Istobal emplea a presos con sueldos bajos tras ejecutar un ERE en 2013
La firma de equipos de autolavado justifica la medida para ser ¡°competitivos¡±
La deslocalizaci¨®n tambi¨¦n radica en Picassent. El centro penitenciario proporciona mano de obra barata y sin posibilidad de protestar. 14 presos trabajan para Istobal, una empresa que el a?o pasado ejecut¨® un ERE y en 2011 ya despidi¨® a 53 empleados.
Los 14 internos que trabajan para la multinacional de piezas para autolavado de veh¨ªculos forman parte del m¨®dulo 9 de la Unidad de Cumplimiento de la prisi¨®n de Picassent. Trabajan de lunes a viernes de 9 a 13.30 y alg¨²n que otro s¨¢bado, a tres euros la hora. Realizan el montaje de complementos de la empresa: alfombrillas, aspiradores o peque?as m¨¢quinas. Cobran entre 300 y 350 euros al mes. La empresa se ahorra el pago de luz, agua, tel¨¦fono e incluso parte de las cuotas de la Seguridad Social, que corren a cuenta de la administraci¨®n. Y todo ello gracias al convenio establecido con la Entidad Estatal de Derecho P¨²blico, dependiente de Instituciones Penitenciarias,
Rafael Tom¨¢s Alfaro, director general de Istobal, reconoce que se inici¨® la l¨ªnea en 2012 ¡°por una combinaci¨®n de motivos: para conseguir flexibilidad y porque se trataba de una l¨ªnea de producci¨®n que no era rentable. Ten¨ªamos que volver a ser competitivos y con esta medida lo conseguimos¡±. Pero desmiente el salario que se les aporta: ¡°Es m¨¢s del doble de los tres euros¡±. ¡°Entiendo las cr¨ªticas, pero si no lo hubi¨¦ramos hecho as¨ª hubi¨¦ramos cerrado esa l¨ªnea, lo que se traduce en una p¨¦rdida mayor de puestos de trabajo. Era trasladarla a otro pa¨ªs, como Portugal o Turqu¨ªa, cerrarla o ir a Picassent¡±.
Istobal, ubicada en L¡¯Alc¨²dia, fue creada en 1950 como una empresa familiar. Se dedica a fabricar maquinaria y piezas, y exporta a m¨¢s de 62 pa¨ªses. El grupo cuenta hoy con una plantilla cercana a 700 trabajadores (200, en sus instalaciones de Francia, Brasil y Estados Unidos) y el pasado a?o factur¨® 78 millones de euros.
El caso Oca?a
El caso de Istobal no es ¨²nico. El sindicato de prisiones Acaip dio a conocer que en las c¨¢rceles Oca?a I y II, en Toledo, cada d¨ªa entre 50 y 60 trabajadores de la empresa Merak (una multinacional alemana con factor¨ªa en Getafe) acuden a trabajar junto con unos 250 presos para ensamblar aparatos de aire acondicionado para trenes. Van a trabajar en calidad de supuestos ¡°monitores¡±, cuando ¡°la realidad es que hemos comprobado que trabajan como cualquier otro interno¡±, comentan desde el sindicato. Se trata de una empresa que desde 2009 ha despedido en Espa?a a un total de 73 de sus 450 trabajadores.
La seguridad tambi¨¦n es objeto de pol¨¦mica. En Picassent s¨®lo hay uno o dos monitores y a veces se ha supeditado la seguridad del m¨®dulo al funcionamiento del taller. En la prisi¨®n toledana, el alto n¨²mero de ¡°colaboradores¡± aconsej¨® al director de Oca?a II a autorizar su entrada sin pasar por los obligados detectores de metales. La medida se adopt¨®, seg¨²n el centro, para evitar la ¡°p¨¦rdida de tiempo¡±, pero provoc¨® la intervenci¨®n de varios trabajadores por introducir productos no autorizados como pastillas Diazepan o tarjetas de m¨®vil.
Sin embargo, la empresa despidi¨® en 2011 a 53 trabajadores y el pasado a?o anunci¨® un expediente de regulaci¨®n de empleo (ERE)de 42 trabajadores que provoc¨® huelgas y manifestaciones. Finalmente, afect¨® a 27 trabajadores. ¡°Aunque la mayor¨ªa sigue trabajando para nosotros, ya que se dio opci¨®n a prejubilaciones y recolaciones en empresas de nuestros proveedores¡±, minimiza Alfaro.
No es la ¨²nica empresa que utiliza el convenio con prisiones, que inserta el trabajo para entidades privadas en la pol¨ªtica de reinserci¨®n social y prepara a los internos para su acceso al mercado laboral. En la misma prisi¨®n de Picassent, la valenciana Industrias Ochoa de Riba-roja tiene contratados 150 internos de otro m¨®dulo para producir abrazaderas destinadas a la multinacional Hilti. Pero Istobal es la ¨²nica empresa colaboradora con Picassent que ha presentado dos expedientes de regulaci¨®n de empleo.
Este programa de reinserci¨®n se ha convertido en algunos casos en un negocio lucrativo. En la ¨²ltima memoria de Instituciones Penitenciarias, de 2012, se obtuvieron unos beneficios a nivel nacional, de cinco millones de euros (con ventas de 162 millones) gracias a la actividad productiva de los internos de todas las prisiones: un total de 12.217 presos, de los cuales 3.119 produc¨ªan para empresas privadas.
Trabajar con prisioneros ahorra costes y de ello se benefician empresas que han acometido despidos recientes. Por ello, el sindicato Acaip ha solicitado a la Comisi¨®n de Interior del Congreso que las empresas con expedientes de regulaci¨®n de empleo no puedan realizar su actividad empresarial en prisiones. Ricardo Sixto, portavoz de Interior de Izquierda Unida en el Congreso, presentar¨¢ en septiembre una Proposici¨®n No de Ley con el fin de que ¡°no se haga negocio con los expedientes de regulaci¨®n de empleo y que la administraci¨®n no les d¨¦ facilidades a estas empresas¡±. ¡°La reforma laboral se ha aprovechado por quienes hacen negocio a costa de los trabajadores. Ejecutar un ERE tendr¨ªa que ser un perjuicio a la hora de dar adjudicaciones a empresas que quieren trabajar con prisiones¡±, a?ade Sixto.
El gerente de Istobal es consciente de las cr¨ªticas pero insiste en su planteamiento: ¡°Todo lo que sea poner trabas al crecimiento de las empresas es malo. Todo lo que complique la gesti¨®n es malo para la industria y para los trabajadores. En nuestro caso hubi¨¦ramos cerrado la l¨ªnea¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.