¡°Cuando hay voluntad la corrupci¨®n se investiga en plazos razonables¡±

Rafael Bonmat¨ª (Valencia, 1962) es el nuevo decano del Colegio de Abogados de Valencia. Especializado en Derecho civil y mercantil desde hace 29 a?os en un despacho que fund¨® a mediados del siglo pasado su padre, fallecido recientemente, Bonmat¨ª sucede a Mariano Dur¨¢n, a cuyo equipo ha pertenecido.

Pregunta. ?Cu¨¢l es su proyecto para el colegio?

Respuesta. Uno de mis objetivos es rebajar la cuota un 10% en dos a?os. Quiero que toda la formaci¨®n b¨¢sica que reciban los colegiados sea gratuita y la puedan recibir en sus ordenadores o en sus dispositivos. Y la formaci¨®n especializada, que s¨ª sea cotizada. Y queremos implantar un sistema de certificaci¨®n de especialidades. En otros sectores profesionales se reconocen las especialidades pero en la abogac¨ªa no. De forma que el abogado que acredite experiencia sobrada en una materia concreta, por ejemplo porque ha llevado determinado n¨²mero de asuntos de familia, o de propiedad industrial o de derecho mar¨ªtimo, se le pueda reconocer. Otra v¨ªa de conseguir lo mismo ser¨¢ mediante cursos de formaci¨®n en universidades.

P. ?En qu¨¦ situaci¨®n est¨¢n los abogados?

R. Igual que el resto de ciudadanos. Somos profesionales, en su mayor¨ªa aut¨®nomos y la crisis nos ha afectado a todos. Los impagos nos afectan a todos y la menor actividad tambi¨¦n. Hay un decalaje, porque nos llegan los asuntos al final, cuando ya se han enconado, entramos los ¨²ltimos en la crisis y saldremos los ¨²ltimos.

P. ?Le preocupa que la justicia europea proh¨ªba la colegiaci¨®n obligatoria?

R. Como abogado no. S¨¦ que nos constituiremos en asociaci¨®n y nos dotaremos de los mismos servicios de los que disfrutamos. Ahora bien, los colegios profesionales son corporaciones de derecho p¨²blico, act¨²an con facultades delegadas de la Administraci¨®n. Y la organizaci¨®n del turno de oficio, el control deontol¨®gico, y la formaci¨®n de los abogados conviene que la tengan los colegios. Creo que la colegiaci¨®n obligatoria es una garant¨ªa para la ciudadan¨ªa. De esa manera, el abogado est¨¢ sometido a un control deontol¨®gico superior al que hace la Administraci¨®n en materia de consumo. Y tiene un seguro de responsabilidad civil con una cobertura de 300.000 euros. Si desregularizas todo, corres riesgos. Por eso creo que quien persigue la desaparici¨®n de los colegios no sabe la funci¨®n que cumplen.

P. ?Qui¨¦n cree que busca su desaparici¨®n?

R. Yo creo que fundamentalmente se debe a las teor¨ªas neoliberalizadoras de Europa y que aqu¨ª nos traslada el amigo (Luis) De Guindos (ministro de Econom¨ªa).

P. El Colegio de Abogados de Valencia critic¨® mucho al anterior ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallard¨®n. ?Qu¨¦ opina de su sucesor?

R. Creo que Gallard¨®n pas¨® por el Ministerio de Justicia como Atila, el rey de los hunos. Tuvo la virtud de ponernos a todo el mundo jur¨ªdico de acuerdo. El actual (Rafael Catal¨¢) es ficha nueva y est¨¢ por descubrir, pero por el momento ni una mala palabra ni una buena acci¨®n. Personalmente creo que todas las reformas que promov¨ªa Gallard¨®n estaban mal planteadas y mal orientadas.

P. ?A cu¨¢les se refiere?

R. A la de colegios profesionales, la de justicia gratuita y a la reforma de los partidos judiciales. Y medalla de honor para su ley de tasas: dijo que la recaudaci¨®n era para la justicia gratuita y se ha quedado la pasta y no hemos visto un clavo.

P. El turno de oficio ha sido un foco de tensi¨®n de los abogados y el Consell. ?En qu¨¦ situaci¨®n est¨¢?

R. El turno de oficio tiene un problema social y es que falta conciencia ciudadana de que es un servicio p¨²blico como lo es la justicia en general. Los ciudadanos no se lo exigen suficientemente a los pol¨ªticos. Y para los pol¨ªticos la justicia no es un servicio p¨²blico sino un mal necesario. Ninguno, de un color o de otro, hacen la dotaci¨®n presupuestaria necesaria porque la justicia no da votos. La justicia y el turno de oficio est¨¢n infradotados. Y no es admisible que en un Estado social y democr¨¢tico de derecho los ciudadanos menos favorecidos tengan a los profesionales peor retribuidos, aunque su calidad y formaci¨®n sea la misma que la del resto. Estas cosas tienen que ir a cargo del presupuesto, no de la vocaci¨®n de los abogados.

P. Su predecesor lleg¨® a decir que romp¨ªa relaciones con la Generalitat por este motivo. ?C¨®mo lo afronta usted?

R. Desde la lealtad institucional, tenemos que hacer es defender a los letrados, a los ciudadanos y el derecho de defensa. Tenemos que seguir siendo exigentes y que la retribuci¨®n del turno de oficio entre dentro de los umbrales de la dignidad.

P. ?Ahora no lo est¨¢?

R. Ahora es absolutamente indigno. El conflicto no se ha solucionado y la excusa siempre es la misma, las limitaciones presupuestarias.

P. La justicia ocupado un espacio muy importante en la actualidad valenciana debido a los esc¨¢ndalos de corrupci¨®n. ?Qu¨¦ ha pasado para llegar hasta aqu¨ª?

R. Yo creo que no solo hay crisis econ¨®mica sino crisis institucional. La monarqu¨ªa, la Iglesia, el Estado, los partidos¡­ Estamos en tiempos de cambio. La justicia tiene ahora m¨¢s notoriedad porque llegan casos que se produjeron hace a?os. Pero la justicia, aunque es implacable y yo estoy convencido de que igual para todos, va a paso de tortuga.

P. ?Por qu¨¦ va tan lenta?

R. Porque no tiene medios. Un ejemplo, resulta que el caso Terra M¨ªtica se le asigna a un juez, gran profesional, pero que adem¨¢s de esa megainstrucci¨®n tiene que sacar adelante los asuntos ordinarios de su juzgado. O es un h¨¦roe, que lo es, o lo reventamos. Sin embargo, para el caso Emarsa s¨ª designaron un juez, un fiscal y personal. De forma que cuando se da dotaci¨®n presupuestaria, es decir, cuando hay voluntad, los tiempos son r¨¢pidos, son razonables.

P. ?Qui¨¦n es el responsable?

R. El problema es de todos. Porque los jueces y los secretarios dependen del Ministerio de Justicia, pero la dotaci¨®n de medios materiales y la retribuci¨®n de los funcionarios de los juzgados dependen de las comunidades aut¨®nomas. Y ni uno ni las otras est¨¢n por la labor, y a sus presupuestos me remito.

P. ?Qu¨¦ opina de Podemos?

R. Creo que est¨¢ canalizando la insatisfacci¨®n social. La ciudadan¨ªa ve que los partidos cl¨¢sicos no son capaces de revertir la situaci¨®n. Por ejemplo, los viajes en el Senado. Es una tomadura de pelo que sean los partidos quienes controlen a sus partidarios. Eso tiene que ser p¨²blico y tiene que conocer la ciudadan¨ªa en qu¨¦ se gastan nuestros pol¨ªticos los impuestos que a todos nos cuesta mucho pagar.

P. ?Le preocupa el nuevo partido?

R. No, lo bueno de Podemos es que est¨¢ canalizando todos estos impulsos ciudadanos, y la ira y el encono por cauces pol¨ªticos. Porque es pol¨ªticamente como se solucionan las cosas en una democracia.

P. Va a limitar el periodo en que se puede ser decano a un solo mandato de cuatro a?os. ?Por qu¨¦?

R. Porque hay suficientes letrados en Valencia como para ocupar el puesto, y creo que en cuatro a?os lo que se ten¨ªa que hacer se hace. Supondr¨¢ rotaci¨®n, innovaci¨®n, frescura, nuevos aires y eso creo que es una pr¨¢ctica sana. Estar, servir e irte.