Las encuestas ocultas del Consell

La Generalitat ha publicado este mes de agosto la mayor parte de los sondeos que permanec¨ªan ocultos desde hace casi una d¨¦cada. El Consell, que preside Alberto Fabra, empez¨® a abrir la mano a mediados del pasado mes de mayo obligado por no menos de siete sentencias desfavorables del Tribunal Superior de Justicia a otros tantos recursos de Esquerra Unida y Comprom¨ªs.

Durante d¨¦cadas el Consell ha negado a la oposici¨®n las encuestas pagadas con cargo a los presupuestos de la Generalitat con el argumento de que solo era documentaci¨®n de ¡°car¨¢cter auxiliar para la evaluaci¨®n y definici¨®n de pol¨ªticas p¨²blicas y no aborda cuestiones relacionadas con la intenci¨®n de voto ni con las valoraciones personales de los l¨ªderes pol¨ªticos¡±.

Un criterio que el TSJ ha desestimado al entender que el Gobierno valenciano estaba vulnerando el car¨¢cter p¨²blico de los datos e informes y el derecho de los parlamentarios a acceder a esta documentaci¨®n.

La difusi¨®n de los sondeos revela que los populares no explicaron toda la verdad y que, a tenor de lo difundido ahora, han preguntado por cuestiones de marcado car¨¢cter electoral como la opini¨®n de los valencianos sobre un posible gobierno de coalici¨®n de izquierdas, la labor de oposici¨®n (del PSPV, Comprom¨ªs y EU), la valoraci¨®n de la actuaci¨®n de los portavoces parlamentarios tras el debate de pol¨ªtica general o la necesidad de convocar elecciones generales.

El pasado mes de mayo, el todav¨ªa portavoz del Consell, Jos¨¦ Ciscar, present¨® el primer bar¨®metro: el correspondiente al mes de abril de este a?o en el que, efectivamente, no se realiz¨® ni una sola pregunta sobre la oposici¨®n. Pero es la excepci¨®n que confirma la regla.

A principios del pasado mes de agosto, el Consell volc¨® en su p¨¢gina web gva Oberta decenas de sondeos realizados entre 2004 y 2013. En todos ellos se pregunta sobre la labor de oposici¨®n y sobre el partido que tiene los mejores liderazgos (sin poner nombres) y los puntos fuertes y d¨¦biles de cada formaci¨®n.

Pese a ello, el diputado de Comprom¨ªs Fran Ferri pregunt¨® el pasado 1 de septiembre en las Cortes las razones por las que en la web no se hab¨ªan publicado todas las encuestas. Y, casi de inmediato aparecieron volcados varios cuestionarios m¨¢s.

Los bar¨®metros realizados desde 2004 han costado cerca de 1,5 millones de euros, seg¨²n los c¨¢lculos del diputado Ignacio Blanco, de Esquerra Unida, que ha rastreado los contratos adjudicados por la Generalitat a cuatro empresas distintas.

Los estudios sociol¨®gicos permiten constatar el deterioro electoral del PP a partir de 2010 y los cambios de posicionamiento de la sociedad valenciana, que en octubre de 2009 se ubicaba en un 5,2 (siendo 0 la extrema izquierda y 10 la extrema derecha) y que el pasado mes de enero se hab¨ªa ubicado en el 4,6.

Los estudios revelan que el PP cae y que el tripartito es visto como alternativa

El estudio sociol¨®gico realizado a principios de a?o arroj¨® datos demoledores para el Ejecutivo de Alberto Fabra, que desde hace tres a?os no oculta su preocupaci¨®n por un gobierno tripartido de izquierdas.

En enero pasado, un 62,8 de los valencianos calificaba de mala o muy mala la gesti¨®n del Consell y m¨¢s del 80% no confiaba en su presidente Alberto Fabra. El 30,2% declaraba tener poca confianza y el 53% de los valencianos ninguna. En cambio, la percepci¨®n sobre la labor de oposici¨®n, especialmente del PSPV y Comprom¨ªs, hab¨ªa mejorado respecto al sondeo anterior de octubre de 2013.

Las tablas publicadas revelan que la mayor¨ªa de los encuestados (un 53,5%) consideraban un posible gobierno progresista de coalici¨®n ¡°una alternativa¡± (un 32,6% no compart¨ªa esa opini¨®n). Por si fuera poco, un 52,6% lo consideraba un ¡°cambio necesario¡± (frente al 31,9% que no). En este contexto, los sondeos encargados por la Generalitat exploraban las posibles debilidades del tripartito e interrogaba a los valencianos si asociaba un gobierno de progreso de coalici¨®n con el independentismo (57% no y 25,7% s¨ª), el catalanismo (60,3% no y 24,8% s¨ª) o el radicalismo de izquierdas (53,2% no y el 31,5% s¨ª). Un elemento que contribuye a explicar el discurso de los populares valencianos.