Una juez condena a dos a?os de prisi¨®n a los fundadores de un club de cannabis
El Jard¨ªn del Ed¨¦n de Burjassot cultivaba la marihuana que luego vend¨ªa
A¨²n se anuncia en la red: ¡°Asociaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro de consumidores estudiosos de los efectos del cannabis¡±. La Cannabis House Club de Burjassot acaba de ser disuelta por una juez de Paterna, que ha condenado a sus tres socios fundadores a dos a?os de prisi¨®n para cada uno por un delito contra la salud p¨²blica y otro de pertenencia a grupo criminal. La sentencia, fruto de un acuerdo entre la fiscal¨ªa y los acusados, fue dictada ayer, pero el local ya estaba cerrado. El tel¨¦fono que anunciaban ya no existe y la p¨¢gina web con las cuotas de inscripci¨®n ha sido borrada de Internet.
Se trata de una de las primeras condenas en Espa?a para los propietarios de este tipo de establecimientos que intentan burlar las leyes sobre el consumo y venta de estupefacientes. El pasado martes, un juzgado de Barcelona cerraba otro local en el Raval ¡°por traficar con drogas¡±, tras imputar al due?o. En el caso catal¨¢n, captaban a turistas por internet y por la calle con pasquines publicitarios, invit¨¢ndoles a hacerse socios para poder entrar a fumar. En realidad se trataba de un local donde se traficaba con droga, ya que era adem¨¢s el punto de venta de la marihuana.
En el caso valenciano, el conocido pub El Jard¨ªn del Ed¨¦n de Burjassot se reconvirti¨®, en febrero de 2011, en la Cannabis House Club en la misma sede de la calle Col¨®n. Los condenados son el presidente de la asociaci¨®n, Rub¨¦n C. J.; el secretario general, Eloy Ch. J., y la tesorera, Mar¨ªa ?ngeles M. de la N. C. Seg¨²n la sentencia, los tres ¡°se pusieron de acuerdo¡± para cultivar marihuana y, ¡°una vez hecha la recolecta, la facilitaban a sus socios, todos ellos consumidores de cannabis¡±. Estos pagaban una ¡°cuota de inscripci¨®n¡± cada vez que entraban al club para consumir la droga o para comprarla.
En una entrevista concedida tras su apertura por el presidente a la revista digital Yerba, Rub¨¦n C. J. manifestaba la dificultad que estaban teniendo este tipo de locales tras la entrada en vigor de la ley antitabaco. ¡°Queremos que se convierta en un lugar de encuentro, no en un bajo donde ir con los colegas a fumar¡±, afirmaba.
En su p¨¢gina web, hoy desaparecida por orden judicial, se explicaba el proceso de inscripci¨®n. En el caso de asociarse anualmente, se cobraban 120 euros, m¨¢s 10 euros de inscripci¨®n. Pero tambi¨¦n exist¨ªa la modalidad de inscripci¨®n diaria, de 10 euros, m¨¢s 2 euros por la entrada. Respecto al suministro del producto, el presidente explicaba en la entrevista de la Revista Yerba: ¡°Los socios que tengan posibilidades de realizar una plantaci¨®n podr¨¢n, una vez que se hayan quedado la parte de cannabis permitida para autoconsumo, donar el resto de la cosecha para suministrarla entre los miembros que no tienen esta opci¨®n¡±. A cambio, la asociaci¨®n se har¨ªa cargo de los costes que implicaban plantar este tipo de cultivos.
Por su parte, los miembros que no tuvieran plantaci¨®n y quisieran ¡°adquirir un m¨¢ximo de 50 gramos semanales, que es lo que dictamina la ley para autoconsumo¡±, podr¨ªan adquirirlo a precio de coste.
El 30 de marzo de 2011, la polic¨ªa entr¨® en el local de Burjassot y se incaut¨® de numerosas bolsitas de plastico transparente, preparadas con dosis de marihuana de 20 gramos, colillas de ¡°porro¡±, un cogollo de marihuana, dos trozos de hach¨ªs y una planta de ¡°cannabis sativa¡±.
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