual, uno en torno a la fuente, que casi no se modificar¨ªa, y otro frente al actual edificio de Telef¨®nica, donde se agrupar¨ªan en semic¨ªrculo las actuales casetas de venta de flores, con un bar central "para conseguir un espacio l¨²dico para disfrute de ciudadanos y turistas", defiende Huguet.

Entre los dos espacios propone la construcci¨®n de una plataforma elevada de 2,40 metros de altura, pensado para los peatones y que no olvida el uso fallero del espacio, ya que durante las fiestas josefinas servir¨ªa de explanada para colocar la falla municipal y las masclet¨¤s, como ya suced¨ªa entre 1942 y 1962. Para enlazar ambos espacios ser¨ªa necesario suprimir el tr¨¢fico entre las calles Barcas y Sangre.

Huguet tambi¨¦n ha pensado en la financiaci¨®n, sobre todo en un momento en el que los presupuestos no dan m¨¢s de si. "La obra se financiar¨ªa mediante concurso entre inversores o centros comerciales, que dispondr¨ªan de la planta superior para la instalaci¨®n de sus tiendas, y de varios s¨®tanos para aparcamiento, que explotar¨ªan por un plazo de tiempo", a?ade este miembro de honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos.

"De esta forma", contin¨²a, "se recuperar¨ªa la plaza para el pueblo, y los veh¨ªculos s¨®lo tendr¨ªan que alargar un poco su recorrido alrededor de la plataforma. Incluso se podr¨ªan eliminar dos de los cuatro carriles que hoy se utilizan y tambi¨¦n las m¨¢s de 120 plazas de aparcamiento actuales, o usarlas en parte para los autobuses tur¨ªsticos de los cruceros, hoy dif¨ªciles de ubicar".

Huguet recuerda que en 1993, hace 20 a?os ya, se aprob¨® volver al proyecto de Goerlich y aunque existen propuestas del arquitecto que este historiador no comparte, s¨ª reivindica dos de ellas: que la plaza sea para los ciudadanos, no para los veh¨ªculos, y una plataforma unida, elevada que separe la zona pensada para los peatones de la poluci¨®n de los coches.