?Y despu¨¦s qu¨¦?

Queda un mes para las elecciones en Catalunya. Las personas que, de manera democr¨¢tica, creemos que las elecciones sirven, por un lado para hacer una valoraci¨®n del Gobierno y, por otro, para cotejar las propuestas de futuro de los diferentes partidos, lo vamos a pasar mal. Nada de esto va a suceder y las fuerzas pol¨ªticas que lo pretendan tendr¨¢n que sufrir la f¨¦rrea censura de los medios de comunicaci¨®n p¨²blicos y privados de la caverna medi¨¢tica catalana. El uso partidista, en favor de la candidatura de Mas (Junts pel s¨ª), de la radio y televisi¨®n p¨²blica catalana ya ha recibido la cr¨ªtica del Col.legi de Periodistes de Catalunya y de los propios trabajadores del ente p¨²blico. Parece que este es el modelo de medios de comunicaci¨®n p¨²blicos que quieren los nacional soberanistas en su futura Arcadia catalana. Cero en objetividad y excelente en esp¨ªritu nacionalista.

Este esp¨ªritu nos impone unas elecciones plebiscitarias porque a los nacional soberanistas les interesa que no se hable de las pol¨ªticas del gobierno de CiU y ERC que hemos padecido, ni tampoco de cu¨¢les son las propuestas partidarias de futuro para superar la crisis, el paro, la corrupci¨®n, la pobreza y las desigualdades. Seg¨²n su planteamiento, votar a Mas es decir s¨ª a Catalunya, de modo que votar a los otros partidos te convierte en una especie de ignorante incapaz de vislumbrar el alcance hist¨®rico y revolucionario del 27-S.

Han le¨ªdo bien, algunas personas creen que el plebiscito, lejos de la cultura democr¨¢tica, es una especie de toma de la Bastilla y que al votar a Mas y su lista se abrir¨¢ un periodo de grandes cambios revolucionarios que har¨¢n que el pueblo de Catalunya haga realidad su fantas¨ªa: ¡°Atar a los perros con longaniza¡±. Para estas personas decidir la relaci¨®n administrativa de Catalunya con Espa?a es un acto revolucionario que har¨¢ que las clases populares de Catalunya, al cabo de un m¨¢ximo de 18 meses, consigan sus m¨¢s altas cotas de emancipaci¨®n social.

Una vez recuperado del golpe intelectual recibido te preguntas: ?Pero no est¨¢ liderada la lista de Junts pel s¨ª por Artur Mas, que es el alumno m¨¢s aventajado en cercenar los derechos de los trabajadores ¡ªha echado a la calle a 8.000 empleados p¨²blicos en cinco a?os¡ª, en mantener y aumentar los niveles de pobreza de sus conciudadanos, y que ha encabezado el gobierno que ha alcanzado, junto el PP en el resto de Espa?a, las m¨¢s altas cotas de corrupci¨®n de toda Europa? La respuesta la da el cabeza de lista (que no presidenciable), Ra¨¹l Romeva: ¡°Esto no tiene importancia, estamos en un momento hist¨®rico, la gran oportunidad de Catalunya¡±. Si hace falta se sacrifica el sentido com¨²n en favor de la naci¨®n.

Es preocupante la frivolidad con que tratan el quehacer del d¨ªa despu¨¦s del 27-S. Dicen: abriremos un periodo de di¨¢logo con el gobierno espa?ol y si se opone apelaremos a la UE, que sabemos que, a pesar de que hasta ahora ha tratado este tema como un asunto interno de Espa?a, cuando vea que el Gobierno espa?ol no acepta una decisi¨®n unilateral, les presionaran, y si no es suficiente, lo conseguiremos con la movilizaci¨®n de los ciudadanos para que dialogue con quienes han decidido independizarse a la brava (con 68 diputados).

Mientras algunos vivir¨¢n y comer¨¢n de la fe y del fervor nacionalista, ?c¨®mo ser¨¢ la vida cotidiana de los catalanes durante este periodo? Si el presidente es Mas se nutre de sus actuales consellers para formar gobierno (como ya han afirmado), ?continuar¨¢n las mismas pol¨ªticas de privatizaci¨®n de la sanidad? ?La televisi¨®n y la radio p¨²blicas continuar¨¢n al servicio de Mas y su Gobierno? ?Continuar¨¢n los recortes en los presupuestos de servicios sociales, dependencia, comedores escolares, becas, cultura¡­? ?Alguien piensa que durante 18 meses no va a pasar nada que afecte a los sufridos ciudadanos de este pa¨ªs, mientras los nacional soberanistas llegan al ¨¦xtasis con la declaraci¨®n unilateral de independencia? Esta falta de concreci¨®n me parece indecente y grave.

A pesar de todo la ciudadan¨ªa tiene una esperanza: que la lista de Mas no gane, ni con la ayuda (incondicional) de la CUP, para imponer esta sinraz¨®n. Est¨¢ en nuestras manos tener un gobierno que quiera acabar con las pol¨ªticas neoliberales que han empobrecido a los catalanes y que defienda el derecho a decidir, mediante refer¨¦ndum, a trav¨¦s del di¨¢logo y la movilizaci¨®n.

Joan Boada Masoliver es profesor de Historia.