Los problemas internos bloquean a populares y socialistas en Alicante

A seis meses de las elecciones municipales, Partido Popular y PSPV no tienen a¨²n estrategia pol¨ªtica para Alicante. Los nervios comienzan a aflorar entre la militancia con aspiraciones para la siguiente legislatura. Entre los primeros, porque el partido no es capaz de apartar a Sonia Castedo de su cargo de alcaldesa, pese a saberse que no ser¨¢ candidata al estar imputada por presuntos delitos de corrupci¨®n. Los socialistas, en cambio, se han sumergido en su en¨¦sima crisis interna tras saberse que personas relacionadas con el PP forman parte del comit¨¦ electoral del candidato Gabriel Ech¨¢varri.

Asediada durante meses por su propio partido para que abandone la alcald¨ªa por sus problemas con la justicia, Castedo no ha dado su brazo a torcer. La posibilidad de perder un poder hegem¨®nico de dos d¨¦cadas est¨¢ creando prisas y tensiones entre algunos de sus concejales. De los actuales miembros del equipo de gobierno son varios los que est¨¢n en la posici¨®n de salida para sustituir a Castedo. Alguno de ellos hace meses renegaba de cualquier ambici¨®n y ya no esconde sus deseos en p¨²blico.

En la sede nacional del PP, donde se decidir¨¢ durante el pr¨®ximo enero qui¨¦n encabeza la lista para gobernar Alicante, se ve con ¡°estupor¡± la actitud de Castedo; especialmente despu¨¦s de que el jueves pasado tirara de iron¨ªa ante los medios diciendo que dejar¨ªa su puesto cu¨¢ndo y c¨®mo quiera, ¡°sin avisar¡±. En la direcci¨®n provincial del partido, existe la creencia entre algunos de que no acabar¨¢ la legislatura como alcaldesa pero niegan tener un sustituto hasta las elecciones.

La situaci¨®n muestra un bloqueo inquietante para el PP. Incluso si pasa a ser una concejal rasa, Castedo ser¨¢ un posible foco de conflictos para la persona que opte a gobernar Alicante. Se ha vuelto impredecible para el partido, su actitud en los ¨²ltimos tiempos es tildada de ¡°estramb¨®tica¡±. Tras cuatro mayor¨ªas absolutas, nunca estuvieron tan d¨¦biles los populares en la capital alicantina, mientras que los socialistas, en vez de aprovechar el momento, se han sumido en la pol¨¦mica.

Tres personas han dimitido desde el pasado martes de su puesto en el comit¨¦ electoral de los socialistas liderado por el diputado nacional Gabriel Ech¨¢varri, quien lleg¨® a la secretaria general del socialismo alicantino con un pasado en la conservadora Uni¨®n Valenciana. No se descarta que haya, al menos, tres m¨¢s en los pr¨®ximos d¨ªas.

Las dimisiones comenzaron tras conocerse que cuatro de los fichajes del diputado tienen un pasado en el PP: Rafael Gregori, exjefe de protocolo de los alcaldes populares Luis D¨ªaz Alperi y la propia Castedo; Germ¨¢n Iborra, quien milit¨® durante 20 a?os con los conservadores y se afili¨® al PSPV el pasado verano; Enrique Alcaraz, condenado en 2006 por vulnerar derechos sindicales y relacionado con Mariano Postigo, actual concejal del Partido Popular; y Juan Ravello, exedil del PP en La Torre de les Ma?anes entre 2003 y 2007, ¨¦poca en la que elogiaba p¨²blicamente en Twitter al PP y denostaba al PSPV.

La situaci¨®n de Ech¨¢varri, que esta semana se ver¨¢ en los tribunales con la concejal socialista Ana Paula Cid, es caldo de cultivo para futuros problemas en una agrupaci¨®n con gustos cainitas. El secretario general del PSOE, Pedro S¨¢nchez, ya le dio plant¨®n en una asamblea alegando una gripe que al d¨ªa siguiente fue superada. Solo Ravello ha sido expulsado de un comit¨¦ que tambi¨¦n hubo de ajustar la paridad de sexos incluyendo a seis mujeres. ¡°El partido debe ser m¨¢s cuidadoso y medir mejor las decisiones que se toman. Pero esto no deslegitima al candidato, que puede haberse dejado asesorar mal¡±, consider¨® con tibieza el secretario provincial del socialismo alicantino, David Cerd¨¢n.