¡°Sin Pujol no estar¨ªa donde estoy¡±

El 21 de junio de 1995 Jordi Pujol cogi¨® del brazo a Artur Mas, reci¨¦n nombrado consejero de Pol¨ªtica Territorial, y le dio un consejo que despu¨¦s se mostrar¨ªa revelador: ¡°Vigila. A partir de ahora tu casa ser¨¢ fotografiada por todas partes, el portero ser¨¢ interrogado, buscar¨¢n qui¨¦n te ha puesto las plantas del balc¨®n y mirar¨¢n y remirar¨¢n todo lo que tengas¡±. Mas, que ya atesoraba experiencia pol¨ªtica en el Ayuntamiento de Barcelona y en la Generalitat, siempre por expreso deseo de Pujol, sigui¨® el consejo a rajatabla. El mismo d¨ªa decidi¨® no ejecutar la reforma de la cocina de su casa que ¨¦l y su mujer ten¨ªan en mente desde hac¨ªa meses. Se trataba de evitar cualquier muestra de ostentaci¨®n nada m¨¢s llegar al cargo.

La an¨¦cdota, recogida en el libro Biograf¨ªa de un delf¨ªn, escrito por la periodista Montse Novell, es una de las decenas de ocasiones en las que el expresidente de la Generalitat, ahora ca¨ªdo en desgracia, ha marcado la vida del hoy presidente. Mas nunca ha ocultado que en pol¨ªtica se lo debe todo a Pujol y a su familia, que optaron por ¨¦l para evitar que CiU quedara alg¨²n d¨ªa en manos de otros dirigentes como Josep Antoni Duran o Miquel Roca. En CiU es aceptado como algo plausible que el fundador de Converg¨¨ncia eligi¨® a Mas como delf¨ªn a la espera de que su hijo, Oriol Pujol, estuviera preparado para coger las riendas del partido. Esto tampoco ocurrir¨¢, pues Oriol Pujol tuvo que dejar definitivamente la secretar¨ªa general la semana pasada, imputado por tr¨¢fico de influencias en el llamado caso de las ITV.

Hemerotecas y bibliotecas dan fe de una relaci¨®n entre Pujol y Mas que no se limita al terreno estrictamente profesional. Para Mas, como para tantos catalanes, Jordi Pujol fue una verdadera fuente de inspiraci¨®n. El actual presidente catal¨¢n admite que no se dedicar¨ªa a la pol¨ªtica si no fuera por su mentor. ¡°Sin el apoyo y la confianza de Jordi Pujol, hoy no estar¨ªa donde estoy¡±, admit¨ªa Mas en 2002. A?os m¨¢s tarde, calific¨® al expresidente de ¡°constructor de la Catalu?a moderna y promotor del respeto y del buen nombre de Catalu?a¡±.

El fundador vio en el presidente actual

Mas, que comenz¨® en la Administraci¨®n, primero en el escalaf¨®n t¨¦cnico de la Generalitat y despu¨¦s como concejal del Ayuntamiento de Barcelona, siempre ha asegurado que nunca sinti¨® una verdadera vocaci¨®n por la cosa p¨²blica. Estaba ah¨ª de paso. ¡°Mi inter¨¦s por la pol¨ªtica no nace de una revelaci¨®n ni de una iluminaci¨®n, sino por contagio¡±, dice en un libro entrevista publicado por Proa en 2002. Pujol tuvo mucho que ver en este contagio. ¡°Soy pujolista; el pujolismo es la adhesi¨®n a una persona excepcional por su val¨ªa y por su contribuci¨®n al pa¨ªs¡±, dijo Mas. Preguntado por su amistad con la familia del expresidente, promete fidelidad casi eterna. ¡°Nadie conseguir¨¢ que me olvide de ellos [los amigos] por un inter¨¦s personal, que los a¨ªsle y renuncie a su amistad. Para m¨ª hay un ejemplo muy claro, Llu¨ªs Prenafeta [ex mano derecha de Jordi Pujol, hoy imputado por corrupci¨®n], y lo mismo digo de algunos miembros de la familia Pujol Ferrussola. No los conozco a todos, pero con algunos de ellos he cultivado cierta amistad y no pienso esconderlo¡±. Se refer¨ªa Mas a la amistad que mantiene, entre otros, con el mayor de los Pujol, Jordi, hoy investigado en varios procesos judiciales por sus negocios.

Desde que el pasado viernes trascendi¨® la fortuna que Jordi Pujol ha escondido en para¨ªsos fiscales los ¨²ltimos 34 a?os, Converg¨¨ncia ha comenzado a desmarcarse del l¨ªder. Tambi¨¦n lo ha hecho Artur Mas, que lucha para que nunca se haga realidad el deseo que verbaliz¨® hace diez a?os: ¡°Ojal¨¢ alg¨²n d¨ªa yo pueda presentar un balance similar al de Pujol¡±.