Romeva: contra la privatizaci¨®n del agua y el pisot¨®n de Pepe

Ra¨¹l Romeva, el candidato de Converg¨¨ncia y Esquerra para el 27-S, fue uno de los diputados m¨¢s activos del Parlamento europeo. En sus 10 a?os en el esca?o como representante de Iniciativa per Catalunya-Verds (2004-2014), present¨® 627 propuestas de resoluci¨®n, 1366 preguntas parlamentarias y 2139 intervenciones en el pleno de la C¨¢mara europea. Sus palabras perfilaban una ideolog¨ªa de izquierdas, ecologista y defensora de una econom¨ªa sostenible y cooperativa. Aspectos que chocan con las tesis que defiende el presidente Artur Mas, el n¨²mero cuatro de la lista que liderar¨¢ y el hombre que revalidar¨¢ la presidencia de la Generalitat si Romeva gana las elecciones.?

Privatizaci¨®n de ATLL. La concesi¨®n de la gesti¨®n del agua (Aig¨¹es Ter-Llobregat -ATLL) a una compa?¨ªa privada, que se ha convertido en un culebr¨®n jur¨ªdico, lleg¨® a Bruselas de la mano de ICV-EUIA. Romeva consideraba la principal privatizaci¨®n de CiU contraria a las directivas europeas, a la pol¨ªtica de aguas y a la participaci¨®n p¨²blica en la elaboraci¨®n de planes y programas de medio ambiente.

Proyecto Castor. El pol¨¦mico almac¨¦n subterr¨¢neo de gas Castor en Vinar¨°s (Castell¨®n) lleg¨®, con poco ¨¦xito, a la Comisi¨®n Europea. Romeva formul¨® una pregunta parlamentaria para que la Euroc¨¢mara se pronunciara sobre la indemnizaci¨®n de 1.300 millones a la constructora ACS por la paralizaci¨®n del proyecto. El diputado ped¨ªa a la instituci¨®n europea que criticara "la socializaci¨®n de una deuda que tiene origen en un proyecto privado" y que tomara medidas "para evitar que los ciudadanos acaben pagando esta deuda".

La oficialidad del catal¨¢n. Romeva hizo coalici¨®n en varias ocasiones con otros eurodiputados catalanes, como Ramon Tremosa CiU, Oriol Junqueras, de ERC o Maria Badia, del PSC. En una de ellas, para pedir que el catal¨¢n fuera considerado idioma oficial en las instituciones europeas.

Vuelo de cazas. Romeva, Tremosa y Bad¨ªa, enviaron una carta conjunta al Parlamento Europeo para denunciar "amenazas militares" contra Catalu?a. Lo ejemplificaban con referencias a los vuelos a baja altura que realizaban cazas del ej¨¦rcito espa?ol en algunas comarcas interiores de Catalu?a.

Pisot¨®n de Pepe.?Romeva se aline¨® con el convergente Tremosa de nuevo para reclamar a la Comisi¨®n europea que deplorara el pisot¨®n que el jugador del Real Madrid Pepe dio a Leo Messi durante un partido de cuartos de final de la Copa del Rey de la temporada 2011-2012, que no fue sancionado. Finalmente, Romeva dio un paso atr¨¢s y retir¨® su firma. Aleg¨® que la intenci¨®n hab¨ªa sido debatir sobre el papel de las instituciones en los casos de violencia en el juego, pero la pregunta hab¨ªa generado "un fuerte impacto" y el debate hab¨ªa tomado un cariz no deseado. "Hay mucha gente que se ha sentido inc¨®moda y disgustada con el sitio, el momento y la forma de plantear la pregunta".

Caso Pujol. A ra¨ªz de esc¨¢ndalos como el caso Pujol, el caso Pallerols (de corrupci¨®n en Uni¨®) o el expolio del Palau de la M¨²sica, Romeva defend¨ªa, en un art¨ªculo en el diario Ara, que la corrupci¨®n no era una amenaza para el proceso independentista. "Donde verdaderamente se la juega el proceso, tanto de cara adentro como en el ¨¢mbito internacional, es en la credibilidad y en la responsabilidad que transmitan los actores sociales e institucionales encargados de conducirlo. Ganar en credibilidad es esencial. Los asuntos Pujol y Palau, entre otros, demuestran que aqu¨ª tenemos mucho trabajo por hacer. Si queremos ser cre¨ªbles tenemos que hacer las cosas de manera ejemplar, tambi¨¦n en cuanto a la lucha contra el fraude y la corrupci¨®n. No se trata s¨®lo de romper con un sistema institucional estatal claramente gripado, sino sobre todo de recuperar la credibilidad de la ciudadan¨ªa en la pol¨ªtica en general y en las instituciones en particular".

Contra las privatizaciones. Que el modelo de CDC y el de Romeva no es el mismo lo evidencia su defensa del ¨¢mbito p¨²blico y la denuncia de las privatizaciones. ?"En el actual contexto de crisis y austeridad, en que a menudo se promueven transferencias de autoridad de lo que es p¨²blico hacia lo privado, un enfoque pol¨ªtico sobre los bienes comunes representa una oportunidad para construir un nuevo proyecto democr¨¢tico basado en la participaci¨®n ciudadana. As¨ª, frente a movimientos especulativos del estilo del Castor, el fracking, las prospecciones petroleras, el Barcelona World, el alargamiento de la vida de las nucleares o el plan de cuencas, entre otras amenazas, se impone cambiar de paradigma. [...] El pa¨ªs que yo quiero es uno que apueste por hacer de la justicia ambiental y social su eje vertebrador m¨¢s s¨®lido; un pa¨ªs, en definitiva, donde no quepan (y, de hecho, que combata) la especulaci¨®n urban¨ªstica, el empobrecimiento de los mares, la privatizaci¨®n del agua y la energ¨ªa, la alimentaci¨®n y dependencia de fuentes energ¨¦ticas contaminantes y peligrosas, o el desprecio a la diversidad biol¨®gica"

Asedio al Parlament.? Ante el caso del asalto al Parlament Romeva sostuvo que la absoluci¨®n de los detenidos -algo que ni contemplaba pedir CiU- hubiera sido la opci¨®n m¨¢s razonable para el Gobierno porque, tal y como asegur¨® en un art¨ªculo en el diario ARA. "La dificultad para determinar las responsabilidades directas de las personas inculpadas con algunos de los hechos denunciados y los interrogantes que abren algunas de las medidas usadas para la identificaci¨®n y presentaci¨®n de supuestas pruebas inculpatorias, la absoluci¨®n era la respuesta m¨¢s razonable", asegur¨®. ?Romeva tambi¨¦n sostuvo las consecuencias ten¨ªan que ser proporcionales a las protestas, aunque no dud¨® en criticar los m¨¦todos empleados por los manifestantes diciendo que hab¨ªan sido contraproducentes.

La Rep¨²blica catalana.?Romeva se ha convertido en un gran defensor de la rep¨²blica catalana, especialmente desde que abandon¨® ICV. En otro art¨ªculo para el diario ARA aseguraba que ¨¦ste era el mejor momento para poder instaurar una rep¨²blica en Catalu?a debido a la cerraz¨®n del Estado. As¨ª lo plasmaba en un art¨ªculo para el diario ARA "De hecho, resulta incluso chocante (l¨¦ase decepcionante) ver c¨®mo corrientes republicanas y mon¨¢rquicas se han juntado una y otra vez, cerrando filas, en contra de las propuestas que ped¨ªan debatir la cuesti¨®n territorial desde una perspectiva republicana de pluralidad nacional, federalismo y democracia. Y nada".