Amenazas a un artista sirio por una obra en Barcelona
Nassouh Zagholouleh retira un v¨ªdeo de la galer¨ªa L&B por temor a represalias
El proyector ilumina con su fr¨ªa luz, una sala sombr¨ªa de la galer¨ªa L&B Contemporary Art de Barcelona (?laba, 58), como suced¨ªa con los aparatos antiguos cuando la obra se hab¨ªa acabado. Sin embargo, es in¨²til esperar a que la proyecci¨®n se reanude: la instalaci¨®n permanecer¨¢ mutilada hasta el cierre de la muestra, el pr¨®ximo 15 de enero. El artista sirio Nassouh Zagholouleh (Damasco, 1958), uno de los fot¨®grafos m¨¢s reconocidos de Oriente Medio, representante de Siria en la reci¨¦n clausurada Bienal de Venecia, ha preferido retirar el v¨ªdeo Un jour syrien ordinaire de la muestra hom¨®nima, a ra¨ªz de las amenazas recibidas en su pa¨ªs.
¡°Zagholouleh, que a causa del conflicto no pudo viajar a Barcelona, empez¨® a recibir llamadas intimidatorias cuando difundi¨® en Facebook la pr¨®xima inauguraci¨®n de su muestra en Barcelona. Considerando que su familia podr¨ªa ser objeto de las represalias, decidimos no exhibir el v¨ªdeo¡±, explica Cecilia Lobel, directora de L&B. Lo m¨¢s parad¨®jico es que la obra de 38 minutos, que el artista rod¨® escondido en una caja de cart¨®n desde la azotea de su casa, es una narraci¨®n sin palabras de un d¨ªa cualquiera en la vida de Damasco, protagonizado por las acciones cotidianas de gente sencilla. Ser¨ªa una estampa apacible, si no fuera por el continuo sonido de los bombardeos que no cesan desde hace cuatro a?os. ¡°En Siria las im¨¢genes se consideran armas de guerra y todo lo que sale del pa¨ªs debe tener un permiso especial¡±, indica Lobel, que ha editado un folleto donde explica la historia.
Los visitantes podr¨¢n consolarse con 22 im¨¢genes de Damas Carr¨¦, una de las series m¨¢s c¨¦lebres del fot¨®grafo sirio. Captadas en el verano de 2006, estas fotos en blanco y negro nos trasladan a la paz y armon¨ªa de la capital siria antes del conflicto. ¡°Las im¨¢genes, que se tomaron con un tel¨¦fono m¨®vil, consiguen transmitir la esencia de la Damasco de entonces, a trav¨¦s de los juegos de luz y sombra y la b¨²squeda de la abstracci¨®n m¨¢s que la propia representaci¨®n de la realidad¡±, contin¨²a Lobel, citando algo que le dijo el propio Zagholouleh, que volvi¨® a Siria tras vivir veinte a?os en Francia: ¡°Tard¨¦ 20 a?os en recoger buenas fotos de Par¨ªs, en Damasco tard¨¦ veinte minutos en encontrar aquello que buscaba¡±.
Trat¨¢ndose de Siria tambi¨¦n estas fotograf¨ªas tienen una historia at¨ªpica. La idea era hacer una edici¨®n de siete ejemplares, pero tras imprimir la primera, el estudio de Zagholouleh fue precintado, as¨ª que el artista ya no pudo acceder a sus archivos y las 50 fotos que componen la serie Damas Carr¨¦ se han quedado en obras ¨²nicas. ¡°Qui¨¦n sabe qu¨¦ pasar¨¢ con su estudio. Zagholouleh no tiene muchas esperanzas de recuperar su material¡±, lamenta Lobel. Las fotos se venden a 4.000 euros cada una. Del total de los beneficios de la venta, el 20% se destinar¨¢ a ayuda humanitaria para los refugiados sirios y el 10 % servir¨¢ para formalizar un taller educativo en colaboraci¨®n con Heritage for Peace, una ONG que trabaja para la protecci¨®n del patrimonio cultural sirio.
Antes de volver a su pa¨ªs natal, Zaghlouleh, que actualmente ense?a en la Facultad de Bellas Artes de Damasco y dirige el Departamento de Comunicaci¨®n Visual de la Liga ?rabe, trabaj¨® como periodista gr¨¢fico, realiz¨® numerosas series fotogr¨¢ficas y colabor¨® en m¨¢s de 20 documentales. Sin embargo, no fue hasta 2007 cuando, a ra¨ªz de la insistencia de su entorno, accedi¨® a su primera exposici¨®n en la galer¨ªa Ayyam de Damasco, uno de los espacios comerciales con m¨¢s prestigio de Oriente Medio. Otras piezas de la serie Damas Carr¨¦ se expusieron en el Pabell¨®n de Siria de la ¨²ltima Bienal de Venecia.
En el marco del Open Night: Poblenou Urban District, el 11 de diciembre la galer¨ªa permanecer¨¢ abierta, como los dem¨¢s espacios de Poblenou, justo hasta la medianoche.
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